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21 mayo 2005

"Islamismo, Nacionalismo, Terrorismo (Enemigos de nuestra Libertad)"

El escritor de este libro me lo ha enviado por email. También me ha indicado que cualquiera que desee copiarlo, para uso propio o para enviarlo a otra persona, puede hacerlo libremente, siempre que se cite el nombre del escritor.

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ISLAMISMO, NACIONALISMO, TERRORISMO





(Enemigos de nuestra Libertad)








©Gonzalo Villafáñez García

http://elhpc.blogspot.com





PROLOGO



El libro que tienen en sus manos, y que espero tengan a bien leer en estos tiempos donde el ocio es de escasos ratos para ser poseído plenamente. Se escribió para intentar saber donde nació el odio que produjo los atentados como el 11-S y el 11-M. Para conocer las motivaciones intelectuales que articulan la barbarie de estos atentados, en que se apoyan o defienden en última instancia sus autores y como se ha ido desarrollando la lógica del terror hasta convertirla en credo.

Este libro va más allá de un análisis histórico apoyado en los hechos, intenta - arriesgando mucho, lo sé - predecir el futuro de nuestras sociedades occidentales en el enfrentamiento contra el islamismo radical, sobre todo el negro horizonte a futuras confrontaciones y atentados que se abren a nuestra querida España, si continua la deriva radical en la situación de conflicto generalizado, y la miopía de los poderes que deben velar por al menos parar los golpes o intentar protegernos. Enmarcados en una diáspora de métodos y proyectos que abren el camino a nuevas tragedias en el futuro. Este libro elabora una serie de hipótesis finales futuras, acerca de lo que ocurrirá en Europa y por lo tanto España, y cual es el futuro posible de nuestra nación dentro de un desarrollo lógico de la historia de los acontecimientos, los cuales vamos a estudiar y quiero mostrarles para que entiendan los verdaderos peligros y de donde nacen realmente. Estudiando si el islamismo lo hicimos enemigo ahora, o bien era un problema ya muy lejano.

He querido escribir un libro valiente, aplicando las conclusiones a lo que está ocurriendo en España, sin ahorrar críticas al actual gobierno cuando las creo necesarias y base para arreglar muchas cosas y evitar las peores consecuencias, ya que creo objetivamente que perpetuar errores, será la ruina de muchos inocentes como en aquella fatídica mañana del 11 de marzo, si antes no se ponen sobre la mesa con la mayor crudeza y se rectifican. En este punto respeto profundamente a los votantes de la izquierda, ya que he sido votante de ella en diversas ocasiones, y en otras no, y creo completamente en la alternancia del poder como medida higiénica contra los vicios del mismo. Pero no decir con claridad y apoyado en la razón los tremendos errores, manipulaciones peligrosas y mostrar proyectos de solución en este terrible problema de nuestros días que son las redes del terrorismo islámico, sería no hacer buena memoria de las 193 víctimas que se produjeron en las cercanías de Atocha. Es a ellas, a las víctimas, a las que debo él haberme decidido a escribir este libro sin titubear en mi sinceridad. Justo para que no se produzcan nuevas, o se produzcan las menos posibles si la espiral de terror no puede pararse. Escribo esto de la manera más seria posible, pero buscando la complicidad del lector, para que aprenda y el mismo se convierta en una persona informada sobre este tema y otros relacionados con nuestra más candente actualidad, para que así pueda conocer sus causas.

Para escribir este libro, he leído otros evidentemente, para satisfacer mis preguntas y mi curiosidad por tan complejo tema. Me he centrado en los que han sido escritos por expertos en el mundo musulmán, y sobre todo por el especialista en el mundo islámico dentro del mundo musulmán Gilles Kepel, cuyas obras si hubieran sido leídas en profundidad en un pasado lejano o cercano, podían haber evitado errores inmensos de bulto. Sus obras son inmejorables estudios, que dejan de manera muy clara y concisa planteado, el problema que estamos viviendo con el radicalismo islámico, y explican de una manera que yo no sabría mejorar como el islamismo moderno se ha ido formando en nuestra historia moderna. De hecho uno de sus libros capitales: la yihad es el que he seguido en la elaboración de parte de mi libro, para explicar resumidamente la historia del islamismo moderno, no he querido citar expresamente de que partes del libro tomo las explicaciones, porque serían muchas y continuadas citas, ya que no he encontrado mejor libro para seguir la historia moderna del islamismo moderno, de hecho la labor de investigación histórica llevada por kepel, es de una finura y claridad completas como para haberme puesto yo a hacer otra parecida.

También en mi búsqueda de las coordenadas reales de lo que puede estar ocurriendo, hago algunas referencias al estudio de los modelos humanos del profesor Eladio Chavarri, el cual me enseñó una herramienta de primer orden para poder situarnos en el mundo moderno y poder saber lo que nos está ocurriendo en todo momento, sin equivocarnos en la situación que vivimos de la historia. Existen algunas referencias a su enfoque clarividente a la hora de tratar problemas tan complejos desperdigados por el libro. Eladio ha estudiado durante años, y con máxima precisión y en todas sus perspectivas, el modelo humano del Hombre Productor Consumidor, nuestro actual modelo, enmarcándole dentro de nuestro devenir histórico y mostrándonos la verdadera esencia del hombre que nos ha tocado vivir en Occidente. Esta magnífica obra representa un bisturí que nos puede dar las claves de muchos problemas, y para este caso del peligro radical islámico, sitúo el problema dentro de las coordenadas adecuadas para entenderlo. Ya que el Estado Islámico regido por las leyes divinas emanadas de los textos sagrados, puede ser considerado en un estudio pormenorizado de ese modelo de hombre, como otro modelo humano diferente al HPC nuestro, pudiendo averiguar cuales serán sus grietas y debilidades, aristas de enfrentamiento entre los modelos, y puntos de ruptura entre los dos posibles tipos de modelo de hombre en el futuro.


He querido confrontar islamismo y nacionalismo en un mismo libro porque pienso que ambos problemas tienen relación. Ya lo han tenido en la formación del primero, en los países árabes donde esta ideología se formó o se confronto con el nacionalismo más militante. Y pienso además, que el nacionalismo tiene un peso importante en nuestro actual punto de vista político nacional y manera de ver nuestras relaciones internacionales, como para no ver que nos repercuten ambas ideologías: como posibilidad de que el nacionalismo pueda imprimir debilidad a nuestra política internacional, en cuanto a los ataques que podamos sufrir del exterior, ya sea Al Qaeda o un país árabe con política expansionista el que nos agreda. Por ello en una primera parte del libro hablo de la historia moderna del islamismo, su gestación y como llega hasta el actual terrorismo global que vivimos, después hablo de todo lo surgido desde el 11S, con una conclusiones globales y particulares para el caso de España. La última parte del libro hablo del nacionalismo, hablando de cómo es su pensamiento, poniendo ejemplos de ello en el caso de España, y haciendo ver como el nacionalismo interviene en el problema del islamismo en diversos planos. Al final elaboro una serie de conclusiones, muy pesimistas, sobre lo que puede ocurrir entre el islamismo y el terrorismo de Al Qaeda en nuestro país en el futuro.

He escrito este libro pensando en el lector interesado en estos temas, intrincados en su exposición, tanto que es mucho el porcentaje de personas que intuye los peligros y quiere saber de donde vienen estos, pero no encuentran libros donde en un leguaje sencillo desgranen la evolución del islamismo, y los problemas conectados con el nacionalismo periférico que tenemos actualmente. Era hora de que a pesar de que pueda pecar de falta de rigor académico, se escribiera un libro sin innumerables notas a pie de página, y lleno de explicaciones acerca del Islam y la historia del mismo, que dificultasen la comprensión general. He querido escribir un libro donde la gente entendiera fácilmente de donde viene el islamismo y como ha explosionado en hechos como el 11S y el 11M, como ha sido una gestación lógica estas matanzas y puede seguir traduciéndose en graves problemas para nuestras sociedades occidentales. Explicar de una manera rápida pero científica de donde salieron las mentes asesinas que prepararon esos hechos, y como dentro de una evolución del islamismo en el mundo musulmán, este continuará trayéndonos sufrimientos iguales o parecidos.

Quiero dejar también muy claro que esto no es una crítica al mundo musulmán y a su religión, este libro trata de la evolución del mundo islamista, islámico, integrista o fundamentalista en los diferentes nombres que se utilizan, aunque esto causa bastante confusión incluso entre las comunidades musulmanas en Europa, debido a que se utilizan a veces para designar a todos los seguidores del Islam. En este libro nos referimos siempre a la corriente islamista que pretende que el Estado político y social tengan su armazón completo en las leyes emanadas de los Textos Sagrados del Islam, no me refiero al conjunto de los creyentes. Los musulmanes tienen por mi parte el mayor de los respetos. El Corán es un libro sagrado, tanto si se es cristiano o propiamente musulmán, nunca debe menospreciarse un libro que ha guiado a tantos millones de personas muchas de ellas buenas y honradas. También la figura de Mahoma tiene una talla de primera magnitud en cuanto a sabiduría y capacidad de llevar esperanza a millones de creyentes. El propio Mahoma reconocía la figura de Jesús de Nazaret como uno de los grandes profetas a respetar, y es necesario respetar a la religión del Islam como una de las grandes religiones, y además conseguir una salida al problema del islamismo.



















TRES AUTORES FUNDAMENTALES DEL ISLAMISMO

(Qoth, Mawdudi y Jomeini)



Tenemos que encontrar el principio de las cosas si queremos entenderlas y vivir con respuestas que no sean vanas, apoyarnos en gente que ha dedicado gran parte de su vida en estudiar y reflexionar sobre nuestro propio mundo. Para entender lo que ocurrió el 11 de septiembre, y hasta donde nos conduce y conducirá este suceso hay que retrotraerse primero en el tiempo para encontrar donde pudo nacer esa determinación destructiva y luego reflexionar con un método lógico, porque el horror también tiene su lógica. También nos ayudará a comprender otro 11 de marzo y poder encontrar un poco de verdad en lo que nos ocurrió, antes y después, por mucho que nos asuste o nos horrorice y algunos avergüence.

Vamos a empezar buscando las raíces del pensamiento islamista que ahora parece emerger con fuerza en el mundo musulmán desde el Pacífico hasta el Mediterráneo. Y vamos a situarnos en el momento de la historia en que la mayoría de los países árabes y musulmanes consiguen la independencia.

Como sabemos después de la Segunda Guerra Mundial, los diferentes países árabes buscaron su independencia de las antiguas potencias coloniales. Lograda esta, los políticos nacionalistas tomaron el poder e hicieron estragos en sus correspondientes países aumentando las diferencias entre las clases sociales, la consecución de la riqueza y oportunidades de desarrollarse. Fragmentaron el llamado Islam histórico (el dar el Islam) y tomando principios occidentales de la ilustración hicieron que los ulemas, los clérigos religiosos, hasta ese momento depositarios de la lengua escrita erudita, vieran peligrar su poder, al extenderse las lenguas escritas árabes, más populares.

Esta lengua popular en manos de la propaganda nacionalista de cada estado se convirtió en la legitimación política de su dominio sobre la sociedad. Pero fue esta lengua popularizada escrita la que intelectuales islamistas utilizaron para poder decir que los criterios de identidad cultural, política y social debían tener en el Islam la religión como única referencia, los nacionalistas habían conseguido mediante la propaganda y la coacción, elevar una nueva lengua árabe del pueblo a lengua política de las aspiraciones de sus naciones, desarrollando su correspondiente parafernalia de revindicaciones y proyectos mesiánicos nacionales a veces contra sus vecinos árabes. Un pequeño grupo de intelectuales islamistas utilizando esta lengua popular, ponían en tela de juicio todo el entramado de estados nacionales independientes desvaloralizándolos.

En este contexto de formación de cada nación árabe, nacieron tres corrientes llamadas a cambiar el pensamiento de parte de las masas en el mundo musulmán y a dar un nuevo sentido político a estas.



QOTH Y LOS HERMANOS MUSULMANES


El Egipcio Qoth (1906 - 1966), el paquistaní Mawdudi (1903 - 1979) y el iraní Jomeini (1902 - 1989) los dos primeros marcaron su influencia en el Islam sunita, el segundo en el Islam chiíta. Los tres se parecen y a la vez defienden cosas distintas, igual que sus logros prácticos son diferentes. Los tres se oponían al nacionalismo secular y en realidad fueron una reacción a la presión de este, se opusieron también a la concepción tradicional islámica de que la lucha política no es prioritaria. Los tres buscaban la instauración de un estado islámico erigido por la religión pero con diferentes estrategias.

Para Qoth la historia de los países árabes desde su independencia de occidente estaba estigmatizada con el término coránico jahiliyya que es el estado de “ignorancia” en que vivían los árabes antes de la revelación al profeta Mahoma. Qoth trazó el paralelismo al decir que los árabes de los nuevos estados nacionales vivían en la misma ignorancia que los árabes paganos adoradores de dioses de piedra antes de Mahoma, igual que aquellos tuvieron sus ídolos de piedra, estos habían creado ídolos simbólicos como: la nación, el socialismo…

En los años 60 escribió lo que fueron sus principales obras, llevando a cabo con ellas una revolución cultural (A la sombra del Corán, su comentario coránico, y signos de pista, el ¿Qué hacer? del movimiento islamista) todos estos libros se convirtieron en best-sellers y proclamando el surgimiento de una nueva generación coránica, para construir en el mundo contemporáneo una comunidad ideológica islámica, sobre las ruinas del nacionalismo. Lo izo inaugurando una escritura islámica sencilla y austera, muy alejada de la retórica complicada de los ulemas, sobrecargada de tradición y glosas.

Para atacar al nacionalismo - del que nacieron como reacción a su fuerza intransigente - utilizó dos conceptos creados por Mawdudi: la “soberanía” (hakimiyya) y la “adoración” (‘ubudiyya). En el Islam, Alá es el único soberano, y el único objeto de adoración de los hombres. El único dirigente justo es el que gobierna de acuerdo con lo que Alá reveló. Cuando la soberanía la detenta un “ídolo” (la nación, el partido, el ejército, el pueblo…) y se convierte en objeto de “adoración” por las masas (esto lo hacen magníficamente los estados nacionalistas autoritarios) reina el Mal, lo falso, el anti Islam, la jahiliyya.

La fuerza de este razonamiento se extendió entre la juventud de los años 70 en Egipto. Igual que el profeta destruyó los ídolos del paganismo y lo sustituyó por la utopía del Islam, Qoth puso al desnudo lo fútil de mucha propaganda nacional. No había necesidad de definir o explicar el programa de esta utopía, se basaba en la experiencia original del Profeta y de sus compañeros. El Problema nació en el margen amplio que dejaba a la interpretación de esta experiencia y la manera de repetirla en el siglo XX. Qoth murió sin haber podido precisar su pensamiento sobre este punto, sus seguidores desarrollaron todo un conjunto de teorías desde las más radicales en que toda sociedad era impía hasta los que tachaban de ello sólo al poder.

El 29 de agosto de 1966 fue ahorcado en el Egipto de Naser lo cual radicalizó la ruptura entre islamismo y nacionalistas árabes, pero que apenas tuvo eco en occidente, a finales de los setenta, su pensamiento había invertido el equilibrio de fuerzas, haciendo que la ideología islamista se convirtiera en la utopía movilizadora de las masas.

Qoth era heredero de la tradición de los Hermanos Musulmanes, la cual trasformo con aspectos de la obra del paquistaní Mawdudi, su propia experiencia egipcia y cuestiones genuinas de su obra, hasta convertir dicha tradición en una síntesis propia con unas características más activistas y radicales. Nos es importante para entender la gestación del islamismo sunita. Es también fundamental conocer el movimiento de los Hermanos Musulmanes en Egipto.

Qoth de hecho escribió sus libros en las prisiones de Naser acusado de pertenecer a la Asociación de los Hermanos Musulmanes. Creada en 1928 durante la época colonial y prohibida en 1954 por el joven estado egipcio de Naser. Fue a través de la obra de su fundador Hassan el Banna (1906 - 1949) y de su práctica de organización de masas, la matriz en que nacería el modelo de pensamiento y acción del islamismo del siglo XX. Qoth fue su primer inspirador, pero también quien supo adaptarla al postcolonialismo y hacer balance de sus fracasos, y prepararla para un estado nacionalista que le había perseguido y endurecido al chocar con sus ideas.

En esta organización confluían tanto movimientos radicales como moderados del mundo islámico. Nació cuando Ataturk (1924) abolió el califato otomano de Estambul, proclamando una república nacionalista turca y laica, al mismo tiempo que las potencias occidentales luchaban por controlar los territorios e intereses estratégicos de Oriente Medio. Los Hermanos Musulmanes fueron la respuesta a este desconcierto en el mundo musulmán, ellos decidieron sustituir al califato reclamando su dimensión política en el Islam. Frente a los partidos nacionalistas egipcios que reclamaban una independencia y una constitución democrática, los hermanos Musulmanes replicaron con una consigna muy conocida entre los islamistas a lo largo de la historia: “Nuestra constitución es el Corán”, y añadían otra de sus fórmulas, “el Islam es un sistema completo y total”. No había necesidad de buscar valores de fuera, europeos, mejor dicho: particulares, la base de todo el orden social si existe está en el Corán, que en su opinión era universal. Está doctrina es común a todas las tendencias del movimiento islamista: la solución de los problemas políticos de los musulmanes reside en la instauración de un estado islámico que aplique la shari’a (la ley extraída de los textos sagrados del Islam) de acuerdo con la tradición, debía hacerlo el califa.

La asociación de los Hermanos Musulmanes se convirtió en un movimiento de masas, que influyó y se implantó entre la pequeña burguesía, urbana humilde, los pequeños funcionarios y los maestros sobre todo. Aspiraba a un orden social sin contradicciones que dejaba de lado a los partidos políticos, porque rompían la unidad de la comunidad de los creyentes y la debilitaban frente a los enemigos del Islam. Mantuvieron buenas relaciones con e rey de Egipto, Faruk, que consideró a la asociación un contrapeso frente a los nacionalismos laicos.

El carácter aglutinador y por tanto ambivalente se repetiría en muchos movimientos islamistas contemporáneos. Y llevo a multitud de razonamientos a favor y en contra de utilizarlo. Los intelectuales árabes de izquierda consideraron a los Hermanos como un movimiento que diluía la conciencia de clase del pueblo y hacía el juego al orden establecido, comparándolo con los movimientos fascistas de aquel entonces en Europa. En la década de los 80 se hizo otra lectura progresista, según la cual si permitían que la sociedad al margen de la cultura de las elites, se integraba en la sociedad moderna aunque fuera por medio de la cultura islámica, se favorecería el proceso democrático al final del camino. Y el pueblo accedería al poder a través de la cultura islámica, aunque fuera dando un rodeo. Ambos debates siguen abiertos en la actualidad.

Banma fue asesinado en 1949, en un clima de violencia política en el que participaron los Hermanos y demás partidos políticos en Egipto. El Organismo Secreto, la rama paramilitar de la Asociación, llevo a cabo actos terroristas. Los que les acusaban de ideología "fascistoide” desde la izquierda vieron la confirmación en estos atentados. Los que les veían como progresistas relativizaron el utilizar la violencia diciendo que sólo era una parte marginal del movimiento.

Cuando los oficiales libres, Naser y sus compañeros tomaron el poder en julio de 1952, los Hermanos aplaudieron al raids, pretendía igual que ellos una unanimidad total en la sociedad de Egipto pero por medio del nacionalismo, aboliendo los partidos como primera medida, pero pronto se vio que ambos se disputaban igual escenario, a pesar que los golpistas eran hijos del pueblo próximos a la mayor parte de los miembros de los Hermanos, la sociedad sin diferencias y la instauración de un orden islámico no llegó, y el conflicto entre las dos visiones paralelas estalló de manera palpable en el intento de asesinato de Naser en otoño de 1954, éste se imputó a los Hermanos. Su organización fue disuelta, perseguidos sus miembros y detenidos muchos, se exiliaron o fueron ahorcados otros. Casi todos consideraron - cuantas veces se comete este error en la historia - que los Hermanos Musulmanes habían sufrido una derrota completa e histórica, y sobre todo - lo que hace más ridículo el razonamiento - definitiva. Egipto según estos intelectuales bien pagados iniciaba un futuro fructífero con los soviéticos (sobre como acabó ese futuro no vamos a detenernos)Durante dos décadas el movimiento desapareció de Egipto pero se extendió por el extranjero y revivió. Fue el creador de la mayor parte de las tendencias del movimiento islamista de hoy en día, desde las peores y más radicales a las más moderadas. Más tarde se definieron con relación al camino dejado por Sayyid Qoth.

¿Por qué habían fracasado los Hermanos frente a Naser y su nacionalismo? La respuesta es que el naserismo naciente consiguió atraer a la pequeña burguesía urbana, estudiantes y a los campesinos, proponiéndoles un ascenso social tangible desde que tomó el poder. Los problemas volverían a plantearse con crudeza en Egipto cuando estas clases no puedan obtener los ascensos prometidos. El Cairo actual tiene 20 millones de personas, el Egipto de Mubarak (se ha barajado que su hijo le suceda en el poder a modo de nueva monarquía republicana) más de 70 millones de almas, es una de las muchas bombas demográficas puestas en marcha en Oriente Medio. La pobreza en el Egipto actual se extiende por inmensos barrios, y miles de egipcios viven de las limosnas o propinas de los turistas. Esto nos debe recordar que los Hermanos Musulmanes en la actualidad representan el 17% del voto, aunque evidentemente el actual gobierno egipcio no le reconoce una representación semejante, únicamente les tolera, ellos no defienden métodos terroristas como los de Al Qaeda pero el terrorismo palestino es apoyado sin ninguna fisura, ya que es defender la propia tierra árabe dicen en sus discursos; critican abiertamente los contactos diplomáticos del gobierno egipcio con Israel.

Hay que decir que fuera de los Hermanos Musulmanes, pero nacidos de su ideología, existen otros grupos más radicales que en el pasado y ahora defienden completamente el terrorismo como método de lucha política. Estarían desde los que asesinaron al presidente Sadat de Egipto durante un desfile militar, hasta los que durante una época ametrallaron o degollaron turistas occidentales en viaje por el Nilo. Pertenecían a grupos radicales islámicos que proclamaban la yihad para el advenimiento de ese añorado estado islámico. A estos grupos se unen los pequeños grupos u organizaciones que han nacido amparadas a la vera de Al Qaeda, de hecho no se debe olvidar que el segundo hombre fuerte de esta gran organización es un egipcio, Ayan al Zawahr, y que quien organizó las matanzas de Atocha en Madrid fue también un egipcio. También deben añadirse todos los grupos simpatizantes con la causa palestina que agudizada actualmente por la pésima y en ocasiones asesina política del gabinete israelí, han ganado mucho público entre los jóvenes árabes, y está sirviendo seguramente para hacer crecer un sentimiento todavía más anti norteamericano y anti judío en todo Egipto. Las futuras consecuencias de la segunda guerra del Golfo, todavía no son evidentes, pero como el mismo Mubarak dijo - y él lo conoce ya que su extenso servicio secreto escucha cualquier movimiento en el mundo islámico - a G.W.Bush cuando decidió entrar en Irak: “esto va a crear cientos de Ben Laden”. Es cierto y evidente que las organizaciones terroristas, las radicales y los propios Hermanos Musulmanes están sufriendo un aluvión de adeptos que en algún momento se manifestarán, debido al clima creado desde el 11 de septiembre y algunas de las consecuencias erróneas llevadas a cabo por el gobierno norteamericano. Aunque sobre estas páginas dramáticas de nuestra historia contemporánea volveremos más tarde.

Los Hermanos Musulmanes se extienden en la sociedad no sólo por sus ideas religiosas sino también porque han creado toda una red de dispensarios gratuitos, talleres, escuelas para los más pobres, y casas de ayuda a los más necesitados, rodeando las mezquitas controladas por los Hermanos, que hace de ellos una organización que predica en todo momento con el ejemplo práctico y que consigue por ello un gran número de prosélitos entre el pueblo. Esta idea de ayudar a los musulmanes cuando lo necesitan mediante la caridad o la ayuda gratuita - idea cardinal por otro lado en el Corán - hace de ellos como hemos dicho una organización con aristas variadas que atrae a muchos, y ha seguido multiples estrategias con los poderes establecidos debido a su imagen.

De hecho fueron tolerados por el poder real de Egipto en el pasado. Una vez fueron perseguidos por el estado nacional que odiaban, Qoth creó la figura de la jahiliyya, los Hermanos pacíficos de antes rompieron al no considerar musulmanes a los miembros del cuerpo social que participaba del poder. Semejante acusación se denomina en la doctrina islámica, el takfir, que es declarar impío a alguien que es o que pretende ser musulmán, se le excomulga y destierra de la Comunidad de los Creyentes, de la Umma: Para los más rigurosos este tipo de impío no tiene derecho a ninguna protección legal, “su sangre es lícita”, lo que puede llevarle a ser condenado a muerte.

El takfir es una sentencia sin apelación pronunciada por los Ulemas, que dudan mucho en utilizarla. Corren el riesgo de excomulgarse mutuamente sin tomar antes otras medidas y llevar la Umma al desastre. Qoth que hemos dicho murió prematuramente ahorcado no precisó su pensamiento sobre este punto y dejó abierta la interpretación del uso del término jahiliyya y su consecuencia el takfir.

Los herederos de su doctrina se dividieron en tres vías: los más radicales decían que los impíos reinaban en todas partes y sólo había un escaso grupo de verdaderos creyentes. Decretaron un takfir generalizado que afecto incluso a sus propias filas. Otra vía de pensamiento decretó la excomunión sólo para los dirigentes que no gobernaban de acuerdo con los textos sagrados, el pueblo quedaba excluido. La tercera vía, sobre todo defendida por de los Hermanos Musulmanes puestos en libertad o que vivían fuera de Egipto seguidores de Hudaybi, sucesor de Banna y supremo guía, interpretaban de una manera alegórica los pasajes más duros de Qoth, la ruptura con la sociedad debía ser espiritual y no material, había que predicar para incrementar la islamización pero no condenarla por impiedad.

Estas tres vías perduraron y se criticaron entre ellas. En lugares donde pudieron asentarse sin problemas los Hermanos Musulmanes (Arabia Saudí o Jordania por ejemplo) pactaron con el poder establecido a veces temerosos de una nueva represión y la mayoría de las veces porque el propio poder les necesita para alguna legitimación. La derrota de los ejércitos nacionalistas árabes frente a Israel en la guerra de los Seis Días en junio de 1967 afecto tanto al poder de Naser y como los estados aliados de Egipto, en las grietas que surgieron y junto a otros grupos contestatarios volvieron a introducirse en la sociedad. Esta vez los Hermanos ya tenían la nueva ideología dejada por Qoth, y fecundada por otra aportación no sólo árabe, sino del subcontinente indio procedente de Mawdudi.



MAWDUDI

Suele fijarse la lupa sobre Arabia y el Oriente Medio porque fue allí donde se produjo la revelación del Profeta, y él árabe la lengua del Corán. Pero los árabes son menos de la quinta parte de los musulmanes. En la India y Pakistán tiene el islamismo profundas raíces escritas en lenguas urdús. El islamismo contrariamente a lo que ocurrió en Egipto no pasó una época de persecuciones y catacumbas. Mawdudi (1903 - 1979) tomó el relevo durante las persecuciones de los Hermanos Musulmanes para oponerse al nacionalismo musulmán. A finales de los años 20 Mawdudi había publicado en urdú su primer libro: ”La yihad en el Islam”, era la época en que Banna creó los Hermanos Musulmanes en Egipto. Mawdudi pedía un estado islámico a escala de toda la India, para él todos los nacionalismos eran impíos (kufir), sobre todo, hacía hincapié, si la concepción del Estado se inspiraba en modelos europeos. Desconfiaba de los Ulemas por aceptar gobiernos no musulmanes. Predicaba una islamización desde arriba, un Estado en que la soberanía se ejerciera en nombre de Alá y aplicando la shari’a, el Estado islámico sería la panacea para todos los problemas planteados. Para Mawdudi los cinco pilares del Islam tradicionales: la profesión de fe, la oración, el ayuno de Ramadán, la peregrinación y la limosna; no eran más que un periodo de formación para la yihad, la lucha contra las criaturas de Alá que habían usurpado su soberanía. En sus obras, la religión se convirtió en una ideología de lucha política, organizó “la vanguardia de la revolución islámica” creando un partido en 1941. Se refería a la vanguardia de los primeros musulmanes durante la Hégira, agrupados entorno a Mahoma, en el año 622, que se habían separado de los idólatras de La Meca, y se habían dirigido a Medina para fundar el estado islámico. Pero al contrario que Qoth y sus sucesores que a menudo utilizaron la violencia en la ruptura con la sociedad impía, el partido de Mawdudi tuvo una existencia legal durante la mayor parte de su historia que por cierto se mantiene en la actualidad sobre una fina cuerda, aún sabiendo que su fundador y muchos de sus dirigentes fueron encarcelados en varias ocasiones - más tarde veremos que esto fue así por la propia concepción de nacionalismo musulmán en que se fundó el Estado de Pakistán. Pero la historia es jugosa en sus enseñanzas y el partido de Mawdudi no logró pasar de resultados mediocres en todas sus elecciones, a diferencia de partidos más violentos, los Hermanos Musulmanes egipcios en los años 30 y 50, o de los partidos islamistas contemporáneos como el Partido de la Prosperidad Turco o el Frente Islámico de Salvación argelino, la jama’at-e islami - el partido de Mawdudi - no consiguió nunca una adhesión masiva a pesar de su pacífica práctica. Para Qoth esa vanguardia debía destruir el Estado impío, romper con él sin dilación de ninguna clase. Qoth habló de una concepción revolucionaria de la toma de poder que no era de Mawdudi, pero encontró numerosos seguidores entre la juventud radicalizada. Aunque pudiéramos compararlo con la revolución soviética, nunca hubo un contenido social, no eran portavoces de los oprimidos. Al contrario de lo que sí hizo la revolución iraní de Jomeini.



Jomeini y la revolución islámica


La tercera línea radical islamista nace con Jomeini, nacido un año antes que Mawdudi y cuatro que Qoth, a partir de 1962 se opuso dentro del clero al Sha, se trataba de una facción minoritaria dentro del propio clero chiíta, pero las reformas previstas por el Sha en ese año (derecho de voto a las mujeres, reforma agraria que perjudicaba al clero, juramento de los diputados sobre un libro religioso no necesariamente el Corán) y la petición de un posterior referéndum para apoyarlas, acabaron en una manifestación de protesta en la conmemoración del martirio de Hussein. Al año siguiente la inmunidad jurídica dada por el Sha a los consejeros militares norteamericanos en Irán, hizo que Jomeini le acusara de vender el país por uno dólares. Fue deportado a la ciudad santa de Nadjaf en Irak (conocido nombre ahora por nosotros) en octubre de 1978 se trasladó a Neauphle-le-Château en la región parisina. En febrero de 1979 regresaría entre las multitudes a Teherán.

Para el estudio del islamismo es en 1970 cuando Jomeini abandona su oposición tenue hasta ese momento circunscrita al ámbito moral y religioso. Publica: El Gobierno islámico, bajo la tutela del doctor de la ley, hacia un gobierno islámico. Rompe con lo defendido hasta ese momento por el resto del clero: aceptar al príncipe de turno en espera del Mesías, y la sumisión mientras al Clero. La política del quietismo chiíta se trasformó en derrocar al príncipe y poner en su lugar un gobierno islámico, cuyo supremo guía sería el doctor de la ley chiíta. Una teocracia, pero convirtiendo a los clérigos en la vanguardia de una revolución. Jomeini en sus obras habla también de los desheredados incluyendo en esta palabra a muchas y diversas clases de la sociedad y tomando un partido claro por los más pobres y sometidos a la injusticia social. No tiene ningún problema en hablar de clases oprimidas por la pobreza y en decir que la justicia social también llegaría con la instauración de es estado islámico regido por el Corán y el doctor en la ley.

Logró unir a los medios tradicionales rurales y urbanos, y a los grupos modernos sociales de las ciudades: estudiantes, universitarios y obreros que fueron valorados por Jomeini como clases portadoras de futuro frente a la injusticia opresora del Sha y su corte. Los unió a la burguesía piadosa. Durante la revolución islámica iraní, el clero jomeinista consiguió el apoyo de todos los partidos y facciones de ulemas, y capitalizaron completamente la revolución. Crearon los komitehs, comités de Salvación Pública de Irán (que nos recuerdan en cierta manera a la revolución francesa) la mayoría de ellos tenían su sede en mezquitas, haciendo que mejoras sociales como aumento de salarios, ocupación de viviendas y tierras de los “corrompidos”, se viesen bajo el lenguaje islámico. Se habla de yihad para la reconstrucción. Jomeini de manera inteligente, nombró a un ingeniero piadoso, Mehdi Bazargan para encabezar un gobierno provisional apoyado en el Frente Nacional (clases medias laicas y liberales) pero el poder real lo tenía el Consejo Secreto de la Revolución islámica formado por ulemas partidarios de Jomeini. Era el encargado de definir la ideología oficial. Una asamblea de expertos - dominada por los ulemas - y un plebiscito culminó la redacción de una constitución que daba los máximos poderes al guía en la persona de Jomeini. Los liberales, una parte de la izquierda y la minoría kurda (sunita) se opusieron, pero los seguidores de Jomeini asaltaron la embajada americana, protestando que el Sha entraba en Estados Unidos (a curarse de cáncer) y Barzagan debía dimitir certificando la derrota de las clases laicas. El ayatolá Shariat-Madari líder de los ulemas que se oponían a Jomeini, fue condenado a arresto domiciliario hasta su muerte en 1986. Delante de los ulemas jomeinistas quedaban: los intelectuales islamistas de izquierda, juventud urbana pobre y la burguesía piadosa. La trampa volvió a crearse: Bani Sadr representante de la izquierda islamista fue elegido presidente de la República con el apoyo de Jomeini, al presidente le apoyaban los grupos de izquierda y los muyahidín. Pasadas unas semanas comenzaron a ser expulsados de los campus universitarios. El PRI (Partido de la República Islámica, cercano a Jomeini) obtuvo la mayoría en el parlamento y comenzó una guerra de desgaste contra el gobierno que acabo con Bani Sadr escapando del país, terroríficos atentados de los muyahidín hasta ser estos exterminados por los islamistas sacudieron Irán. El epitafio de la izquierda lo pusieron los dirigentes del partido comunista Tudesh que tuvieron que confesar ante la televisión que eran espías soviéticos y reconocer la superioridad del Islam frente al marxismo. La consigna teorizada por Jomeini como vahdet-e kalimeh (unicidad del discurso) se había logrado.

Pero las grandes masas de jóvenes pobres seguían ahí y estaban dispuestas a pedir sus mejoras sociales. La invasión de Irán el 22 de septiembre de 1980 por el ejército de Sadam Husein, armado y preparado por las petromonarquias, Francia, Estados Unidos y Alemania, significó la aterradora salida para estos millones de jóvenes. Fueron enviados al martirio en el frente de batalla, muriendo centenares de miles en orgías de sangre, trincheras y batallas estériles, la energía política de esta juventud pobre se diluyó en esos batallones de sans culotte lanzados a la guerra y a hacer la revolución islámica. La energía religiosa se proyectó frente al exterior y los jóvenes dejaron de ser un problema interno. Se convirtieron en mártires para la revolución en monumentos y grandes paneles decorados en las ciudades.

El régimen se ganó las simpatías de estos jóvenes cuya demografía siguió y sigue expandiéndose, declarando un rigorismo islámico en costumbres y la moralidad. Todas las mujeres debían llevar el atuendo islámico completo por la ley de abril de 1983, después de aplastar a la izquierda. Actualmente en los lugares públicos iraníes se exponen los criterios que determinaron la longitud, la forma y el color de la ropa que deben vestir las mujeres.

Los miembros de los komitehs fueron los encargados de perseguir a las mujeres esquivas de la ley. Ellos procedían de las clases populares, ellas de las clases laicas y muchas de ellas intelectuales. Las clases populares son las guardianas de los valores de la revolución de Irán, lo que hace que puedan perseguir a las clases medias y los que han conservado su posición o poder cultural. Las familias de los mártires en las innumerables batallas contra Irak fueron recompensadas económicamente con numerosas becas, ningún examen para entrar en universidades, alimentos a bajos precios… todo ello gestionado por fundaciones bajo control del clero.

Esta revolución islámica en Irán que nos parece monolítica y llena de masas que mezclan sentir religioso e ideas de redistribución social, tuvo después que enfrentarse a una crisis económica debida a la mala gestión económica de los ulemas, que llevo a cambios profundos. Actualmente la demografía disparada de Irán con millones de jóvenes pidiendo reformas vuelve a poner a Irán al borde de tomar el camino de buscarse válvulas de escape en el enfrentamiento exterior. Normal a toda revolución.

Esta línea de extensión de la revolución en el exterior ya se puso en marcha por Irán, tiene uno de sus ejemplos en la creación del partido-milicia Hezbolá en el Líbano chiíta. También muchos musulmanes fueron becados, invitados y patrocinados por el gobierno iraní para extender la revolución islámica. De hecho el temor a ésta fue lo que hizo que occidente lanzara a Sadam Hussein contra Irak, y que se diera un pulso mortal entre la ideología wahabita-salafista y la ideología iraní. Siendo irónico que ambas se parezcan en cuanto a la moral y difieran en cuanto a mantener o derribar a las monarquías gobernantes. También fue irónico que en aquellos países musulmanes donde se había insultado a los ulemas ante lo ocurrido en Irán, se decidiera adularles y otorgarles medios y favores desde entonces.



Estos podríamos llamarlos los tres autores y actores principales del pensamiento islámico tan importante en nuestros días, aquel que pretende que el Corán vértebra toda la vida social, política y jurídica de un país, igual que lo haría también en todos los ámbitos de la vida personal del creyente musulmán. Pero debemos citar a parte de estos tres pensadores fundamentales del islamismo, otras corrientes y hechos históricos que entraron en contacto con ellos y sirvieron para darles si cabe mayores cotas de extensión en el mundo.

Un año antes de la creación de los Hermanos Musulmanes se creó en la India la tablighi jama’at (tabligh) “sociedad para la propagación de la fe” creada por Ilyas, que fue el movimiento de reislamización más importante del mundo. En un principio creado para hacer volver a la fe a los musulmanes indios “perdidos” dentro de la cultura hindú. Ya que sus discípulos se trasladaban a pie como el Profeta, “una escuela móvil, un convento itinerante y -en palabras del propio Ilyas - un faro de verdad y buen ejemplo en todo momento”, acabó siendo una gran red de enlaces y contactos en todo el globo para captar a nuevos militantes. En un principio para seguir una visión estricta del Islam sin entrar en contacto con la política o el poder. En los años ochenta trasladó su centro de operaciones de la India (Delhi) a Raiwind (Lahore) en Pakistán donde predicaba una visión rigorista y unificadora del Islam. El tabligh en los años setenta fue en ocasiones una avanzadilla para los islamistas que supieron utilizar sus redes y enlaces, y utilizaron a sus antiguos adeptos para sus fines particulares. Esto nos debe mostrar que en la actualidad el islamismo utiliza casi todos los tipos de mezquitas en el mundo, como otra red de contactos donde lograr apoyos o simplemente conseguir logística y prosélitos, y que gracias a la extensión de la fe musulmana por el mundo, muchas veces los movimientos islámicos se camuflan en su interior para conseguir pasar desapercibidos. Esto hace que el debate por el control de las mezquitas no sea en absoluto desacertado y que sea “curioso” que los musulmanes pacíficos hayan sido los primeros en proponer por ejemplo en España, el control de las propias mezquitas para que no existan focos islámicos escondidos en ellas.

Lo más importante de este periodo después de la independencia de los estados musulmanes es como un importante grupo de estos estados derivó hacía el nacionalismo socialista, estableciendo estrechas relaciones con Moscú. El Egipto de Naser, la Siria y el Irak de los partidos baasistas, Libia de Gadafi, Argelia de Ben Bella, Bumedien en Yemen del Sur, son ejemplos claros. En estos países los gobiernos se adueñaron del inmenso patrimonio de tierras e inmuebles “legados a Dios” por los creyentes y que permitían mantener las fundaciones piadosas y garantizar la independencia de los ulemas, los cuales pasaron a estar en nómina del Estado. Durante este periodo socialista que se combinó con un fuerte nacionalismo de cada país, el Islam sufrió un declive aunque en ningún momento desapareció de la cultura popular, vida social o del orden político. Las cofradías que son la expresión religiosa rural del Islam con gran mezcla de santos y costumbres locales preislámicas se mantuvieron, a pesar de su marcado carácter analfabeto y el auge de las ciudades frente al campo. Éstas tuvieron diversos grados de colaboración o enfrentamiento con los estados nacionales, el caso más dramático fue el de Argelia, ya que los líderes de estas cofradías se habían sentido unidos a la metrópoli colonial -gracias a una política francesa de acercamiento a ellas - y no participaron con el FNL en al guerra de la independencia, lo cual significó la desmantelación de las cofradías y la confiscación de sus tierras para la reforma agraria. Este hecho trajo después que ese vacío fuera ocupado por un rápido avance del islamismo argelino que terminó en la terrorífica guerra civil que aún sigue coleando. Y es que lo que existe desde hace siglos no puede ser arrancado en unos pocos años por mandato político aunque haya empeñó lógico y racional en hacerlo.

Lo que consiguieron estos gobiernos nacionalistas y socialistas como por ejemplo Egipto, fue expandir - que ironía - el movimiento de los Hermanos Musulmanes por todo Oriente Medio ramificando sus grupos y sedes, al tener que exiliarse de Egipto. Así es como muchos de ellos escaparon a Arabia Saudí, nuestra siguiente etapa, para completar la ideología islamista.




































Arabia Saudí, la ideología wahabita

(Islamismo en los demás países árabes)




En este país las cofradías fueron prohibidas con rudeza ya que en él, los ulemas tenían completo monopolio de la religión y el único discurso admitido también para los valores esenciales de la vida social y política. Místicos e intelectuales laicos también fueron prohibidos, esto fue así porque la monarquía saudí se fundamentó en una alianza de 1745 con el reformador puritano Muhamad Ibu Abd al Wahhab (1703 - 1792) creador de la doctrina wahabita basada en una crítica a ultranza de las supersticiones que habían adulterado el Islam original, esta doctrina es fundamental para entender el islamismo sunita de nuestros días de Qoth o Mawdudi; comparte con ellos puntos doctrinales básicos como volver a los fundamentos del Islam a parte de toda interpretación humana, y aplica rigurosamente todas las prohibiciones en los ámbitos jurídicos, moral, privado… esta ideología es sobre todo conservadora, mientras el islamismo puede ser reivindicado por grupos sociales revolucionarios como conservadores.

Fue en Arabia Saudí donde muchos Hermanos Musulmanes se refugiaron de la persecución de Naser en los 50. Proporcionaron al país que empezaba a recibir grandes cantidades de petro-dólares unas capas de dirigentes e intelectuales mejor formados que la mayoría de los saudís de la época. Desempeñaron un papel influyente en la Universidad de Medina (acabada en 1961) con alumnos de todo el mundo, los Hermanos propagaron su ideología a todo el mundo musulmán. Amasando fortunas al amparo del petróleo que se revirtieron a la muerte de Naser en Egipto y que crearon un sector bancario islámico que financió el movimiento con mayor fuerza. Los ulemas wahabitas y los intelectuales Hermanos crearon una corriente de pensamiento que preconizaba la estricta aplicación de la ley islámica, la shari’a, en todos los ámbitos de la vida, sin ningún interés social y mucho menos revolucionaria. La jahiliyya preconizada por Qoth contra todos los estados árabes, se consideró en estos medios una exageración imputada a las torturas sufridas por los Hermanos en las prisiones de Naser, pero su obra era muy apreciada, y se editó y comentó por su hermano, Mohamed Qoth que vivió en Arabia Saudí.

Dentro de la política de bloques de la guerra fría se decidió por los Estados Unidos y sus aliados árabes como la monarquía saudí, alentar, aupar y financiar a esta corriente conservadora que tenía como principales enemigos a países socialistas seguidores de Naser y aliados de los soviéticos Todos los jóvenes barbudos de la época en muchos lugares fueron alentados a integrarse en esta corriente. La historia nos volvería a demostrar después que ocurre cuando se juega a contrastar ideologías con venenos más fuertes por parte de occidente. La monarquía saudí estaba segura de controlar el experimento y creó en 1962 en La Meca La Liga Islámica Mundial. Organización no gubernamental financiada por los saudís para wahabizar el Islam a escala mundial y contrarrestar el nacionalismo socialista de Naser. El funcionamiento es sencillo; misioneros religiosos reciben donaciones de obras wahabitas, o fondos destinados a la construcción de mezquitas y a subvencionar asociaciones islámicas. Una vez decidido el beneficiario por la organización, viaja a Arabia y se le proporciona la recomendación de un generoso donante privado, miembro de la gran familia real, príncipe o simple hombre de negocios. La liga está dirigida por altos miembros religiosos saudís, Árabes procedentes o cercanos a los Hermanos Musulmanes, y ulemas de Pakistán cercanos a la escuela deobandi o al partido fundado por Mawdudi. Como vemos era necesario conocer antes a todos los actores que se van a ir agrupando a lo largo del proceso de islamización en un parte de Oriente Medio. Hay que recalcar que aunque el dinero de las petromonarquías sea vital para los ulemas estos tienen un poder religioso que ha hecho torcer el brazo en varias ocasiones a los príncipes. Los ulemas tienen una policía religiosa (mutawi’a) que está constituida en comités para el Gobierno del Bien y la Persecución del Mal que ejercen una considerable presión sobre la expresión pública de la fe en el país. Obligando a rezar, prohibiendo la mezcla de sexos, los instrumentos musicales o la representación humana… entre otra muchas cosas.

El resto de países árabes que alcanzaron su independencia y donde existían escuelas de ulemas desaparecieron poco en unos casos - Túnez -, lo cual provocó que la penetración posterior de islamistas fuese fácil; otras colaboraron con el poder ante las presiones (El Cairo); O se fundió directamente con el poder (Marruecos) cuando Hassan II se proclamó descendiente del profeta Mahoma y se atribuyó el título de “dirigente de los creyentes” recibiendo el juramento de fidelidad de los ulemas. Es en Marruecos donde el leguaje religioso se extendió a todas las capas, el islamismo en las siguientes década se extendió sin problemas, y no pudo pasar a la ruptura con el poder establecido porque el tabú de sacralizado del monarca se lo impidió, ya que el pueblo se oponía. Pero ¿qué ocurrirá cuando ese tabú caiga y Mohamed VI - hijo de Hassan II - cometa un error o vea desaparecer su poder sagrado? ¿Es bueno entonces seguir manteniendo analfabeta a la mayoría de la población marroquí? ¿El desarrollo y reformas que el país necesita pueden conducir al triunfo islámico en las urnas como pasó en Argelia dramáticamente? ¿No suele demostrarse en muchos casos que cuando la estructura religiosa, los ulemas, son perseguidos, utilizados o comprados, se está abriendo las puertas al islamismo popular que preconiza el establecimiento de un estado islámico en todos los ámbitos? ¿No se debería probar la estrategia de dejar a los ulemas cumplir su función de manera independiente de interpretación de los textos sagrados del Islam, para que el gran campo social que ocupa la religión pueda ser ocupado por sus enseñanzas y no por otros que quieren hacerse escuchar? ¿Cuál pueden ser las consecuencias del establecimiento de un estado islámico en Marruecos, para la Unión Europea y sobre todo para España? ¿No crea ya escalofríos el haber comprobado que “casi todos” los que participaron en el gran atentado del 11-M eran marroquíes? ¿Y esos escalofríos no son aún peores para España si sabemos que las cárceles de Mohamed VI están llenas de islamistas como estuvieron en su día las de muchos países que entraron en crisis en la zona? ¿Qué clase de gobierno necesitaría España si tuviera que afrontar la situación de una extensión del islamismo en Marruecos? ¿Un gobierno sin “amigos” poderosos? ¿Qué papel tendría que jugar nuestra monarquía, incluso al dirigirse a su par de Marruecos llegado el caso? Son preguntas que podemos borrar para mirar a otro lado pensando que no tiene porqué ocurrir. En el momento de escribir este libro, Marruecos está siendo tanteado por los Estados Unidos, su gran aliado, para que envíe un importante contingente de tropas a Irak.

Hay tres ejemplos que demuestran lo irónico de haber actuado contra los ulemas. Cuando en Argelia en los ochenta el FIS comenzó a entrar a raudales entre las capas más bajas y rurales de la población, las autoridades laicas no tuvieron otro remedio que importar ulemas egipcios para dirigir la recién creada universidad islámica de Constantine, dado que antes habían acabado con los autóctonos. Los intelectuales del FIS no tuvieron enfrente muchos que conocieran los textos sagrados y que hicieran una lectura del Corán distinta a la suya. En los años cincuenta y sesenta el Estado turco que había abolido las madrasas donde se formaban los ulemas decidió crear institutos para imanes y predicadores “moderados” con educación mixta religiosa y secular, que apoyasen la sociedad laica. Se llenaron los institutos, se beneficiaron las clases rurales ya que eran gratuitas y les permitían una educación, pero conservaron su ideología y el éxito de los institutos fue nulo.

El ejemplo de los ulemas de Pakistán sitúa en el extremo, de lo que surge cuando el movimiento es espontaneo. Cuando en 1857 Gran Bretaña destronó al último soberano musulmán de Delhi, los musulmanes perdieron su poder político y vieron que vivían en una proporción de 1 a 3 a favor de los hindúes dentro del subcontinente indio. Para no perder su pureza fundaron el movimiento de reafirmación islámica “deobandi” creado en la ciudad de Deoband en 1867. El objetivo era formar ulemas capaces de emitir fatwas (opiniones jurídicas autorizadas) en todos los aspectos de la vida cotidiana, con el fin de saber si su carácter está de acuerdo con las prescripciones del Islam. Todo el proceso se interpreta de una forma rigorista, puritana y conservadora, muy próxima a la corriente wahabita de Arabia que hemos visto. Gracias a la prescripción de este conjunto de reglas precisas los musulmanes podían seguir viviendo en una sociedad no islámica sin mancharse con el pecado. Establecidas estas madrasas en el noroeste de la India y lo que hoy es Pakistán, produjeron en poco más de un siglo un número de fatwas estimado en varios centenares de miles. Hoy en el siglo XXI, una madrasa importante tiene su centro de fatwas, donde los ulemas sentados en el suelo, con su biblioteca islámica cerca, durante todo el día escriben fatwas en respuesta a preguntas sobre el carácter licito de una acción determinada que se les pregunta de viva voz, por carta o por teléfono, imaginamos que ya será posible hacerlo por Internet. Cuando se creó Pakistán todo este gran conjunto de madrasas y ulemas pudo negociar sin problemas con el nuevo estado. Pidieron recursos elevados, pensionados para sus alumnos, empleos para estos en el estado aunque únicamente supieran de textos sagrados del Islam enseñados a la manera más clásica. Presionaron para islamizar las leyes, administración, el sistema bancario y para que sus alumnos asumieran puestos de poder en el estado. Crearon partidos de ulemas - algo desconocido para el propio Islam - JUI (Asociación de los ulemas del Islam), y la JUP (Asociación de Ulemas de Pakistán) que junto al partido la jama’at-i islami de Mawdudi pedían la islamización completa del estado, la sociedad y el país en todos sus ámbitos (Se trataba de un proceso similar al seguido por los partidos religiosos judíos en nuestros días, que mantienen en estos momentos miles de alumnos judíos ortodoxos, estudiantes del Talmud y seguidores de la idea de la creación de un estado judío basado en las enseñanzas de Yaveh; su fuerza y número ha hecho que tengan suficientes diputados para participar en las formaciones de los gobiernos conservadores para gobernar Israel, y poder tener su propia parte del presupuesto) Los militares y las elites occidentalizadas en el poder intentaron controlar semejante presión mediante diversas políticas, pero era tremendamente difícil porque Pakistán existía porque se apoyaba en un nacionalismo musulmán, se había creado desgarrándose de la India, dejándose arrastrar por un nacionalismo que quería la autodeterminación a toda costa, sin importarle, como casi siempre que el fin es la autodeterminación, los medios o las alianzas. En definitiva Pakistán se creó entre terribles deportaciones, muertes y saqueos. Era un estado cuyo fundamento se basaba en profesar la religión musulmana, con un nacionalismo que había inculcado al pueblo que no debían tener ningún futuro unido a la mayoría hindú. Por mucho que los dictadores nacionalistas pudieran pensar en perseguir a los ulemas en Pakistán, ellos tenían que definir la identidad de la propia nación ya que decía ser una nación musulmana frente a otra que no lo era, y por ello los ulemas tenían una fuerza que el nacionalismo no pudo rebajar.

El último ejemplo nos demuestra que cuando se les dejó a una extensión completa de sus prácticas, los ulemas acabaron pidiendo lo mismo que el movimiento islámico, a la larga sería la cuna del radicalismo islámico más visible como ya veremos. No queda claro como llegar a la mejor política para que al final aparezca el mismo resultado con el clero conservador del Islam. Sin olvidar que este resultado - igual que el del islamismo - siempre está apoyado en las mayorías de la sociedad, o en la voluntad mayoritaria de diversas clases, entre ellas la de los más desfavorecidos. Cuando el FIS iba a ganar de manera clara las elecciones legislativas de 1992 fue cuando se decidió dar un golpe de estado en Argelia con el apoyo de las metrópolis europeas, en ese momento se comentó: Que la democracia no valía en esa ocasión y se anulaba cualquier resultado.

Los años 70 vieron como se extendía el islamismo en todos los países musulmanes. Tuvo un de sus colofones este proceso en 1979 con el triunfó de Jomeini en Irán. Occidente pudo ver claramente en el movimiento que derribó al Sha de Persia, imágenes claramente anti occidentales y gritos contra los Estados Unidos. Se comenzaba a crear el antagonismo.

Al mismo tiempo, gracias a las ingentes cantidades de dinero saudí, la corriente wahabita-islamista, puritana y socialmente conservadora se abría paso en el mundo musulmán. Menos visible que los gritos en las calles de Teherán, esta corriente en cambio se aferraba profundamente entre grupos de musulmanes en todo el Islam. Lo irónico del caso, es que Arabia Saudí era al mismo tiempo un de los mejores aliados de Estados Unidos en la zona, pero ponía frente a la corrupción de occidental la virtuosa civilización islámica.

También en 1979 la Unión Soviética invadía Afganistán, y la CIA decidía implicarse masivamente apoyando al bando de la yihad afgana. La ayuda americana y saudí para la guerra de Afganistán, pasó en gran parte por el Pakistán del general Zia, un ferviente admirador de Mawdudi, varios colaboradores suyos fueron ministros en Islamabad.

Otro hecho a reseñar es que se trataba de la primera generación - los jóvenes árabes de aquellos años - que alcanzó la edad adulta después de la independencia. No tenía conexión con las elites en el poder. Y sobre todo era tremendamente numerosa debido a la explosión demográfica. Entre 1955 y 1970 el crecimiento de la población en el mundo musulmán fue del orden del 40% al 50%. Según países: Argelia creció +41,2%, Irán +49,4%, Marruecos +51,5% por citar algunos países. En 1975 los menores de 24 años representaban en todos los países el 60% de los habitantes. Esta masa de jóvenes vivía sobre todo en ciudades y sabía escribir, al contrario que antes. Nacieron los barrios de chabolas del Magred, los ashwaiyyat (viviendas espontáneas) de Oriente Medio, los gocekondu (construido por las noches) de Turquía para que la policía prohibiera iniciar su construcción. Sobre todo el saber adquirido en la enseñanza masiva de la lengua nacional les incitaba a cambiar su posición social y no aceptaban la quietud de sus padres. Gracias a los periódicos, su lectura y creación, a la enseñanza secundaria y superior en una parte de estos jóvenes. Se creó un fuerte resentimiento entre ellos y las elites gubernamentales en sus países. Los campus dominados antes por grupos de izquierdas fueron controlados por los movimientos islamistas, estos difundían las ideas de Qoth, Mawdudi o Jomeini que encontraron por fin una audiencia masiva. La inteligencia islámica se formó entre los estudiantes de esa época.

Dos grandes grupos sociales abrazaron el islamismo: la juventud urbana excluida que veía en el islamismo un contenido socialmente revolucionario, y la burguesía piadosa controlada por el régimen que veía en el islamismo la manera de derribarlo dentro de una jerarquía social. Esto explica como una monarquía tan conservadora como la saudí apoye masivamente al islamismo, y porqué los EE.UU. lo apoyaron en esa época creyendo que esa burguesía encauzaría a los revolucionarios. También el partido comunista iraní (Tudeh “las masas”) y la Antigua Unión Soviética apoyaron la revolución iraní, haciendo que numerosos marxistas pasaran al bando islamista, incluyendo sectores de la misma Francia. Esta es la dualidad del movimiento islamista que agrupa a juventud urbana y burguesía piadosa, porque su programa se basa en la moral y un programa social impreciso. Los estados intentaron separar a la burguesía piadosa argumentando que la juventud radical utilizaba el terrorismo entre sus medios sin pararse a discernir entre aliados o enemigos, y causaba más daño que bien.

En una cuestión estaban los estados nacionalistas árabes y los islamistas de acuerdo, en que el enemigo a destruir era Israel. Por eso cuando en 1967 fueron derrotadas completamente Egipto, Siria y Jordania por Israel, los islamistas dijeron que había sido un castigo de Alá por olvidar la religión, y cuando en 1973 se llegó a una situación de empate fue porque los soldados gritaban ¡Allah Akbar! Pero se ha de señalar que el septiembre negro de 1970 en Jordania, cuando la revuelta palestina de los campos de refugiados fue aplastada por la monarquía de este país, ésta monarquía recibió el apoyo de los Hermanos Musulmanes islamistas jordanos. Sadat, sucesor de Naser, tomó nota y sacó de la cárcel a los Hermanos Musulmanes egipcios que se hicieron con el control ideológico de las universidades.

El recinto de las mezquitas se convirtió en Egipto en el único lugar con libertad de prensa y expresión. En Argelia, Túnez y Marruecos los estudiantes aún francófilos se enfrentaron con sus libros publicados en París, con los que estaban publicados en Arabia Saudí, los islamistas.

La guerra de octubre de 1973 se terminó a 101 kilómetros del Cairo con los ejércitos de Israel en plena contraofensiva tras la ofensiva victoriosa de Egipto y Siria, y se terminó porque los países exportadores de petróleo habían decretado el embargo del petróleo a los aliados de Israel. El precio del barril de petróleo, al restringir la oferta se disparó: 2,01 dólares en octubre de 1973 el barril saudí, a 10,24 dólares el 1 de enero de 1975. Es decir un 500% de subida en precio. Esto produjo un aumento gigantesco de ingresos en Oriente Medio y sobre todo Arabia Saudí. Hasta esa fecha la doctrina autóctona wahabita sólo gozaba de prestigio entre los medios salafistas (rigoristas), el resto del mundo sunita tenía sus escuelas jurídicas que veían a la doctrina wahabita como algo demasiado sectario. Pero esta doctrina comenzó una expansión global y sin trabas por todos los países sunitas - los chiítas fueron considerados herejes - y se centraron en particular en las poblaciones musulmanas emigradas a occidente, a las que enviaron ulemas para adoctrinarlas y construir mezquitas con el ingente dinero saudí. Actualmente grandes mezquitas en Europa (en París por ejemplo o la Gran Mezquita de la M-30 en Madrid) se han construido con fondos procedentes de estos canales wahabitas. Este sistema supuso y supone una inmensa red de beneficencia, ayudas, subvenciones y caridad procedentes de Arabia Saudí que sirvió para disipar envidias y construir la creencia de que el maná del dinero era divino, ya que salía de la tierra sagrada del profeta Mahoma y con él se conseguía expandir El Corán. Nadie hablaba de la protección militar que el vilipendiado e infiel Estados Unidos prestaba a la monarquía saudita. Esto fue así hasta la primera Guerra del Golfo 1990 - 1991, en esa guerra el equilibrio saltó por los aires como ya veremos. El poder saudí gracias a su petróleo era y es inmenso pero no se ve, pongamos un ejemplo fuera de la enorme red de ayudas y subvenciones a las actividades religiosas. Los estados de golfo en 1983 tenían 5,15 millones de trabajadores inmigrados, 43% originarios del área Pakistaní. En 1983 Pakistán recibió en remesas de inmigrantes procedentes del Golfo unos 3000 millones de dólares, esta cifra debemos compararla con los 735 millones de dólares de ayuda extranjera total a este mismo país. Tenemos que darnos cuenta que cuando las tasas de jóvenes diplomados parados estaban haciendo presión en todos los países árabes, los ricos estados del golfo se convirtieron en un lugar para canalizarlas y darles trabajo. Con el alivio que supuso para los respectivos gobiernos debido a la presión demográfica. Estos jóvenes titulados regresaron a sus países con dinero, y con una práctica religiosa más contundente, atribuían al medio salafista o wahabita haber conseguido la prosperidad en un mundo tan pobre. Volvían para vivir junto a nuevas mezquitas construidas en el estilo “paquistaní occidental” con el dinero saudí. También se construyeron cadenas comerciales con nombres como: Centros Comerciales Al Salam para mujeres que llevan velo, para mujeres obedientes de estos nuevos ricos venidos de Arabia. También se fundaron y se reforzaron bancos islamistas que se atenían a la prohibición islámica sobre la usura (prohibición de las tasas de interés fijo por ejemplo)

A partir de la Guerra de 1973 Arabia Saudí desplegó en todo el mundo sus agencias religiosas. La liga islámica Mundial imprimió cantidades inusitadas de ejemplares de textos doctrinales wahabitas, alfombrando toda la Umma con un discurso unívoco e idéntico, excluyendo las demás corrientes del pensamiento plural musulmán. La difusión masiva de obras wahabitas, que los servicios de propagación de la fe del régimen conservador de Riyad hicieron no impidió que fueran usadas por las corrientes más radicales. Fueron citadas con profusión por los radicales para justificar el asesinato de Sadat en 1981, e incluso para acusar a los propios dirigentes saudís de gemonía y predicar el derribo de la monarquía después de la Primera Guerra del Golfo. Parecía que la obra se revelaba contra sus propios creadores poniéndoles en apuros. Se construyeron con fondos de Arabia Saudí más de 1.500 mezquitas en el extranjero. En los países musulmanes su número era un sello de la urbanización, y cuando se convirtió el sermón en el centro de la vida social principal de la ciudad, los donantes a las mezquitas fueron de todos los ámbitos interesados en estar a bien con lo que ocurría en el interior de ellas. Fue también una manera de canalizar a los creyentes cuando se produjo el auge del islamista procedente de Irán; pero cuando Sadam Hussein durante la Primera Guerra del Golfo lanzó la acusación de unión entre la monarquía saudí y occidente nada pudo hacerse por canalizar el islamismo, simplemente el dinero saudita financiaba a todo tipo de creyentes musulmanes con tal que demostrasen su ortodoxia radical. El proceso, y en ocasiones, parte del dinero donado iba a parar a otra parte que no era construir una mezquita.

Arabia Saudí es importante también porque su monarca es el Servidor de los dos Santos lugares desde 1986, tomando la doctrina wahabita el control de la mayor y más sagrada reunión de musulmanes del planeta. Hay que señalar que los wahabitas saquearon las tumbas de los imanes y de Fátima, la hija del Profeta, por considerar su veneración por parte de los chiítas como idolatría inaceptable. Esto provocó que varios hajj (viajes a la Meca) fueran convertidos por Irán durante los ochenta en violentas manifestaciones. Sin olvidar el ataque a la Gran Mezquita de La Meca en noviembre de 1979 por parte de opositores saudís. El control ideológico de estos lugares y ritos esenciales al musulmán por la doctrina wahabita, también fue cuestionado por Sadam Hussein después de 1990 - 1991.



Los Islamistas Egipcios y el asesinato de Sadat

En el verano anterior a la guerra de octubre de 1973, los gama’at islamiyya (asociaciones islámicas) surgen en el ambiente estudiantil, en 1977 ganan las elecciones de la Unión de Estudiantes Egipcios, cuyos procedimientos habían sido democratizados por Sadat en 1974. Las asociaciones islámicas del El Cairo sustituyeron los deficientes transportes públicos a los campus por minibuses reservados a los estudiantes, gracias a fondos cedidos por generosos donantes, limitarán después su uso a mujeres que llevaran velo, el hijab. Encontramos aquí como la privatización de los transportes fue una medida “islámica” de responder a un problema social. El “atuendo islámico” (velo, abrigo largo y ancho, guantes) ofrecido a los estudiantes a precios muy bajos, gracias a las subvenciones de origen impreciso, se presentó como la respuesta a otro problema social: el alto coste de la ropa de moda. En realidad, en palabras del ideólogo de la gama’at, y joven médico Isam Aryan, se trataba: ”Cuando el número de mujeres estudiantes que llevan velo es elevado se convierte en un signo de resistencia frente a la civilización occidental y el inicio de la resistencia frente a los civilización occidental y el inicio de la iltizam (la observancia estricta) del Islam”. Esto puede parecernos una anécdota pero debemos pensar en el complejo debate existente hoy, en el siglo XXI, en la Francia vecina sobre la prohibición del velo femenino en las escuelas francesas, como de todo signo religioso. Francia ha sido reiteradamente amenazada por grupos terroristas por intentar llevar a cabo esta medida, que ahora mismo se encuentra en periodo de debate y aprobación, por los partidos franceses. Para los islamistas no se trata de ninguna anécdota ya que esconde un poderoso trasfondo político-social de rechazo a las ideas de occidente. Para Francia en cambio, es situar una barrera en sus escuelas frente al auge del islamismo en las mezquitas construidas de Francia y los barrios del extrarradio controlados por musulmanes, cada vez más permeables al discurso islámico. En esencia, Francia se estaría jugando ser declarada estado “impío” por los imanes y ulemas islámicos llegada la confrontación de ambas culturas. Esta es una prueba dentro del razonamiento de que no nos hemos creado un enemigo, sino una lenta confrontación que se gesta. Francia no es sospechosa de haber intervenido en Irak o de no haber intentado disuadir a los Estados Unidos en su enfrentamiento con Sadam Hussein, pero el mundo islámico en un hecho tan representativo como el control de la mujer puede estar a punto de incluir a Francia entre sus enemigos, sin entrar a valorar sus alianzas anti norteamericanas. Y lo que es irónico -ya que estos problemas también se dan en Alemania - puede que los Estados Unidos únicamente tengan que esperar a hacer un gesto para que sus díscolos aliados europeos les pidan volver a estrechar las alianzas (en la celebración del 60 aniversario del desembarco de Normandía, Francia y Alemania han anunciado que apoyarán la resolución norteamericana en la ONU sobre el traspaso de poder en Irak antes del 30 de junio de 2004, esto deja al nuevo gobierno español fuera de juego, sin su aliado natural frente al expansionismo marroquí y sin haber sido consultado por el eje París-Berlín al que nunca perteneceremos, porque no nos reconocen igual peso que ellos)

Hasta 1977, fecha en que Sadat visita Jerusalén, las gama’at islamiyya y el poder egipcio vivían una luna de miel. El presidente creyente quería establecer un reino de la ciencia y la fe, y para demostrarlo dejó volver a los Hermanos Musulmanes a Egipto, muchos de ellos refugiados en Arabia Saudí como hemos visto. Estos, enriquecidos, se convirtieron en el modelo a imitar. Eran burguesía piadosa y puritana que rezaba continuamente a la que había que seguir y con la que había que contar siempre. En 1977 un grupo llamado por la policía “excomunión y hégira” secuestra a un ulema y lo asesina. Un mes después del proceso del grupo asesino, Sadat viaja a Jerusalén y firma la paz con Israel, esto significó la ruptura de relaciones entre el poder y la inteligencia islamista y la burguesía piadosa. Los judíos eran y serán enemigos a exterminar con los que no se puede firmar paz alguna. La aparición de “excomunión y hégira” significó la variante más radical y el paso anterior al terrorismo, este pronunció el takfir y declaró que todo el mundo era impío a excepción de ellos mismos, y de acuerdo con la doctrina islámica el kafir (impío) podía ser asesinado. Durante el proceso visto por el asesinato del ulema secuestrado, el poder envió un mensaje de sospecha sobre todo el movimiento religiosos, sin percatarse que había sido un ulema la víctima. Las posteriores injurias al rais Sadat en los medios islamistas por la “vergonzosa paz con los judíos”, provocaron la disolución de la Unión de Estudiantes, la incautación de los bienes de la gam’at y el que la publicación mensual de los Hermanos Musulmanes fuese víctima de la censura. Todo el movimiento radical islámico se vio escupido a la cara por el poder que le había dado antes “apoyos” considerables. La burguesía piadosa cercana a los Hermanos no quería romper con el poder pero perdió el contacto con los estudiantes y la juventud urbana y los militantes más radicales que decidieron enfrentarse a Sadat. Estos se trasladaron de los campus a una acción clandestina en las barriadas pobres de las urbes egipcias, se agruparon entorno a la Organización de la Yihad. Un joven ingeniero electricista, Abdesalam Faraj se convirtió en el teórico del movimiento y escribió una pequeña obra que tomó una importancia capital titulada: “el imperativo oculto” o “la obligación de Falta”, hablaba de la obligación de los ulemas de apelar a la Yihad contra cualquier gobierno que no aplicara el Islam (aunque fuera un estado del Islam)en caso contrario los clérigos religiosos eran traidores entonces; esto le autorizaba provisto de su título de electricista y apoyado en un autor wahabita difundido por Arabia Saudí, a ocupar el puesto del ulema y proclamar la Yihad contra Sadat. Este texto que se apoyaba en la ideología de Qoth, criticaba sin piedad la línea moderada del movimiento islamista, significó un obstáculo para el movimiento en el futuro y pieza capital de radicalización, y fue el pistoletazo para matar a Sadat.

El 6 de octubre de 1981, durante un desfile militar Sadat caía muerto junto a más miembros de su escolta y aparato gobernante. Mubarak, actual presidente asumía el poder a toda prisa y la Organización de la Yihad ponía en marcha una insurrección en Asiut que fue aplastada por medio de paracaidistas y en combates varios en los barrios populares con militantes radicales del movimiento. Faraj había fracasado en su intento de un estado islámico por medio de la violencia. ¿Y la próxima vez? El experimento de que el poder político dejara a la juventud y la cultura en manos del islamismo para calmarlo, no había salido bien. Esto es claro, cuando una ideología tiene absolutamente clara su lucha o verdad, ninguna manipulación es más que ella misma, y la cercanía al poder y el dinero no consiguieron romper la voluntad que tenían las clases jóvenes más radicales de un estado islámico.


La experiencia Malaya

En Malasia, la experiencia de atraer a intelectuales islamistas por parte de un régimen autoritario, transcurrió de manera distinta. La alianza se basó en una unión de los islamistas malayos con los nacionalistas malayos que impusieron una dictadura, en contra de la minorías china e India que constituyen el 40% de la población. El ABIM (Liga de la Juventud Musulmana Malaya) estaba dirigido por intelectuales islamistas que se basaban en los textos traducidos al malayo de Mawdudi. Consiguió una gran implantación entre la población musulmana malaya, y amenazaba con “islamizar” todo el país sin tener en cuenta a los chinos y a los hindúes, estaba dirigido por Anwar Ibrahim, el cual al ser liberado de la cárcel en 1975 se adherió al partido del gobierno a petición del primer ministro Mahathir Mohamed. Con la llegada de Anwar al gobierno se aceleró la islamización y se creó la Universidad Islámica Internacional dirigida por un universitario saudí de origen egipcio perteneciente al movimiento wahabita-islamista. La función universitaria con clases en inglés y árabe, fue la islamización del saber, que significa que el objeto de toda ciencia, exacta o humana, era glorificar la revelación divina, encarnada en su forma sublime por el Islam. De ella salieron altos funcionarios y directivos del sistema bancario islámico, puesto en marcha en la propia Malasia para que los chinos más adinerados manifestaran su adhesión al régimen contratando productos financieros halal, ello llevó a miles de puestos de trabajo bancarios encargados de supervisar que las transacciones y las inversiones no estuvieran regidas por las prácticas que están prohibidas por la ideología islámica. La economía capitalista se había convertido en campo de lucha primero y luego en instrumento de la islamización, el capital podía tener para los religiosos maneras muy distintas de seguir los preceptos islámicos. Y aunque nos parezca increíble se llegaba a poner primero la obligación de utilizar el dinero dentro de los preceptos religiosos islámicos, que a utilizarlo para ganar más dinero como cualquier otro país capitalista. En estos detalles reside el que podamos estar ante la creación de otro modelo de hombre distinto al occidental (Hombre Productor Consumidor) La crisis de 1998 provocó que Arwan fuese encarcelado, vilipendiado, golpeado y acusado de sodomita por su antiguo protector, se deshizo de su delfín con facilidad acusándole de un crimen moral, los islamistas no reaccionaron y fue así porque el régimen ya sin ayuda de los islamistas puso en marcha una política propia de islamización hasta la locura en algunos casos en el campo moral. En enero de 1999 se puso en marcha un carnet con un chip para que los matrimonios pudieran demostrar, en todo lugar y momento que la persona que les acompañaba esta realmente casada con la pareja con la que estaba, y que una mujer o hombre que vivieran con alguien del sexo opuesto lo hacía dentro del matrimonio musulmán. Los islamistas genuinos fueron expulsados de los niveles de poder como hicieron con Arwan el hombre que había llegado a entrevistarse con Jomeini para ver los logros de su revolución islámica, ya no eran necesarios con las leyes que se estaban aprobando rápidamente. Lo más curioso -y que permite cierta esperanza para nosotros - es un artículo escrito en el exilio de Estados Unidos por M.Anees, amigo de Anwar, es de una luz cegadora:

“Durante toda mi vida adulta, como tantas otras personas en el mundo musulmán, veía en todas partes complots de Occidente cuyo único objetivo era mantenernos con la cabeza bajo el agua. Sin embargo después de la experiencia reveladora que he vivido, mis amigos de Occidente han conseguido salvarme, mientras que Mahathir, un musulmán, ha hecho todo lo posible para destruirme (…) Ha demostrado que, aunque se proclama musulmán, en su corazón no hay lugar para la compasión. La tiranía es el resultado y la constatación del fracaso de su concepto de “valores asiáticos”. Mi tragedia y la de Anwar debería hacer reflexionar profundamente a nuestros correligionarios musulmanes cuando hacen una valoración de Occidente y de su papel en el mundo. En el momento en que estamos preparándonos para construir nuestro destino colectivo en el siglo XXI, ¿qué valores nos serán más provechosos, los de Mahathir o los de Jefferson? El propio Mahathir ha escogido en mi lugar”. Los valores de Jefferson a los que se refiere son la cita inscrita en el mausoleo de Washington, epicentro del poder norteamericano: “He jurado en el altar de Dios una eterna hostilidad a cualquier forma de tiranía sobre el espíritu del hombre”. También hay que añadir que una foto de su rostro, durante el proceso en que fue torturado y humillado apareció en un periódico gubernamental a gran tamaño: con cara de desvanecimiento tenía la siguiente palabra en grandes caracteres titulándola: ¡Sodomizado! Lo que nos da la talla del dictador Mahathir y como eliminaba el nacionalismo malayo a sus oponentes.

También nos debe extraer una lección y es que los jóvenes radicales islamistas, una vez ingresaron en los bancos, prensa, negocios, administración y sistema educativo se convirtieron en burguesía piadosa que ya no quería poner en peligro la jerarquía social establecida. Probaron el poder del modelo occidental en cierta manera, el HPC en alguna medida les hizo guardar silencio cuando el poder eliminó a sus dirigentes y líderes espirituales.


El caso de Pakistán

En Pakistán también hubo una alianza entre el poder y el islamismo. El general Zia llegó al poder mediante un golpe de estado, ahorcando después al anterior presidente Bhutto (que había dado un pucherazo en las elecciones de 1977) La oposición tenía como vanguardia al conocido Mawdudi y su partido unido al partido de los ulemas JUP bajo la consigna “orden social del profeta”, Buttho se enfrentó con “igualitarismo del Profeta” al ser socialista y también nacionalista. Se estableció una carrera para prohibir el alcohol, clubes nocturnos y la aplicación de la Shari’a. El general Zia tomó el poder antes de esto último y fue al final él quien implantó la Shari’a. Era una admirador de Mawdudi, e invitó a varios miembros de su partido a tomar bajo su control importantes ministerios. La ideología de la dictadura fue la islamización del Estado con medidas a partir de 1979 como: la lapidación de mujeres adúlteras, cortar las manos a los ladrones, flagelación de los bebedores de alcohol… Aunque se matizaron los peores castigos por medio del Tribunal Federal de Shari’a para no cometer desmanes. La islamización de la educación si fue importante y completa, como la recaudación de impuestos islámicos dedicados a los pobres por el Islam, se basó en detraer el 2,5% de los depósitos bancarios de todas las cuentas de los habitantes del país durante el mes de Ramadán cada año. Este dinero trajo problemas. Los Chiítas dijeron que la pagaban a sus ayatolás, el estado tuvo que eximirles, pero las comunidades de los ulemas sunitas hostiles al chiísmo reventaron en terribles enfrentamientos plagados de sangre hasta nuestros días.

Ese dinero sirvió al final para financiar las escuelas religiosas tradicionales, las dini madrasas, controladas por los ulemas y el movimiento deobandi. Nacieron tantas de ellas y se apretujan en ellas tal número de alumnos que los ulemas llegaron a controlar a gran parte de la juventud pobre rural y urbana. Consiguieron del estado convalidar los conocimientos religiosos con los conocimientos de la educación estatal, incluso la convalidación de los títulos nacionales con los expedidos por los ulemas con amplios cursos sobre el Islam. Esto atrajo a todavía mayor número de jóvenes por la posibilidad posterior de empleo. Pasado un tiempo las madrasas ya no dependían del dinero estatal del impuesto para las pobres y se negaron a seguir fielmente al poder de Zia. Incluso demostraron que sus alumnos podían ser educados para ir a la Yihad, como hicieron sus alumnos refugiados procedentes de Afganistán, para matar y morir sin inmutarse. Zia tuvo que admitir que los grupos sociales más peligrosos e inestables habían pasado al control de los ulemas, y por tanto estos tenían poder político propio y fuerte.

Por el contrario los intelectuales del partido de Mawdudi no pudieron presentar una oposición a Zia ya que habían pasado a engrosar la burguesía piadosa y se habían identificado completamente con el régimen. Zia murió en la explosión de un avión militar en 1988 junto al embajador americano sin saberse aún hoy quien lo asesinó. Si sabemos que se había vuelto incontrolado en su última época y era de los que más ayudó a la derrota soviética de Afganistán.


El movimiento Palestino, Líbano, La radicalización progresiva.

En Palestina existía en los campos de refugiados un movimiento de los Hermanos Musulmanes, dedicado a tareas caritativas y pietistas, el cual fue apoyado por Israel como algo inofensivo frente al nacionalismo militante de la OLP. Posteriormente este movimiento cristalizaría en la temida HAMAS, organización que hoy en día encuadra a miles de suicidas. Los Hermanos mantuvieron esta actitud porque pensaban que no podían “aún” enfrentarse al poderoso estado hebreo. Pero a raíz de la revolución islámica iraní, en 1979 un grupo de estudiantes palestinos de la Universidad Zigazig del Bajo Egipto se entusiasmó con el ejemplo iraní. Fathi Shqaqi escribió un libro titulado Jomeini, la alternativa islámica, dedicado al fundador de los Hermanos, Banna y al propio Jomeini, uniendo las dos grandes vertientes del mundo musulmán, el sunita y el chiíta. En él se criticaba a la OLP y a los Hermanos palestinos por su impasibilidad y moderado enfrentamiento frente a los judíos y ponían el ejemplo del derrocamiento del Sha de Persia. La liberación de Palestina debía ser por medio de una lucha armada sin tregua y un combate por la islamización, siendo ambas cosas la misma Yihad. Este rumbo se tradujo en la creación de la Yihad Islámica, movimiento que empezó a llevar a cabo acciones espectaculares contra las fuerzas de Israel y siguió con atentados sangrientos contra la población civil, repartiendo entre los bandos el miedo. La represión que sufrió estuvo muchas veces a punto de hacerla desaparecer.

La OLP fue expulsada hacía el Líbano por el ejército israelí, y en 1982 puso en marcha la operación “Paz en Galilea” que llevo a los blindados hebreos hasta el extrarradio de Beirut arrasando todo el sur del Líbano. Firmó Israel un tratado con los cristianos maronitas que les daba el poder en Beirut y el Líbano y se quedó con una franja sur del mismo país, dicho sur estaba ocupado por los chiítas libaneses. Siria alarmada dejó desplegar en la llanura de la Bekaa libanesa centenares de guardianes de la revolución iraní (pasdarans) lo que contribuyó a crear el Hezbolá (“partido de Alá”) con combatientes y seguidores fanatizados dispuestos al martirio en el nombre de Alá, y proclamándose poco después la República Islámica del Líbano.

En 1983 se produjo un hecho trascendental para el estudio del terrorismo islámico, no tomado en exceso en cuenta. Después de la invasión israelí del Líbano, las milicias cristianas habían asesinado a los refugiados palestinos de los campos de Sabra y Shatila, los días 15 y 16 de septiembre de 1982 con el visto bueno del ejército israelí, en concreto del general Sharon, actual primer ministro de Israel. Esto provocó tal escándalo en las pulcras vestiduras de occidente que se envió al Líbano una fuerza multinacional compuesta por fuerzas americanas, francesas e italianas para evitar semejantes atrocidades. Pero Siria, Irán y sus aliados locales lo consideraron un refuerzo occidental en el país. El 23 de octubre de 1983, el Hezbolá entró en la historia lanzando una serie de ataques suicidas espectaculares que causaron cientos de muertos entre los americanos y franceses de la fuerza multinacional en unos instantes. El 4 de noviembre lanzó otro ataque espectacular contra el cuartel general del ejército israelí de ocupación en Tiro, con numerosas bajas hebreas. El daño fue tan brutal que los 3 países retiraron sus tropas, el Estado libanés abandonó su alineación pro occidental y Siria consiguió su hegemonía absoluta. Hezbolá con estas acciones espectaculares y calculadas con suicidas había derrotado a EE.UU., Francia e Israel en esta batalla por el Líbano, infligido una derrota sobre el terreno a sus enemigos devastadora. Esto le dio un aura de mito entre todos los adversarios de Israel y Occidente en el Líbano, fuera incluso de la comunidad chiíta. Y a los expertos les debió haber avisado del poder que consiguió una organización capaz de llevar a cabo atentados de una magnitud enorme, empleando suicidas dispuestos a inmolarse en nombre de Alá. En vez de ello, los servicios secretos occidentales pusieron tierra de por medio (igual que el CESID español ha huido de Irak dejando a oscuras a nuestros servicios de seguridad, ante posibles macro atentados que se preparen desde suelo iraquí. Una estupidez de tales proporciones que algún día habrá que pedir responsabilidades por lo que se pueda orquestar desde ese país, por los innumerables grupos terroristas que están llegando al mismo) y los grupos radicales islámicos comenzaron a ver una nueva forma de lucha basada en el martirio y destrucción masiva de vidas de impíos. De hecho los suicidas empezaron a ser vistos como héroes a los que honrar por parte de la comunidad y el clero más radical islámico. Y muchas organizaciones comenzaron a hacer planes de terror para conseguir sus propios éxitos frente a occidente. Hezbolá se convirtió en el brazo de Irán para defenderse de la tremenda guerra que mantenía con Irak, comenzó una serie de atentados, secuestros de occidentales y dio lugar a pequeños grupos ante los cuales mediaba para conseguir la liberación o ejecución de rehenes. Irán advertía así a las petro monarquías y a las potencias occidentales de que acarrearía consecuencias su apoyo incondicional a Sadam Hussein. Uno de los países que más apoyaron al dictador iraquí fue Kuwait, por medio de ingentes cantidades de dinero, Francia era con diferencia el que más armamento, tecnología nuclear y préstamos dieron a Sadam en su guerra. Estados Unidos tenía la llave de todos los repuestos de armas de Irán herencia de la última tecnología del Sha. Estos repuestos entraron a negociarse por la devolución de los rehenes americanos en conversaciones secretas denunciadas por el un sector del propio régimen iraní.

Conforme se desarrollaba esta sangrienta guerra Irak-Irán de 8 años (1980-1988) se realizaba otra entorno al sagrado viaje a La Meca. La disputa fue Irán contra Arabia Saudí aliado de Sadam Hussein, los chiítas iraníes pusieron en entredicho la monarquía saudí. Los incidentes comenzaron en el hajj de 1981, se recrudecieron en 1982, entre 1983 y 1986 se pacto un compromiso que consiguió para Irán un cupo del 18% de peregrinos haciendo mofa sus 150.000 peregrinos de los monarcas saudís, pero en el hajj de 1987 se produjeron 400 muertos en una manifestación pro Jomeini echándose la culpa ambos bandos. Irán convocó conferencias para quitar los santos lugares a Arabia Saudí cosa que no consiguió. El 18 de julio de 1988 Irán acepto el alto el fuego con Irak y Jomeini debió aceptar una guerra que acabó en tablas y no poder cumplir su promesa de derrocar a Sadam Hussein el agresor aliado de Occidente. El régimen saudí aprovechó para hacerse con el control completo del viaje a La Meca, Irán en 1989 intenta boicotearlo sin conseguirlo, hasta que Jomeini el 14 de febrero, da un golpe espectacular al emitir la fatwa que condena a muerte a Salman Rushdie, recuperando en el nivel religioso y moral el control del mundo musulmán.



AFGANISTÁN “una trampa al oso”

Hoy en día sabemos que los servicios secretos americanos entregaron dinero y armas a la resistencia afgana anticomunista a partir del verano de 1979. Lo que provocó la intervención de Moscú; en diciembre de 1979 todo parecía ir bien para el comunismo, el Ejército Rojo tomaba Kabul sin problemas mientras los americanos eran humillados en Teherán dentro de su embajada y ante todo el mundo. Diez años después se hundía el sistema comunista y Afganistán fue una pieza clave de su derrumbe y una trampa magníficamente trazada por los servicios de inteligencia.

Hay que recordar que los comunistas estaban luchando por el poder contra los islamistas afganos de diversas tendencias, incluyendo a los influyentes Hermanos Musulmanes formados en la Universidad de Kabul y lectores empedernidos de Qoth y Mawdudi. Cuando los soviéticos intervinieron decidieron arrasar a los islamistas y acabar con la disidencia en dos facciones del partido comunista afgano, mediante los tanques igual que hicieron en la Primavera de Praga, donde les funcionó muy bien la fuerza militar. Pero muchos afganos abrazaron la causa de la resistencia y se refugiaron fuera de las ciudades, -Afganistán seguía siendo un 85% rural -, en montañas y países limítrofes sobre todo Pakistán. Arabia Saudí apoyó desde el principio una yihad en Afganistán predicada lentamente por los ulemas de la corriente ideológica wahabita. Tuvieron que llegar a acuerdos con aliados imprevisibles como los muyahidín afganos con pocos combatientes de la ideología wahabita, y los partidarios de la yihad armada, protegía con este movimiento a su aliado americano - que apoyaba completamente esta guerra - de la venganza de los movimientos radicales sunitas sustituyendo a América por la impía Unión Soviética. Alrededor de Peshawar (donde se reunió el grueso de los 3 millones de refugiados afganos) se comenzó a fraguar en los campos de entrenamiento un caldo de cultivo de islamismo internacional importante para el futuro de todos nosotros. Se unieron afganos, árabes de ricos emiratos, musulmanes de todo el mundo creyente; llegó la financiación árabe en abundancia, armamento americano, tráfico de heroína, servicios de información occidentales, la ISI pakistaní y sobre todo la CIA, las grandes organizaciones del islamismo paquistaní como el partido de Mawdudi y la red de madrasas deobandis. Las cuales dejaron la perspectiva local para hablar de un islamismo mundial. Se crearon los yihadistas (partidarios extranjeros de la yihad) muy importantes para el desarrollo futuro del terrorismo internacional que significaron un referente entre los jóvenes musulmanes de todo el mundo; en los 90 los más radicales de estos combatientes se llamarán así mismos salafistas yihadistas.

Entre los híbridos que nacieron había un desconocido hasta ese momento llamado Osama Ben Laden que volverá a Palestina más tarde. Otra ironía de la historia, con dinero de la CIA, y de las monarquías pro occidentales musulmanas se financió la formación de elementos como Osama Ben Laden, magníficos experimentos para ganar una guerra a corto plazo. En ese momento los saudís sólo creían que habían creado otro polo frente a Jomeini con ganas también de hacer la guerra, que les devolvía legitimidad para decir que se luchaba contra un poder imperialista occidental, la Unión Soviética.

Los islamistas afganos se habían formado en El Cairo en la Universidad de Al Azhar, y seguían el proceso inspirado por los Hermanos Musulmanes. Después tuvo una lenta gestación en la Facultad de Teología de Kabul traduciendo las obras de Qoth y Mawdudi. Aunque ganaron las elecciones estudiantiles de 1970 eran minoría ya que el mundo rural estaba dominado por las cofradías. A los islamistas ya en plena guerra se impondría el partido el Jamit’at de B.Rabbani gracias a las hazañas legendarias del comandante Massoud. La resistencia contra el invasor se articuló entre siete partidos. Recibiendo más ayuda los más próximos al movimiento wahabita y a los Hermanos Musulmanes aunque no fuesen los más importantes. Los 3 millones de refugiados pasaron de un medio rural a ser clase urbana pobre, fueron alfabetizados, y miles de niños lejos de su familia fueron educados en madrasas de ambiente deobandi por ulemas estrictos que les en enseñaron la “personalidad” islámica universal alrededor de la ideología deobandi. Esto dio como resultado a otros dos híbridos, uno conocido nuestro: los talibánes en Afganistán (los cuales hoy en día siguen luchando en Afganistán, y realizan atentados contra el contingente de la ONU que tiene soldados españoles en Kabul) y a los militantes sunitas paquistaníes extremistas del Ejército de los Compañeros (del Profeta) que asesinan a los chiítas y llevan la yihad a Cachemira. Después, derrotada la Unión Soviética, cuando los inmensos flujos de ayuda americana y el tráfico de la heroína sentaron las bases de grupos fuertemente armados que escaparon de la tutela occidental, estos grupos se convirtieron en un grave problema para los Estados Unidos y las petro monarquías ya que propagaron la yihad en cualquier parte del planeta que les apeteció. Los experimentos se reflejaron contra sus creadores aunque tal vez hay que decir que hubieran surgido de todas formas.

Aparece otro personaje clave en el experimento, Abdallah Azzam, palestino que fue el enlace entre los “árabes afganos” y los intereses wahabitas saudís, y de sus gigantescas ayudas. Garantizaba el intercambio doctrinal entre la causa afgana y palestina y se convirtió en el máximo defensor de la yihad armada en todo el mundo, e intelectualmente inscribió a la intifada Palestina dentro del islamismo militante. Comenzó siendo un Hermano Musulmán en Siria pero se desmarcó por no verles demasiado combativos. Prosiguió sus estudios en la Universidad de Al Azhar donde se doctoró en 1973 y se convierte en profesor de Shari’a en la Universidad de Jordania experto en temas de teología y jurídicos, dirigiendo el sector juvenil de los Hermanos Musulmanes en el país. Expulsado de este país, enseñó en Djedda en Arabia Saudí, en la Universidad del rey Abd al-Aziz, tuvo como alumno al joven Osama Ben Laden (las piezas encajan hacía un destino negro)Es enviado desde esta universidad a la Universidad Islámica Internacional en Islamabad, cuya dirección en parte estaba controlada por los Hermanos Musulmanes del país. Se instala en Peshawar donde participa en la creación del Consejo de Coordinación Islámica que agrupa a una veintena de ONG’s humanitarias y que sólo son tapaderas de movimientos radicales armados (como de hecho sigue ocurriendo con algunas ONG’s árabes en occidente aunque no lo queramos ver)La prueba fue que las Medias Lunas Rojas saudí y kuwatí son las encargadas de dar los 600 millones de dólares de entonces a la resistencia Afgana para financiar la guerra. En 1984 funda la oficina para los muyahidín y lanza en diciembre la revista mítica en el mundo islámico Al Yihad bajo su dirección. Popularizó en ella la causa árabe, y a su muerte se crearía en Internet una página fundamental en el movimiento islámico, en los artículos publicados por él, hablaría del deber sagrado de emprender la yihad, dando al concepto de país árabe atacado por occidente una nueva dimensión. En uno de los párrafos que escribió se ve claramente esta dimensión de la yihad, que significa que todo el mundo occidental tiene a partir de ahora un enemigo enfrente en la yihad armada de los grupos islámicos:

“Este deber no acabará con la victoria de Afganistán; la yihad seguirá siendo obligación individual hasta que reconquistemos cualquier otra tierra que era musulmana para que el Islam reine en ella de nuevo. Ante nosotros tenemos a Palestina, Bukhara, Líbano, Chad, Eritrea, Somalia, Filipinas, Birmania, Yemen del Sur, y otros, Tashkent, Andalucía…” Hay que decir que en casi todos esos lugares se han producido importantes enfrentamientos y atentados islamistas de importante virulencia, y el último lugar citado, la región española que se cita también en muchos comunicados de Al Qaeda por Osama Ben Laden, demuestra que ya desde hace mucho, está señalada España como en un campo de batalla del terrorismo estemos en Irak o no, tengamos amigos americanos o no los tengamos, seamos “pacifistas” como el ZP-Chamberlain actual o tengamos un poco de sentido común como Winston Churchill. Nos quedemos solos y aislados en la escena internacional para no poder defendernos de una agresión coordinada del terrorismo islamista o tengamos a amigos con los suficientes medios para defendernos. Esto hercúleos errores se verán en la última parte de este libro, donde se demostrará esta hipótesis. No es una profecía decir que estamos marcados como campo de batalla desde hace tiempo sino que es sólo aplicar la lógica que tienen las obras y el movimiento islamista, no querer verlo, no entenderlo o no existir expertos en este tema es otro error de proporciones mayúsculas para el actual gobierno socialista. La lógica del movimiento islamista nunca se ha apartado de estos objetivos.

Puede llegar a pensarse que arreglado el problema de Israel y Palestina se arreglan todos los problemas existentes por arte de magia. Pero también puede defenderse que existe una barrera en estos momentos de contención en occidente frente a la expansión de la yihad mundial, incluso en las palabras del propio autor palestino: “ Nuestra presencia actual en Afganistán, que significa el cumplimiento de la yihad y nuestra devoción por la lucha, no significa que nos olvidemos de Palestina. Palestina es nuestro corazón palpitante, precede a Afganistán en nuestro espíritu, en nuestro corazón, en nuestros sentimientos, en nuestra creencia”. La pregunta: ¿Si Israel fuese vencido en su guerra contra el islamismo (más parece una guerra contra todo el mundo musulmán por culpa de su ceguera) que ocurriría? Y no estoy diciendo que Israel no deba buscar una paz equitativa con los palestinos, y proceda como primera medida a la devolución de la tierra al pueblo palestino. Sólo digo: ¿Qué haría toda esa fuerza destructiva que existe en el islamismo sin cayera su máximo enemigo? Esa fuerza existe y se ha generado en las obras de intelectuales de principios de siglo, no la ha creado el vaquero de tejas G.W.Bush ni sus consejeros, digamos que de manera patosa ha atizado más madera a la hoguera del odio. Sé que para los que tienen muy definida su ideología socialista los culpables son los que les dice su partido, y es muy respetable su posición pero la lógica del devenir histórico y los hechos nos demuestran cosas muy claras. Hay Políticos (como nuestro presidente de momento en la Moncloa) que dicen que de los libros nunca puede salir nada malo. Los radicales islamistas sonríen ante rivales así de cándidos, escuchando semejantes frases, y sabiendo en que libros bebieron el odio, y a quién dieron la victoria con su acción del 11-M.

Azzam visitaba los campos de combatientes árabes acompañado de un jeque y apoyándose en fatwas de ulemas. Predicando la yihad con el apoyo de la CIA y diplomáticos saudís. Eran tiempo de experimentos como los que realiza nuestro actual gobierno en su política de echar a Marruecos en los brazos de Estados Unidos y darle bastante razón en el tema del Sahara. Pero sigamos visitando Afganistán lugar que seguirá dando que hablar en los telediarios de todo el mundo.

En la practica los árabes lucharon poco contra el ejército rojo. La excepción fue Osama Ben Laden, joven millonario saudí islamista que acudió a la llamada, y participó en duros combates contra los soviéticos encabezando a sus tropas, dando muestras dicen, de gran valor y consiguiendo el respeto que no podía darle su dinero. Él también leyó a Azzam seguramente en Afganistán y los lugares a reconquistar para el Islam (por eso cita tantas veces Andalucía en sus comunicados) Los árabes en Afganistán lucharon cuando se retiraron los soviéticos en el sitio de la ciudad de Jalalabad donde un contingente árabe se hizo famoso por haber troceado y puesto en cajas a unos prisioneros afganos a los consideraba “ateos”.

Durante la guerra afgana a muchos jóvenes islamistas se les llevo de “campamento” para que se adoctrinarán en contacto con los combatientes. Incluidos árabes que vivían en Francia, Marruecos, Argelia, ¿España? … Un joven Osama Ben Laden vástago de una familia de magnates de Arabia Saudí y el Golfo, no inquietaba a los saudís ni a los servicios americanos para los que aquel muchacho era un aliado contra el comunismo.

Fuera los soviéticos de Kabul, el congreso americano eliminó la ayuda a los chicos árabes, Arabia Saudí fue haciendo lo mismo que sus aliados, y las ricas monarquías dijeron que tal vez estaban financiando a grupos demasiado revoltosos o radicales. En mitad de este desfallecimiento de la yihad se produjo el misterioso atentado que costó la vida a Abdallah Azzam. Arabia Saudí y los servicios secretos paquistaníes acrecentaron entonces la ayuda al partido Hezb para que tomara Kabul y estableciera un estado Islámico aliado de Arabia Saudí y cliente de Pakistán, no pudo lograrlo, el comandante Massoud se aferró al noroeste afgano y se convirtió en un rival legendario, el territorio se fragmentó entre señores de la guerra que cultivaban opio y traficaban con armas. En 1990 Sadam Hussein invadía Kuwait y un peligro inusitado se cernió sobre la monarquía Saudí que se olvidó de Afganistán. El Hezb se revolvió contra su padrino saudí, dejando abierto el camino a los talibánes y a la proliferación de los yihadistas árabes en el mundo entero.


El sistema financiero islámico

Debido a mi trabajo nada me ha producido tanta curiosidad, como conocer el funcionamiento de unos bancos que aunque nos parezca inaudito están vigilados por un Shari’a board compuesto por ulemas que sacan sin dilación los beneficios del balance del banco que contravinieran las leyes islámicas, y se los ofrecen a los más necesitados. El tipo de interés fijo estaba prohibido, y cuando los bancos tradicionales musulmanes lo tenían pedían encarecidamente a los ulemas que emitieran fatwas exculpando a los creyentes de invertir en los mismos, para que no creyeran que les llevaba directamente al infierno.

De hecho el tipo de interés fijo se asimilaba a la usura, y ésta era un pecado de mayor grado que fornicar con la propia madre en los textos más sagrados de los árabes. También estaban prohibidos los seguros. Y la razón al igual que el interés fijo es que no se puede fijar una tasa de interés por adelantado, sin tener en cuenta los avatares del futuro y sustrayéndola de la supremacía de la voluntad divina que se expresa en: “Si Alá quiere”. Que es tanto como decir que el capitalismo no puede desdeñar la posible voluntad de Dios en la duración de un contrato. Los ulemas, algunos de los cuales eran disputados entre varios bancos, se encargaban de “auditar” espiritualmente e islámicamente el funcionamiento del sistema financiero desde los shari’a boards.

Los gigantescos ingresos del petróleo empujaron a la creación de un gran sistema financiero. El Banco Faysal Islámico de Egipto, creado en 1977 y dirigido por el hijo del rey saudí Faysal, fue fundado para hacer fructificar los ahorros dentro de la Shari’a. El capital pertenecía en un 49% a las grandes familias saudís, entre ellas los Ben Laden, gozaba del apoyo de los religiosos más importantes de Egipto incluido el jeque que aparecía más veces en televisión como predicador. Se obtenían remuneraciones en las cuentas depositadas muy superiores a los que se depositaban en los bancos convencionales, porque se privilegiaba las operaciones a corto plazo en sectores de rentabilidad rápida; también se especulaba con metales preciosos. El entusiasmo por estas sociedades e inversión llevó a la creación de un centenar de sociedades islámicas de inversión de fondos que daban unos beneficios anuales del 25%. Estos beneficios, con una garantía religiosa por parte de los ulemas que emitieron fatwas denunciando a los bancos convencionales y alabando a las sociedades de inversión islámicas, extendieron el sistema rápidamente.

En el caso Egipcio el poder en un primer momento aupó la creación de este sistema bancario islámico, pensaban que los intelectuales y activistas islámicos se integrarían económicamente y abandonarían la oposición porque no iban a derribar el sistema político que les estaba enriqueciendo. Pero a partir de 1988 el poder del sistema bancario islámico empezó a asustar al gobierno de Mubarak, se temía que llegasen a acumular tanto poder y dinero que hicieran la guerra al presidente. Las mezquitas, hospitales, dispensarios y publicaciones de libros islámicos se vieron como una manera de paliar deficiencias públicas en un país pobre, ahora se veía como un Estado dentro del Estado, donde la juventud urbana pobre y la burguesía piadosa colabora para socavar al régimen. Se realizó una campaña hostil, en los mismos periódicos que habían publicado las páginas de publicidad y fatwas favorables a estas sociedades, se les acusó de empresas fraudulentas, de su conexión con militantes extremistas. Se les conminó a cambiar su estructura legal y los depositarios presos de pánico porque sus ahorros fueran embargados huyeron llevando a la quiebra a muchas de ellas, en particular las de inversiones más arriesgadas. Se temió que la burguesía piadosa se hiciera completamente independiente y se aliara con los destinatarios de sus ayudas, los jóvenes pobres islamistas. En 1988 se tomaron medidas legislativas en Egipto para terminar con el sistema bancario islámico, pero al año siguiente el mufti de la República promulgó una fatwa que declaraba ilícito según el Islam el sistema bancario convencional. Lo importante del sistema financiero islámico es que sirvió como estructuración de un movimiento islámico que por ejemplo consiguió el poder en Sudán mediante un golpe de Estado, o dio en algunos casos la suficiente independencia a la burguesía piadosa e intelectualidad islámica que hicieron de estos bancos una pieza clave para hacerse oír en el mundo musulmán. A nadie se le escapa que este sistema bancario, muchas veces sin control del poder, sirvió para financiar elementos radicales islamistas y se sospecha que en sus redes en la actualidad se puede estar financiado parte del terrorismo islamista, o se está pagando para que este terrorismo no actúe en determinados lugares; la fortuna del mismo Ben Laden viaja y se esconde en este sistema según algunos autores.




LA OLP y HAMAS

Se suele decir que la primera intifada (sublevación) en Palestina comenzó el 8 de diciembre de 1987, cuando un camión israelí embistió a dos taxis palestinos, causando 4 muertos. Las manifestaciones organizadas para sorpresa de los Hermanos Musulmanes y de la OLP continuaron sin parar en los días siguientes de manera espontánea, hasta ser una insurrección duradera. Los Hermanos Musulmanes habían creado en 1978 la Universidad Islámica de Gaza, pero pocos de sus componentes diplomáticos encontraban trabajo mientras Israel decidió traer millares de colonos judíos de la antigua Unión Soviética a los territorios ocupados. El caldo de cultivo de la rabia, los campos de refugiados permanentes y la impotencia llegaban a su máxima temperatura. Al día siguiente, el 9 de diciembre los Hermanos Musulmanes reunidos alrededor de su líder, el jeque Ahmad Yasin - el mismo que decidió eliminar el gobierno Sharon este año 2004 - escribieron un panfleto firmado por el Movimiento de Resistencia Islámica llamando a intensificar la sublevación, sus siglas en árabe HMS, le transformaron en la sigla HAMAS “celo”, haciéndose famosa en todo el mundo. Los Hermanos Musulmanes como en tantas ocasiones abandonaron la línea pietista moderada y se lanzaba la burguesía piadosa a la conquista de los jóvenes parados, los shebah, hay que darse cuenta que en 1991 la tasa de natalidad en Cisjordania y Gaza era del 8,1 y 9,8 hijos por mujer, casi el 50% de la población era menor de 15 años, y el 70% menor de 30 años. Cifras que han seguido esa progresión en la actualidad. Los jóvenes pobres se convirtieron en guardianes de la moral islámica a parte de luchar contra los judíos, castigaron las costumbres occidentales de la clase media por ser “depravación judía”, atacando actividades culturales, bares con alcohol e incluso rociando con ácido a las mujeres que no llevaran velo.

Se produjo un choque violento y sangriento entre los jóvenes y activistas de la nacionalista OLP de Arafat y HAMAS. Como tantas veces en el mundo musulmán, el nacionalismo había gestionado por medio del enfrentamiento y las simples y burlonas consignas patrioteras los graves problemas de las sociedades de los países, la OLP no había sido una excepción en este devenir utilitario y sangriento del nacionalismo para con los que cree sus súbditos y nunca ve como ciudadanos. Los islamistas fueron ganando a la OLP terreno mes a mes, consiguiendo el control de sindicatos, barrios y consejos de la sublevación, quedando únicamente la figura de Arafat como contención a la marea islámica que ganaba al pueblo, también hubo asesinatos y eliminaciones entre los dos bandos que luchaban contra Israel. En 1990 Kuwait donó 60 millones de dólares a HAMAS y sólo 27 a la OLP, lo que indica la importancia que alcanzaba rápidamente entre la clase piadosa de las petro monarquías, está se hizo aún más importante cuando Arafat decidió apoyar a Sadam Hussein en su invasión de Kuwait y amenazadora incursión en Arabia Saudí. La primera Guerra del Golfo marcaría un antes y un después en la Intifada también.




























Argelia y Egipto, su guerra contra el islamismo


En octubre de 1988 se produjeron en Argelia las revueltas más graves desde su independencia de Francia. La juventud urbana pobre marginada por la jerarquía militar que controlaba el poder por medio del Frente de Liberación Nacional, se adueño de las calles, y el ejército intervino causando cientos de muertos en la represión. Muchos de los sublevados se habían educado por primera vez en escuelas y universidades. Lo cual significó un pozo de valor en un país con altas tasas de paro y con un 40% de los 24 millones de argelinos en 1989 con menos de 15 años. Hoy en día esta cifra ha quedado ya diminuta y desfasada, aumentando el problema.

En 1963, dentro del FLN, la corriente religiosa había fundado la asociación “los valores islámicos” para luchar contra la occidentalización que veían llegar y preconizaba la instauración de un estado islámico. Todos ellos estaban muy próximos a las ideas de Qoth, y enviaron una carta a Naser pidiendo que no lo ahorcara. En 1965 el poder dejó que su influencia entrase en los sectores de la educación y la cultura, llegaron cooperantes egipcios reclutados para arabizar y desafrancesar el sistema escolar en el nuevo estado nacionalista argelino, entre ellos había una mayoría de Hermanos Musulmanes que escapaban de Naser, estos formaron una generación de profesores próximos a su ideología y donde nacería la inteligencia islámica que más tarde construyó el FIS (Frente Islámico de Salvación), su líder fue un profesor, Ali Benhadj, número dos del FIS.

El islamismo argelino tenía dos tendencias definidas, una radical liderada por Mustafa Buyali que reclamaba la aplicación de la shari’a y la instauración de un estado islámico a través de la yihad armada. Tuvo una serie de adeptos lectores de Sayyid Qoth que cuando fueron perseguidos pasaron a la clandestinidad organizando el maquis. Otros centenares de islamistas radicales argelinos partieron a Afganistán a hacer la yihad contra los soviéticos, uno de ellos llegó a ser sucesor de Abdallah Azzam, Abdallah Anas. El otro sector islámico argelino presionaba al poder para islamizar el país sin recurrir a la lucha armada.

El régimen asustando por el poder que tomaba entre los jóvenes universitarios y clases más ilustradas el movimiento islámico, decidió construir mezquitas con predicadores controlados por el gobierno para contrarrestar las pequeñas salas de rezos en los barrios pobres, construyó la Universidad Islámica en Contantina con una mezquita-catedral en su interior. Algo muy típico de todos los nacionalismos, intentar hacerse con el control de la religión y con el clero que predica en su territorio por cualquier medio aunque sea sucio, me recuerda un poco a la situación del PNV cuando intenta que la cúpula de la Iglesia en el País Vasco siga los postulados de una etnia vasca en vez de limitarse a dar su magisterio en paz y libremente, hay que decir que algún obispo se pasa al bando nacionalista de mil amores olvidándose del sentimiento religioso. Pero como sabemos, volviendo a Argelia, el FLN había eliminado las cofradías y a los ulemas, y no tenía ahora ulemas formados y queridos con los que contrarrestar al movimiento islámico. De hecho las autoridades eclesiásticas que trajo importadas a Argelia estaban más cerca de los Hermanos Musulmanes que del régimen.

Las revueltas de octubre nadie sabe como se organizaron, lo que sí ocurrió es que una de las manifestaciones convocada por Benhadj desde la mezquita Kabul, fundada por antiguos yihadistas de Afganistán en un barrio de Argel, acabó en varias decenas de muertos. Benhadj pronunció un llamamiento donde tradujo las aspiraciones de los jóvenes pobres al vocabulario islamista. La alianza entre los intelectuales islamistas y esta juventud urbana pobre se constató meses más tarde con la creación del FIS en la mezquita Ben Badis de Argel. Sus quince fundadores representaban las dos tendencias islámicas, la radical y la reformista, pero se dejó a personajes importantes fuera.

Dentro del FIS existían dos tendencias: Benhadj orador consumado que hablaba a los numerosos jóvenes desposeídos, y Abbasi Madani, universitario y astuto político, amante de los Mercedes de lujo que sabía dirigir a los comerciantes y empresarios a los que apartó del régimen con la promesa de participar en el nuevo estado islámico. El FIS demostró la eficiencia de sus médicos, ambulancias y caridad en el terremoto de Tipasa que no fue socorrido por el Estado. El 12 de junio de 1990 venció en las elecciones municipales y regionales con rotundidad. Los municipios, ya controlados por el FIS dieron muestras de caridad, justicia y equidad con los recursos materiales. Viendo el pueblo honestidad donde antes había una gran corrupción. También impulsaron la conocida moral islámica, cerrando tiendas de vídeos, bares con alcohol, castigó a las mujeres ligeras de actitud y ropa (aunque fueran de actitud impecable en la realidad) segregaron los baños en la costa mediterránea, y prohibieron en la playa los atuendos “indecentes”. La burguesía piadosa sustituyó a la burguesía europeizada a la que se la azuzó de ilegitima. Se persiguió la lengua francesa sin descanso; las antenas “paradiabólicas” se intentaban destruir para no recibir programas franceses, luego se ordenó orientarlas hacía el satélite saudí.

Dentro del movimiento existían las dos tendencias que se vieron claramente cuando Sadam desencadenó la Primera Guerra del Golfo, Benhadj en traje de faena militar pidió frente al ministerio de Defensa la formación de un cuerpo de voluntarios que fuera a luchar junto a Sadam. Madani agradecido por los donativos de Kuwait y las petro monarquías atacadas por Sadam, se tuvo que callar ante la fuerza de los jóvenes desocupados. El Estado Mayor del ejército tomó nota de que el FIS podía llegar a suplantarlo, y la burguesía musulmana francófona se dio cuenta de que podía ser sacrificada si el FIS triunfaba sin ningún freno.

La noche del 3 de junio de 1990 el ejército viendo la victoria del FIS en las legislativas que se iban a celebrar, declaró el estado de sitio y aplazo las elecciones hasta diciembre, una vez se desplegó en la calle metió en la cárcel el 30 de junio a Benhadj y Madani. Mientras el maquis empezó a crecer, el cual comenzó sus acciones armadas violentas en las cercanías del aniversario del martirio de Azzam en Peshawar. El 26 de diciembre el FIS participó en la primera vuelta de las elecciones aplazadas lleno de dudas y con sus dirigentes en la cárcel. Obtuvo el 47% de los sufragios a pesar de las dificultades, con 2 partidos islámicos creados por los militares para robarles votos, de todas formas 118 diputados frente a 4 del gobierno dejaba claro que en la segunda vuelta tendría una mayoría absoluta aplastante. El ejército jugó duro e hizo dimitir al presidente de la República el 11 de enero y anuló las elecciones el 13 de ese mes sin más excusas oficiales. El 4 de marzo ya en una carrera por controlar la situación disolvió desde el gobierno el FIS, había comenzado la Guerra Civil que sacudiría a Argelia durante largos años ya que muchos islamistas se lanzaron a la lucha armada. Los gobiernos occidentales se alinearon del lado del ejército diciendo que el otro bando estaba compuesto por gente en extremo peligrosa y que en este caso, sólo en este caso se supone, la democracia no era interesante para haberla dejado funcionar en todas sus consecuencias. Francia y la Comunidad Europea respaldaron a los dirigentes que el ejército puso en el poder como marionetas suyas, dejando claro a los islamistas qué podían esperar del democrático sistema occidental.

El movimiento islámico se dividió a lo largo de la guerra debido a las dos clases que componen al movimiento islamista: la burguesía piadosa y los jóvenes parados de las ciudades; el FIS por un lado y los grupos junto con el maquis de Buyali que se aliaron para formar el GIA (Grupo Armado Islámico) ambos grupos a su vez firmaron alianzas en momentos determinados y se separaron más tarde para enfrentarse abiertamente, y el partido islamista moderado Hamas fundado por Nahnah.

El GIA que había empezado una guerra de guerrillas brutal mezclada con el asesinato de civiles, extranjeros e inocentes indiscriminados, acabó envuelto en luchas intestinas y contra el propio FIS, al que acusó de impío y traidor por llevar una guerra con la vista puesta en llegar a un pacto con el gobierno de Argel. Este enfrentamiento llevó a la ruptura de la unidad entre el GIA y el FIS que había creado su propio brazo armado en el AIS (Ejército Islámico de Salvación) El GIA desde el asesinato de autoridades, soldados y civiles, pasando por la ejecución de grupos de monjes cristianos (criticada por el FIS y otros grupos islámicos) llegó hasta declarar el takfir contra toda la sociedad Argelina cuando esta se cansó tras 6 largos años de luchas, ejecutando poblaciones enteras indiscriminadamente por medio de armas blancas. Todo envuelto en continuadas sospechas de infiltraciones de los servicios secretos militares argelinos dentro del GIA. Al final en medio de tanto horror la burguesía piadosa se volvió hacia el gobierno buscando la protección frente a la juventud pobre del GIA, y votando masivamente al partido HAMAS. El AIS declaró una tregua unilateral, pero el FIS se fue diluyendo en manos del electorado del HAMAS.

Argelia mientras olvidaba el socialismo y entraba aceleradamente en la economía de mercado. Madani abandonaría la política y apoyaría al final al presidente Buteflika. Argelia poco a poco, veían desaparecer el GIA, y los yihadistas vueltos de Afganistán se extinguían en sus aspiraciones de guerra contra el estado impío de Argel. En la actualidad los grupos islamistas radicales violentos en Argelia se han englobado en Al Qaida.

Uno de los hechos más interesantes desde nuestra perspectiva, fue la decisión del GIA de llevar la guerra contra los impíos en Francia. Secuestró un avión y realizó la conocida campaña de terror en París de 1995, cuyo desencadenante residía en la idea de que el gobierno francés apoyaba al Estado argelino en su lucha contra el islamismo radical. Una advertencia para el futuro de otros países como España, ya que nuestro apoyo lógico a Mohamed VI y sus reformas, y el enfrentamiento de este monarca contra los movimientos islamistas que tienen ya sus bases en Marruecos, puede saldarse con atentados futuros contra España, ya que no nos queda otra opción que apoyar a los gobiernos moderados de Marruecos, exponiéndonos a ponernos igual que le ocurrió a Francia en el disparadero de los grupos terroristas islamistas. Muy probablemente los atentados de la estación de Atocha y los atentados de Casablanca están relacionados, y esa unión de Marruecos (occidentalizado que desea entrar en la Unión Europea)- España (Apoyando a Mohamed VI como la mejor opción) se haya realizado por los autores de los dos atentados, no en vano son perseguidos por las dos policías, y se ve reforzada la hipótesis en el hecho de que ambos países son aliados o tienen bases de Estados Unidos en su territorio. Sobre esta cuestión volveremos al final del libro.

Hay que añadir, porque es muy importante, que Francia antes de amilanarse ante los atentados en su capital y ciudades, reprimió sin piedad el islamismo radical de su suelo, eliminando todo el entramado del GIA o el FIS en su territorio. Consiguiendo que no volviesen a producirse nuevos atentados.



EGIPTO, lucha contra el islamismo integrista

El número de muertos entre el estado Egipcio y los islamistas radicales fue de 1000, mientras en Argelia se calculan en 100.000 los muertos. Lo que nos pone en su sitio los dos procesos, pero aún así marcó un punto importante en la escalada radical islámica. Los Hermanos Musulmanes volvieron a resurgir a partir de 1984, obteniendo en unas elecciones completamente controladas por el poder diputados al parlamento, el control de los Hermanos se extendió por los principales colegios profesionales (médicos, abogados…) controlando de nuevo los campus universitarios, hemos visto que también se hicieron con el control del sistema financiero islámico. Aunque el estado aumentó las horas de “emisión islámica” por televisión (siendo 14.000 horas en 1995) sirvió para que los religiosos expresasen su radicalismo contra los coptos y pidieran la aplicación de la shari’a. Los Hermanos Musulmanes se enzarzaron con el poder en una lucha parlamentaria y no violenta por la aplicación de la ley islámica.

Por otro lado dos grupos surgían de los condenados por el asesinato de Sadat, que fueron excarcelados poco a poco (una muestra de debilidad por parte de Mubarak y el poder laico) Uno era Al Yihad que predicaba el asesinato de las personas clave del estado impío y un golpe de Estado rápido para alcanzar el poder e instaurar el Estado islámico. Y el otro, la gama’a islamiyya que hablaba de hacer la guerra al mismo tiempo que la predicación, esto suponía quitar al Estado zonas amplias de territorio para implantar el gobierno del bien y la persecución del mal. Se centraron en la violencia contra la minoría copta cristiana, por no pagar un impuesto por vivir como infieles. Los Hermanos Musulmanes lograron en 1987 sesenta diputados coaligados al partido de izquierdas del trabajo.

El poder se decantó por una estrategia de diálogo ante estos avances pero la violencia aumentó año tras año, con asesinatos de intelectuales laicos y contra el gobierno. En 1988 en el propio Cairo las fuerzas de seguridad tuvieron que ocupar un barrio completo donde la gama’a islamiyya ya aplicaba el bien y perseguía el mal sin escrúpulos a la hora de aplicar la violencia. Los bastiones rurales del Alto Egipto eran ya suyos, entre 1989-1990 se ejerció violencia sobre los coptos en aumento. El Estado egipcio mantuvo una política errática de tender la mano por medio de los Hermanos a los extremistas y represión en otros momentos sin contemplaciones, esto fue interpretado como debilidad por los islamistas que les llevo a atentados cada vez más espectaculares como asesinar al Presidente del parlamento. El año 1992 fue el inicio de cinco largos años de guerra ya abierta, en la que la gama’a lanzó a sus huestes en el Valle del Alto y Medio Nilo a la caza del “cristiano copto arrogante” que es más “rico e influyente” que el piadoso musulmán. El estado, temeroso ya de perder la primera riqueza nacional, el turismo, lanzó una campaña de represión, esto hizo que en el Medio Egipto los islamistas decidieran, junto con el regreso de los grupos de salafistas yihadistas “afganos” a su patria, lanzar la guerra total contra el poder del Estado.

Comenzó esta guerra en 1992 con el famoso asesinato de Farag Foda por parte de la gama’a, alguien detestado por los Hermanos Musulmanes, la izquierda nacionalista y los grupos islamistas. La izquierda nacionalista también tuvo su culpa en esta espiral de violencia. Para la izquierda hiciera lo que hiciera Israel, era un enemigo a combatir y por tanto jamás se podía firmar una paz con el Estado sionista. Por ello no pusieron ningún impedimento los nacionalistas en ver bien este y otros asesinatos similares de intelectuales que defendían el diálogo con Israel. Otro intelectual fue “divorciado” a la fuerza de su mujer por los tribunales dominados por los Hermanos, por considerarle apóstata, no podía estar casado con una musulmana. Abu Zeid y su esposa tuvieron que huir a los Países Bajos. El premio Nobel de literatura Naguib Mahfuz fue apuñalado por un miembro de la gama’a por considerar cercanos a occidente sus libros. En los juicios todos los círculos islamistas querían defender a los autores de los atentados contra estas personalidades, los Hermanos Musulmanes exculpaban por medio de sus abogados y magistrados a los miembros de la gama’a, entre otras razones porque antes designaron a las víctimas. Para nosotros es una situación muy parecida a la que se vive en el País Vasco, cuando los partidos nacionalistas, exculpan a los “revoltosos” radicales de sus atentados, y quieren conseguir la autonomía y por lo tanto el control de los Tribunales Superiores de Justicia de Madrid para ser ellos mismos los que juzguen a sus “chicos descarriados”, que eran como les llamaban los Hermanos a los terroristas de la gama’a y Al Yihad. Así se consigue un asalto al poder basado en la violencia y en el chantaje.

Esta guerra terminó en los ataques y asesinatos de turistas en Egipto que culminó con la matanza de Luxor en 1997. Lo cual hizo que cierta clase media de Egipto se planteara el apoyo a los islamistas, ya que destruía los sueldos de muchos de ellos relacionados con el turismo. Mientras los Hermanos Musulmanes asaltaron el control de la justicia y ayudaron eficientemente en el seísmo de El Cairo de 1992, montando miles de tiendas destinadas a Bosnia para las familias que se quedaron sin casa. En ellas podía leerse su consigna “El Islam es la solución”. El estado ocupó con 14.000 soldados el barrio de Embaba que había caído en poder de la gama’a. En ese momento el gobierno egipcio cometió la mayor torpeza al dejar que su ministro del interior intentara hablar con los radicales por medio de clérigos próximos a los Hermanos Musulmanes. En el último momento el ministro fue destituido, y el ministro de información que compartía las tesis de moderarse con los radicales sufría un atentado de Al Yihad. Los islamistas atacaban a los que les mostraban debilidad.

El gobierno siguiendo ahora con la línea dura entró en una guerra entre 1993 y 1997 de centenares de muertos y atentados espectaculares como el que sufrió Mubarak en Addis-Abeba en junio de 1995 en una cumbre africana en Etiopía. Pero la gama’a debido a los muertos en combate, condenas a muerte y ejecutados procedentes de los veteranos yihadistas de Afganistán fue perdiendo empuje. Al matar a 18 turistas (14 mujeres) griegos a los que creía judíos dijo: “una venganza contra los judíos, hijos de monos y cerdos; y adoradores del demonio (taghot), por la sangre de los mártires caídos en tierras del Líbano”. Lo que indica su búsqueda de los nacionalistas tanto egipcios como los de otras naciones árabes, esto también indicaba debilidad en el movimiento.

A los Hermanos Musulmanes se les acusó de ser el rostro presentable del terror (igual que algunos partidos nacionalistas en España envían su apoyo a bandas asesinas) Y la gama’a se destruyó así misma cuando el estado egipcio apretó sin piedad en la represión policial y la persecución de sus dirigentes. Los que estaban encarcelados hicieron un llamamiento para un alto el fuego en 1997. Otros, desde Afganistán pedían seguir la lucha, y en medio se produjeron los asesinatos de varios policías y la matanza de turistas de Hatsshepsut en Luxor. Pero al final la gama’a dejó de tener poder real, la guerra la había ganado por el momento Mubarak y el Estado Egipcio. No debemos esconder que esta guerra la ganó con múltiples denuncias sobre el empleo de la tortura en los interrogatorios en las cárceles a los islamistas. Denuncias por otra parte sobre hechos similares o peores a los que estamos viendo en las cárceles de Irak por el ejército norteamericano. Tenía la ventaja el Estado Egipcio (igual que el Estado hebreo que también tortura a los terroristas o quienes piensa lo son) de que no se abriría investigación alguna dada la poca implantación de la democracia. La tortura es un hecho de miseria humana sea quien sea quien la practique.

Ayudó también a la victoria la condonación de una parte de la deuda externa por la ayuda prestada en la Primera Guerra del Golfo a Bush Padre; la privatización de buena parte de su economía y el regreso de fondos procedentes de Kuwait. Pero hay que darse cuenta que igual que Argel, Mubarak no permite de momento la democratización extensa de Egipto, ¿Y que puede ocurrir si llega? ¿Quién ganaría en una elecciones en Egipto? Y sobre todo, ¿Qué ocurrirá cuando los activistas que se han ido a luchar a Irak contra Estados Unidos regresen, o los que se integran en redes bajo el paraguas de Al Qaeda terminen su adiestramiento? Lo que es claro es que la fuerza de los Hermanos Musulmanes ha crecido en esta segunda Guerra del Golfo declarada por Bush hijo, y que las organizaciones radicales han decidido activarse de nuevo allí donde buscaban una excusa para volver a formarse o recoger nuevos voluntarios. Demasiada fuerzas siguen cargándose dentro de la sociedad como para que esta guerra haya terminado, sobre todo en un país cuyo crecimiento demográfico sigue creciendo en cifras gigantescas.






























EUROPA OBJETIVO ISLAMISTA PRIMORDIAL
(Rushdie y el problema del velo)


Gilles Kepel titula el capítulo séptimo de su libro “la yihad”, Europa tierra del Islam. Y es que las cosas suelen ser como son y no como nos gustaría que fuesen; Estados Unidos no es territorio que vaya ser reclamado directamente como musulmán, aunque sea el primero de la lista entre los enemigos islamistas, pero Europa o partes de importantes de la misma si lo son dentro de la lógica islamista de la historia.

El 15 de febrero de 1989 las tropas soviéticas por orden de M.Gorvachov dieron por terminada su retirada de Afganistán. Lo que iba a ser una victoria de Arabia Saudí y el triunfo de su yihad pagada, se eclipsó por completo por la fatwa emitida por Jomeini el día anterior condenando a muerte al autor de los versos satánicos. En los telediarios se emitieron las imágenes del saqueo por parte de los ulemas deobandis del Centro Cultural Americano de Islamabad con cinco muertos, a pesar de que Salman Rushdie no tuviera ninguna relación con los Estados Unidos.

Hubo tres fases en el caso Rushdie que marca un antes y un después en la relación de los islamistas con Occidente. La primera cuando la novela sale a la calle, son los discípulos de Mawdudi en la India Y Pakistán y sus ramificaciones británicas los que lucharon por prohibir el libro de Rushdie. El 14 de enero se produce una quema pública de libros en Bradford en Yorkshire como fin de esta primera parte. Durante la misma se habían activado todas las redes saudís y wahabitas para intentar prohibir el libro sin conseguirlo. La segunda fase fue la oportunidad de las asociaciones deobandis y barelweis que llamaron a la sublevación en la calle contra el libro. No consiguieron nada en esta fase más violenta, ya que Riyad no deseaba movimientos de masas en la calle como método político. La tercera fase fue la fatwa de Jomeini que mezcló la movilización popular y la acción terrorista internacional al hacer una llamamiento a “todos los verdaderos musulmanes para que los ejecutarán inmediatamente allí donde se encontraran”. Donde los diplomáticos saudís en Londres habían errado al encontrar pocas respuestas occidentales a sus acciones, como la condena de todos los países musulmanes en la OCI (Organización de la Conferencia Islámica) a instancias de Arabia Saudí, Jomeini logró asumir de golpe todo el interés y miedo de Occidente como un gran talismán atrayente de lo que era el pensamiento y la manera de actuar islamista llegado el caso. Jomeini se convertía en paladín de los musulmanes ultrajados cualquiera que fuera su adscripción (Sunita o Chiíta) y que habían visto como Arabia Saudí no había podido retirar el libro de la calle, el cual sobre todo en las madrasas, ponía en peligro a los jóvenes indopaquistanies al proponerles romper los esquemas tradicionales de sus pensamiento con su lectura, y a hacer volar por los aires la reglas de sumisión y obediencia de los jóvenes con los ulemas deobandis. Jomeini a la vez extendía las fronteras del Islam a todo el mundo ya que el autor de los Versos Satánicos residía en Inglaterra. Jomeini extendía su fatwa a todas las poblaciones musulmanas emigradas, integrándolas en el ámbito del Islam y poniendo a Occidente en el primer término de las consecuencias posibles. Algunos activistas apoyaron a Jomeini y se alejaron de Arabia Saudí, fue el caso del Jeque Omar Abdel Rahman que se hizo famoso en el atentado que se llevo a cabo contra el World Trade Center de Nueva York en 1993, atentado que ya decía a las claras a cualquiera que quisiera verlo, por donde se iba a empezar a conducir el islamismo en el futuro dentro de las redes activistas. El jeque Omar había estado en la yihad afgana igual que Osama ben Laden y había bebido de las enseñanzas wahabitas de Arabia Saudí. En la Conferencia de Ministros de Asuntos Exteriores de la OCI del 16 de marzo de 1989, los estados “moderados” con Arabia Saudí a la cabeza, tuvieron que aceptar el punto de vista de Jomeini emitiendo un comunicado que declaraba apóstata al autor de los Versos Satánicos, esto era dar justificación doctrinal a la fatwa al considerarlo blasfemo de acuerdo con las categorías del derecho islámico, dejando que su suerte corriese a manos de los puñales azuzados por el ayatolá. Jomeini, inteligente religioso hasta el extremo, moría 3 meses más tarde dejando como testamento político una fatwa aceptada por todos los musulmanes a pesar de su radicalismo, chiítas, sunitas, islamistas, radicales y moderados la habían aceptado en mayor o menor grado.

Antes de avanzar quiero hacer una precisión personal sobre esta fatwa que reconozco va a ser una de las cosas más polémicas de este libro, pero ya que lo siento así y mi convencimiento es pleno en este punto, además creo que se asienta sobre bastante lógica y razón. Indudablemente la condena a muerte dictada por Jomeini está fuera de lugar en un mundo que desea respetar la vida y los derechos humanos, y nada justifica semejante sentencia contra el autor de un libro. Pero el motivo de la fatwa es algo completamente razonable para un creyente. Quiero declarar, que nadie puede insultar gratuitamente a Dios o a Alá, sin tener en cuenta los millones de sentimientos verdaderos y muy profundos arraigados en el interior de millones de creyentes. Podría valer para arreglar el problema (y debe de valer) que el autor de los Versos Satánicos pidiese disculpas públicas y retirase su libro en primera instancia por respeto a los verdaderos creyentes musulmanes a los que ha herido. Igual que estrenar una obra en el centro de Madrid llamada “Me cago en Dios” es un insulto sin límites a los creyentes cristianos que sienten verdaderamente a Dios, Salman Rusdie insultó sin límite alguno a los verdaderos creyentes musulmanes, y en muchas ocasiones a su sencilla manera de creer en Alá, comparando a las esposas del Profeta con prostitutas, por mucha ficción o cantidad o supuesta calidad literaria que hubiese en la comparación o la metáfora.

Quien insulta de esa manera, aunque lo haga en el nombre del arte realmente, tiene que saber que se arriesga a lo que la otra parte piense o haga, al sentirse insultada en su más profundo interior. Repitiendo, ya que no está de más volver a hacerlo, que en ningún caso se puede justificar como respuesta el asesinato, ni cualquier respuesta que no podamos considerar humana o respetable, sin poder defender entre ellas la violencia desatada. Jomeini aprovechó un libro que verdaderamente es un insulto a Alá para extender su magisterio de manera inteligente. Nadie, es mi opinión, puede insultar como recurso estilístico o retórico la figura de Dios, Alá, Yaveh, Buda o cualquier dios que se haya ganado el respeto de millones de personas sencillas. Puede criticar u objetar su ideología de cualquiera de las maneras intelectuales y normales que se utilizan para rebatir ideas en nuestra modernidad, sobre todo si lo que se pretende es que exista mayor armonía entre los pueblos y personas, pero no puede lanzarse a un insulto sin más objetivo que captar la atención de los lectores en beneficio de su fama. Además creo que este concepto esta en la propia esencia de la cultura musulmana, y un punto clave de la fricción de la cultura del HPC y el mundo que defienden los islamistas, y es un punto de fricción que se puede evitar. Puede que sea sólo para algunos una cuestión de educación, yo pienso que es un valor del ser humano que debe al menos ser tratado con respeto.

¿Por qué Jomeini antes de morir se dirigía directamente hacía los musulmanes que vivían en Europa? Porque están llamados a convertirse en el martillo más importante del islamismo y en el mayor problema a tratar por sociedades como la francesa, italiana, española, alemana o inglesa, muy posiblemente en el problema más importante junto al nacionalismo que implicará movimientos violentos en las sociedades europeas en todo su conjunto.

Los musulmanes llegaron en importante cantidad a las sociedades europeas como trabajadores para reconstruirlas después de la Segunda Guerra Mundial, los turcos en Alemania, el norte de África en Francia, Indopakistaníes en Gran Bretaña… al principio los gobiernos veían en ellos emigrantes que volverían a su tierra conseguido un capital ya que venían solos. Pero la crisis del petróleo en sus países de origen en los años 80 en que su precio bajó, les hizo quedarse en Europa ya que a pesar de restringirse las nuevas entradas vieron más ventajas en Europa que en sus países de origen. Estos musulmanes muchos de ellos habían olvidado (excepto los indopaquistaníes gracias a los deobandis y adelweís) el rigorismo y sus costumbres religiosas. Pero a partir de la guerra de 1973 se comienza a buscar las raíces de sus creencia por parte de estas comunidades, coincidiendo como hemos visto con el despegue de la extensión wahabita-salafista, rigurosa con las costumbres y la construcción de mezquitas en Europa con dinero procedente del Golfo Pérsico. Los hombres musulmanes trajeron a sus mujeres a vivir con ellos, y pronto nació la segunda generación de jóvenes musulmanes nacidos en la ciudades de Occidente. Cuando se hicieron mayores encontraron grandes porcentajes de fracaso escolar, numerosas dificultades sociales escasa base cultural. Un caldo de cultivo propició para que estos jóvenes abrazasen sin tapujos los discursos más extremistas islámicos. Además sentían atracción por los jóvenes intelectuales islamistas de su misma edad, que dominaban la lengua de los países de origen y conocían su cultura de la que estaba hambrientos estos jóvenes musulmanes nacidos en Europa. De hecho ocurrió pronto en Francia, deseaba esta juventud pobre musulmana dejar de lado los valores de la cultura Francesa y abrazar los valores de su religión que escuchaban. Se tradujeron a los idiomas de europeos las obras de Qoth y Mawdudi, y se extendió el mensaje de Jomeini, como en un segundo renacimiento en otras culturas de estos tres autores. Durante la primera época estos grupos islámicos en Europa hicieron proselitismo para luchar contra los gobiernos argelino, tunecino, marroquí, indio… sin enfrentarse a los países europeos que les acogían. Estos primeros jóvenes musulmanes nacidos en éstos países en cambio fijaron como enemigos a los gobiernos y administraciones que les cobijaban.

Esto llevo a proclamar a los intelectuales musulmanes de muchos países europeos en 1988, que Europa era también “dar el Islam”, es decir, parte del Islam y lugar donde pedir que se aplicase la shari’a e intervenir para conseguirla.

En Francia este nuevo planteamiento se hizo patente en el llamado “problema del velo” de los alumnos, donde la Unión de Organizaciones Islámicas de Francia (UOIF) desempeñó un papel capital. La Unión dentro del movimiento de los Hermanos Musulmanes en buenas relaciones con Arabia Saudí, compró un castillo como centro de formación de imanes destinados a los jóvenes musulmanes europeos, bajo la dirección del jeque egipcio-qatari Qaradhawi (con el que Francia ha tenido problemas cada vez mayores) Ya en su día el problema del velo se vio en Francia como una disyuntiva, claudicar a los movimientos islamistas, o seguir siendo un estado plenamente laico y moderno arriesgándose a posibles consecuencias. Daría lo mismo, en poco tiempo el GIA instigaría en 1995 una serie de atentados terroristas en Francia sin recordar posibles concesiones a sus militantes. Es otra constante de los movimientos islamistas, entienden la concesión como debilidad de los infieles, como excarcelarles o retirar las tropas de un país donde ellos son parte de la lucha. Sobre las tremendas consecuencias en atentados que se le abren hoy en día a Francia (haya tenido o no haya tenido tropas en Irak) hablaremos más tarde.

En esta situación se encontraban los jóvenes musulmanes europeos (1985) nacidos de musulmanes emigrados, cuando se produjo la fatwa de Jomeini, la salida del Ejército Rojo de Afganistán y la caída del muro de Berlín. Esto último sabemos abrió nuevos territorios reclamados por el Islam desde Bosnia a Chechenia, la débil Unión Soviética vio como varias de sus repúblicas se volvían de la noche a la mañana en repúblicas musulmanas, y en el caso de la región de Chechenia en una mezcla de nacionalismo e islamismo tan destructiva que se trata con toda probabilidad de la guerra más atroz, que se está desarrollando desde el siglo XX y que continua en nuevas oleadas de odio y destrucción mientras leen este libro.



LA PRIMERA GUERRA DEL GOLFO Y EL REGÍMEN TALIBÁN


Sadam Husein, lleno de deudas por los préstamos contraídos con las petro monarquías del Golfo Pérsico, envió un ultimátum el último día de julio de 1990 a Kuwait para que le condonara no sólo toda la deuda que tenía con él, sino que además le enviase una serie de enormes cantidades de manera inmediata, apoyándose en una supuesta pertenencia del territorio de Kuwait al estado de Irak. En caso de no hacerlo reclamaría el emirato como propio y lo invadiría. Los ministros de Asuntos Exteriores de los Estados Miembros de la Conferencia Islámica recibieron en la mañana del 2 de agosto la noticia de la invasión, un Estado musulmán que había presidido la anterior Conferencia (Irak) había borrado del mapa a otro Estado miembro de la Organización. Las tropas iraquíes conquistado el emirato realizaron algunas incursiones en dirección a la provincia del Hasa de Arabia Saudí donde estaban concentrados sus pozos de petróleo. Ya durante la guerra contra Irán había intentado apropiarse de los pozos de petróleo de este país concentrados cerca de su frontera, ahora aspiraba a controlar el 40% de la producción de petróleo a nivel mundial. De hecho podía conquistar toda Arabia Saudí en 3 días según estimaba. El rey de Arabia Saudí “Servidor de los Santos Lugares” de La Meca y Medina pidió apoyo de las tropas norteamericanas. Dentro de la operación “Tormenta del desierto” encabezada por los Estados Unidos y liderada por el presidente Bush padre. Medio millón de soldados norteamericanos desembarcaron en Arabia Saudí, y otros centenares de miles de distintas nacionalidades no musulmanas iban llegando en una coalición encabezada por la ONU. La monarquía se salvaba pero el entramado laboriosamente construido desde los años 60 saltaba por los aires, el dominio del mundo islamista por parte de Arabia se caía por entero.

Riyad había conseguido que la juventud urbana pobre extremista y la burguesía piadosa se aliara en un mismo plano, para predicar que se edificaría el reino de la shari’a sobre los escombros del socialismo y de un Occidente sin referencias morales. El verdugo de este costoso sistema era alguien que se había considerado ateo, Sadam Husein, y que entre sus atrocidades había hecho ahorcar a Baquir as-Sadr, uno de los principales pensadores islamistas de finales del siglo XX. Sadam lanzó los mismos anatemas que su antiguo y enconado enemigo, Jomeini, había lanzado sobre la monarquía saudí, acusándola de esclava de los Estados Unidos.

Esto provocó que desde ese instante la juventud pobre numerosa se separase de la burguesía piadosa, y se fuese lentamente pero sin descanso, decantando por la violencia y el terrorismo. El resto de los años 90 tienen ya las pruebas palpables del triunfo de la violencia sobre la anterior alianza de los jóvenes pobres y la burguesía piadosa en todo el mundo árabe: Guerra Civil en Argelia, atentados en el Valle del Nilo, toma del poder por los talibánes en 1996 dos años después de aparecer, la guerrilla islamista de Chechenia siembra el terror en Moscú desde 1995. En nuestra orilla, en 1993, el World Trade Center de Nueva York fue anterior a las campañas terroristas del GIA en Francia en 1995, y más tarde, en 1998 las embajadas americanas en Kenia y Tanzanía desaparecían entre grandes explosiones. Es por eso que el 11S en América (2001), fue un preludio del 11M en el corazón de Europa (2004), igual que el atentado de 1993 en Nueva York era un preludio de los atentados llevados a cabo en París en 1995. Existe una lógica a estas barbaridades, una lógica de lucha política dentro de los movimientos islamistas, y saltársela o no considerarla para ver culpas individualizadas personalizadas en G.W.Bush, Blair o Aznar sin considerar nada más, puede convertirse en buscar culpables para sacar rentas políticas gracias a la Guerra de Irak o los atentados del 11M, es un inmenso error que nos llevará directamente a sufrir sin poder evitarlo o verlo nuevos atentados, si antes no se analiza en todo su conjunto la situación y con la lógica inherente a los movimientos islamistas que han desatado tanto terror.

Es en 1990 cuando empieza el proceso que nos llevara a llenar un pabellón de cadáveres en Madrid. Es en la invasión de Sadam Husein y en las fuerzas ultra radicales que se revuelven contra sus padrinos los acaudalados saudís wahabitas, donde se va a empezar a poner en marcha el proceso que acabará en el atentado del 11S primero y más tarde del 11M en Europa, el cual como vamos sabiendo por el “cerebro” egipcio que lo preparó formaba parte de una serie de atentados a producir también en Francia (que no envío tropas a Irak) y donde ya existían una decena de terroristas con la orden de atentar en el metro de París y otra red montada en Bélgica para atentar en Bruselas en la capital de Europa. Hay que recordar, que esta violencia que se fue extendiendo en el mundo islámico en la década posterior a la Primera Guerra del Golfo, fue fruto de la incapacidad de volver a articular una toma del poder por los medios políticos por parte de los islamistas. Ben Laden en su huida decidida hacía adelante buscará aumentar la apuesta por la violencia, y el inicio de un proceso que más adelante analizaremos y que no ha hecho más que empezar.

Una gran mayoría de movimientos islámicos en esa Primera Guerra contra Sadam Husein, apenas respondió a su fidelidad financiera con Arabia Saudí, debido a que sus bases apoyaban a Sadam cuando este decía que Kuwait era un invento de los occidentales ingleses y que el dinero que extrajese de su suelo pensaba dárselo a la juventud pobre de los países musulmanes para formar un gran Estado árabe como nuevo Saladino. Siempre se entiende a creer a los mentirosos en los momentos claves de la historia, porque pensar que Sadam era capaz de hacer algo por los desheredados es mucho pensar. Lo que sí creyeron completamente los movimientos islámicos fue el llamamiento a la yihad contra Occidente por haber ensuciado desacralizando La Meca y Medina, por la presencia de tropas no musulmanas en Arabia Saudí, algo que hacía sudar sangre a la propia monarquía del país.

En este llamamiento a la yihad contra Occidente hecho desde Bagdad había incluso responsables de Grandes mezquitas de Marsella y París. A partir de entonces hubo dos Conferencias Islámicas, la que apoyaban a Sadam y los que luchaban contra él y se unieron a las tesis de Arabia Saudí. En Kartum se reunieron los opositores ahora de Arabia Saudí entre los que estaban los Hermanos Musulmanes de todo el mundo, y movimientos islámicos similares, además de nacionalistas representados como Yaser Arafat.

Dentro de Arabia Saudí la sociedad comenzó a revolverse durante esta Primera Guerra del Golfo. Una concentración por primera vez de mujeres conduciendo en el centro de Riyad pidiendo un reglamento que no las excluyese de poder conducir, acabó en un escándalo de proporciones enormes cuando protesto la clase religiosa wahabita del régimen. Fue prohibida cualquier solidaridad con las “putas comunistas” como las llamaron, se las despidió de sus empleos y se las reprimió sin contemplaciones por el régimen. Esto no fue suficiente para apaciguar a los ulemas.

Dos predicadores conocidos de la corriente islamista cuyos sermones circulaban en casetes, donde se criticaba a los soldados occidentales de manera virulenta llamándoles nuevos cruzados, firmaron junto a ciento siete predicadores y universitarios islamistas una “carta de reclamación” aprobada por el Jeque Ben Baz, máxima autoridad, y presentada al rey Fahd en mayo de 1991. En ella pedían la creación de un Consejo Consultivo formado por ulemas que pudiera controlar la arbitrariedad monárquica y velara porque el reino no se apartara de la norma wahabita, y vigilase la influencia nefasta de cristianos y judíos. Se hablaba de los “nuevos cruzados” (impíos) que estaban manchando el suelo saudí.

En noviembre tuvo que anunciar el rey Fahd la creación de un Consejo Consultivo y la codificación de las leyes fundamentales del reino. Los miembros del consejo eran miembros escogidos por el rey, muchos de ellos de la familia tribal del propio rey. Esto enfureció a los islamistas que replicaron con un “memorándum de amonestaciones” donde venían a decir que el Estado debía hacerse más islámico, reivindicaban la independencia de los clérigos frente al poder y recordaban su supremacía frente a éste, la total islamización de leyes y reglamentos, la creación de un gran ejército saudí reclutado a la manera de Israel para romper con todas las alianzas con estados no musulmanes, el fin del apoyo al proceso de paz Israel-Palestina y al estado argelino en su lucha contra los islamistas en su propio país. Esto sólo provocó la creación por seis clérigos de una organización que diera rienda suelta a lo que se pensaba en mezquitas y campus, la cual acabó sus días sin pena ni gloria enviando fax y creando páginas web tras la posterior represión del régimen. Más importante es en noviembre de 1995 el atentado producido en Riyad donde murieron 5 americanos. Poco a poco esta organización dejó el sitio ideológico a un personaje más directo y con diferente estrategia, Osama ben Laden.

El hijo querido de la monarquía saudí, cuya familia controlaba las obras públicas en la península arábiga por formar parte de los aledaños de la corte se había revuelto y mordido la mano de sus protectores. A partir de ese momento se dedicó a dar trabajo y buscar cobijo en sus múltiples empresas desperdigadas por todo el mundo, a muchos de los yihadistas que conoció en Afganistán. No era evidentemente el único que había mordido la mano que le daba de comer, ni tampoco eran unos locos, se enmarcaban dentro de un proceso. Todos los islamistas entrenados y armados concentrados en Peshawar y Afganistán, se volvieron antiamericanos - aunque muchos ya lo fueran - cuando en realidad la CIA y Arabia Saudí les habían dado como objetivo la Unión Soviética.

El asesinato del presidente Zia y de Abdallah Azzam provocaron que se rompieran los lazos entre las finanzas del Golfo y esta legión de radicales entrenados para desestabilizar. En Pakistán la jama’at-e Islami creada por Mawdudi clamó contra Estados Unidos y su aliado saudí, aún habiendo recibido jugosas cantidades de dólares de este último en el pasado. Ese grupo internacional de veteranos duros de la yihad alcanzó una nueva dimensión al estar disponible para apoyar a las luchas más radicales islámicas que hubiera por el mundo. No estaban controlados por ningún Estado ni representaban a capa social alguna. Estaban entrenados para el combate e iban a entrenar a otros en la yihad. Fueron la matriz de combatientes en las zonas tribales de Paquistán que aún hoy escapan al poder del Estado, y cada mes tenemos noticias de combates entre el ejército regular de Pakistán en estas zonas y zonas fronterizas con Afganistán, y feudos en el propio Afganistán que siguen luchando contra la ONU, muchos de estos focos han caído dentro de la órbita de Al Qaeda. También se convirtieron en el hogar de simpatizantes perseguidos por sus gobiernos y de jóvenes islamistas como los terroristas de los atentados de París de 1995. También un vivero de agentes especiales para diversos Estados que deseaban controlar de alguna forma a militantes extremistas.

Apareció en el mundo el “salafismo yihadista”. Aquellos que comprendían las conminaciones de los Textos Sagrados en un sentido literal, como el ulema del siglo XIV Ibn Taimiyya, referencia principal de wahabitas. Preconizaban el combate contra los jeques religiosos corruptos que servían a la monarquía saudí y la guerra contra América a cualquier precio. Tenían diversos ideólogos, uno de ellos el Sirio naturalizado español Abu Mus’ab. Los salafistas yihadistas criticaban a los Hermanos Musulmanes por haberse tomado muchas modernidades y por tanto libertades con los Textos Sagrados. Son los integristas del Islam objetivamente, ya que llegaban a criticar a Sayyid Qoth por su lectura a veces personal del Corán. Para ellos se perdía el tiempo creando partidos políticos, los Estados impíos debían ser arrasados sin más dilación. Y para ello no se debía intentar comprender el Corán o los Textos Sagrados, sólo había que obedecer ciegamente a quien lo comprendía y era experto en esos textos. Entre los objetivos estaba llevar la yihad a los territorios que habían pertenecido al Islam, estos incluían en primer lugar a Palestina, luego, aparecían por ejemplo la Andalucía arrancada a dar el Islam, las Filipinas del Frente de Liberación Moro, las repúblicas musulmanas de la Unión Soviética que aun sobrevivía, Yemen del Sur, etc. … Azzam, añadió a la lista lugares como Bosnia, Chechenia, Cachemira, Argelia… Como vemos esta ideología es la que constituye parte del núcleo de Al Qaeda para atentar en todas las partes del mundo que piensan lo merecen.


Este movimiento salafista yihadista se unió a otra corriente de la zona, los talibánes que perseguían iguales objetivos aunque estaban poco interesados en la política internacional, y querían sobre todo imponer un Islam riguroso en su tierra. Los talibánes fueron buenos anfitriones, ya que acogieron en confianza absoluta a los salafistas yihadistas en el Afganistán controlado por ellos. Donde se acabaron montando campos de entrenamiento y adoctrinamiento de la red Al Qaeda. Hay que recordar que los talibánes se formaron en madrasas con los ulemas de la corriente deobandi. Aunque recibían el oportuno apoyo inesperado del gobierno de la atractiva B.Butto, el ejército de Paquistán y el dinero Saudí, después de la guerra con Sadam eran de los pocos que se habían mantenido al margen, tal vez porque tenían claro que Sadam era un ateo redomado, su ideología anti chiíta (Irán), anti rusa, India, y Occidente en general, se pensaba entre la inteligencia de Pakistán que les daría un Afganistán controlado por los talibánes como la mejor salida para el propio Pakistán que veían a su vecino fragmentado en feudos poco fieles, y porque B.Butto deseaba fraccionar la coalición de partidos de ulemas apoyando a un movimiento tan radical que perseguía entre otras cosas a las mujeres, y guardaba la más estricta observancia del Corán.

Entraron en Afganistán en 1994 procedentes de las madrasas de la frontera Paquistán para liberar a un convoy enviado oportunamente. Se adueñaron de la capital sur de Afganistán, Kandahar al día siguiente y Kabul tras largos combates en el otoño de 1998. Obligaron al comandante Massoud a replegarse a su feudo del norte en el valle del Panshir controlando el 85% del territorio.

En la capital controlada por los talibánes las mujeres llevaban el riguroso shadri, no les estaba permitido trabajar y para sobrevivir y alimentar a sus hijos las viudas debían mendigar en las calles, si habían dado sus esposos la vida por la causa no importaba. Los ministerios se llenaron de polvo ya que no les interesaba mucho el estado moderno, al que veían como algo impío y desviado. Crearon 3 funciones en vez del Estado (hay que reconocer que había un método de síntesis de la burocracia): la moral, el comercio y la guerra, lo demás no existía o estaban prohibido.

La moral regida por el “organismo para el gobierno del bien y la persecución del Mal”, cuya traducción al inglés fue policía del vicio/virtud, estaba compuesta por jóvenes barbudos que vigilaban por la observancia de rezos, porte de velos y molían a palos sin contemplaciones si encontraban a una mujer con un libro o esta lo guardaba en casa. No importaba si antes había sido maestra o alumna de la Universidad, carecía de importancia, ya que la Universidad era otro foco de impiedad que erradicaron. Se flagelaba a los hombres sin barba o a los que la llevaban demasiado corta; la televisión, los magnetófonos o la música fueron prohibidos, se establecían controles en las carreteras para registrar los coches y comprobar que no llevasen casetes. Pero en esta sociedad si existía diversión y espectáculo: en el gran estadio construido por la Unión Soviética se veía la flagelación de bebedores, el troceamiento de ladrones sin anestesia alguna y la ejecución de criminales por la familia de la víctima a la que se entregaba una metralleta para gusto del público congregado en el estadio.

La función del comercio tuvo en el dinero saudí que venía cuando los príncipes de Arabia se acercaban a cazar una fuente. Pero se centró en el contrabando de heroína destinada al mercado americano, ruso o europeo, grabando con un peaje este artículo. Existían (existen) plantaciones gigantescas de esta droga dedicadas al “mercado infiel” que proporcionaron la necesaria autonomía financiera a los talibánes, para por ejemplo negarse a expulsar a Osama ben Laden cuando Arabia Saudí se lo pidió, lo cual provocó la ruptura de relaciones diplomáticas en 1999. En el bazar medieval de Kabul los comerciantes de bazar prosperaron al no existir un Estado que por no tener no tenía impuestos ni reglamentos comerciales que cumplir.

La guerra era la tercer función del entramado talibán islámico, se llevaba a cabo desde Kandahar por el Dirigente de los Creyentes, el mulá Omar Akhund, al que ningún “impío” había visto jamás. Antiguo muyahidín tuerto de un ojo por combate con los soviéticos. En particular se encargó de decir al mundo que Osama ben Laden y los salafistas yihadistas eran huéspedes bien venidos en su país, y se beneficiaran del asilo afgano a pesar de la presión Saudí y norteamericana.

Se trataba en suma de un territorio mal organizado que aplicaba la más salvaje coerción moral en su interior, la yihad en sus fronteras y se alimentaba de los peajes y tráfico de los valiosos flujos de materias que existían en su interior. Tenemos que darnos cuenta que a pesar de la simpleza de esta organización si no hubiera sido por la intervención combinada de la alianza del Norte, las fuerzas especiales norteamericanas, inglesas, los B-52 y el completo aislamiento en sus fronteras, hubiera sido un régimen que podía haber durado bastante más tiempo de lo que en principio parecía. Sabiendo que todavía hoy en Afganistán luchan bandas aisladas de talibánes contra las fuerzas de la ONU y ONG, s en la zona. Sin descartarse su resurgir en su alianza con Al Qaeda y rebeldes radicales islamistas en las montañas de Afganistán.

Pakistán está pagando caro todos los experimentos realizados en sus madrasas dejando en manos de ulemas radicales a su juventud. Los talibánes son uno de esos experimentos; creo en 1993 el movimiento paramilitar deobandi Ratmi Ansar al que tuvo que cambiar de nombre al ser considerado por Estados Unidos una peligrosa organización terrorista. Pero existen muchos de estos grupos alentados por el ejército paquistaní que comienzan a “emanciparse” de sus tutores y padrinos de bautizo, y cometen atentados sin su control.

El presidente Islamista Sharif fue derrocado por el general Musharaf en 1999. El cual dijo que seguía el ejemplo de Ataturk, pero Musharaf ha sufrido desde que ayudó tan estrechamente a los Estados Unidos a derribar a los talibánes tras el 11S y tomar el control la ONU de este país, una serie larga de atentados que incluyen la voladora de puentes y edificios.

Los yihadistas se extendieron por Tayikistán, y sobre todo algunos entraron a luchar en Chechenia donde luchan a muerte con el gobierno de Moscú, el cual a su vez emplea los medios más inhumanos para combatirlos (sin saber si se trata de una respuesta desesperada para defenderse en un medio tan hostil)en una espiral de odio de la que Putín ha sacado un respaldo aplastante en las urnas.














Osama ben Laden y al Qa’ida



Nos encontramos por fin con un actor principal de las tragedias que sacudirían a Estados Unidos y España, por citar dos de sus acciones. Osama ben Laden era hijo de un multimillonario que murió en 1968 con una fortuna de 11.000 millones de dólares de entonces, pero había sido antes un modesto albañil del país de Yemen. Había conseguido, gracias a su inteligencia y estética para los monumentos, la ampliación y mantenimiento de la Gran Mezquita de La Meca y todas las autopistas de Arabia Saudí que partían de ella. Sólo en Egipto tenía más de 40.000 empleados en sus filiales fuera de Arabia. Osama es uno de sus 54 hijos e hijas, estudió ingeniería en Djedda, alumno en las materias islámicas obligatorias de Mohamed Qoth (hermano como sabemos del conocido Sayyid Qoth) y de Abdallah Azzam del que también hemos hablado. En 1979 efectúa un viaje a Peshawar vía la jama’at-e islami creada por Mawdudi. Hasta 1982 recoge fondos para la yihad de Afganistán, ese año se traslada al mismo Afganistán con una importante infraestructura. En 1984 establece la primera casa para los yihadistas en Peshawar en coordinación con Abdallah Azzam (su antiguo profesor) Organizó a militantes islamistas salidos de las cárceles egipcias, otros procedentes del maquis argelino huidos de la represión en Argel. Luego llegarían jóvenes del extrarradio francés que tomarían parte en los atentados de 1994 y 1995. Todos contaban con hogar y ayuda de ben Laden, del dinero Saudí y del procedente de la CIA norteamericana.

En 1986 Osama ben Laden estableció sus propios campos de entrenamiento en Afganistán. Comienza la leyenda de su encanto y valentía en el combate. Es entorno a 1988 cuando crea una base de datos, que es un inventario de los yihadistas y otros voluntarios que pasaban por los campos. Dio lugar a una estructura organizada, que había creado entorno a un fichero informático, cuyo nombre en árabe es: al Qa’ida (“la base” de datos) la cual se hizo célebre años más tarde, al tratarla el gobierno americano como una organización ultra secreta. Y todavía se haría más célebre por los atentados que estamos sufriendo desde el 11S hasta alcanzar un poder global. Rompió en aquella época sus relaciones con Azzam sin que se sepa las razones todavía hoy: al año siguiente este moriría en un atentado que no ha sido posible aclarar todavía. En 1989, ya asustado el poder saudí del experimento-monstruo ben Laden, deciden quitarle el pasaporte en una estancia que realiza a Arabia Saudí.

Las amenazas que Sadam Husein lanza sobre Arabia Saudí, que entonces era un ateo impío y enemigo de ben Laden y los islamistas, hacen que este último ofrezca a la monarquía su ejército yihadista para proteger la frontera. El rey Fahd pide la ayuda de los norteamericanos y ben Laden pasa a formar parte de los grupos hostiles la régimen abanderados por los clérigos críticos. Ben Laden huye más tarde del país gracias a sus contactos, convirtiéndose ya en enemigo acérrimo de la monarquía.

Estamos ante el principio real de nuestros problemas que tuvieron una culminación en el 11M, Osama ben Laden rompe con Arabia Saudí y con su protector los Estados Unidos de manera violenta. Muchos militantes islamistas como lo es profundamente ben Laden hacen lo mismo en todo el mundo (hay que darse cuenta que ben Laden posee una lista de muchos de ellos en un fichero secreto) La primera Guerra del Golfo que comenzó con la invasión de Kuwait por Sadam provocó la creación de Al Qaeda como gigantesco grupo terrorista, ben Laden decidía golpear sin descanso al gobierno de Arabia Saudí y a su aliado Estados Unidos, o cualquier estado que se considerase impío a sus ojos. Se refugió en Sudán durante el régimen de Turabi, donde realizó inversiones. Dio trabajo en sus empresas a muchos yihadistas o les trasladó a Yemen o Sudán para preparar ataques terroristas y desestabilizar a sus antiguos protectores.

En 1992, algunas pruebas indican que ben Laden obtuvo la primera victoria sobre los Estados Unidos en Somalia. En la operación “devolver la esperanza” comandada por la ONU y el Presidente Clinton con los marines, para conseguir acabar con el hambre en Somalia, lugar donde no se repartían los alimentos por culpa de los señores feudales y combatientes musulmanes. Tras los combates del 3 al 4 de octubre de 1993 donde Estados Unidos perdió 18 militares de elite, la operación tuvo que suspenderse y la coalición que encabezaba la ONU salió de Somalia a toda prisa. La conocida película de Oliver Stone Blackhow Derribado recrea muy bien aquella operación para salvar Somalia del hambre. Según algunas fuentes ben Laden y su red estuvieron implicados en los combates contra los norteamericanos.

En el verano de 1996 hizo la declaración de la yihad contra Norteamérica que ocupaba la tierra de los dos Santos Lugares, con el subtítulo “Expulsad a los politeístas de la península Arábiga”, en ella citaba a los ulemas partidarios de la yihad en el mundo y hablaba de la alianza de “cruzados” y sionistas. Había que expulsar a toda costa primero a los americanos de Arabia Saudí. Citaba profusamente al autor wahabita Ibn Taimiyy. En febrero de 1998 crea el Frente Islámico Internacional contra los judíos y los cruzados, la carta de fundación la firman Al Yihad, la gama’a islamiyya y grupúsculos islamistas de Pakistán. Se hacia un llamamiento a “todo musulmán que esté en condiciones de hacerlo tiene el deber personal de matar a los americanos y a sus aliados, civiles y militares, en cualquier país donde sea posible”. Esto era la base para el terrorismo a nivel global y en cualquier parte.

El 7 marzo (Osama ben Laden nunca habla sin intentar llevar a la práctica sus amenazas) dos gigantescas explosiones volaron por los aires las embajadas de Estados Unidos en Nairobi (Kenia) y en Dar es-Salaam (Tanzania), 213 muertos (12 eran americanos) y 4500 heridos en la primera, y 11Muertos y 85 heridos en la segunda (esta vez sin ningún americano afectado) Clinton ordeno el bombardeo selectivo de una fábrica química en Sudán y campos de entrenamiento en Afganistán. Ben Laden se convertía tras estos bombardeos, criticados por su imprecisión y sin respaldo internacional, en ídolo de los movimientos radicales islamistas sunitas en Pakistán.

Estas dos acciones simultaneas marcaron el comienzo del terrorismo espectacular de Aqaeda, o lo que se conoce en el argot de los servicios de seguridad como “marca Al Qaeda”: muchos muertos, grandes explosiones, conmoción en los medios por la magnitud de un gran atentado y coordinación de varios comandos a la vez. Desde esa fecha se produjeron diversos atentados a diferentes países y lugares relacionados con Estados Unidos, incluido el atentado contra una fragata por una lancha suicida que aunque no fueron aclaradas las causas bien pudo organizarlo Al Qaeda. Llegamos entonces a septiembre de 2001, un momento en que se habían dejado de producir importantes atentados y la situación en Argelia, Egipto, Israel, Turquía, Estados Unidos y Oriente Medio se habían calmado, incluso el régimen talibán parecía también tranquilo en sus campañas. Tal vez por este “apaciguamiento” del integrismo islamista, Osama ben Laden decidía lanzar un último órdago para reactivar no sólo el frente contra Estados Unidos sino todos los posibles.














11-S Y LA GUERRA DE AFGANISTÁN


La red Al Qaeda con Osama ben Laden como cabeza más visible de su gran conglomerado, decidía antes del 11 de septiembre del año 2001 activar varias de sus células durmientes en los Estados Unidos, para dar un salto cualitativo e inmenso, en su estrategia de lucha contra Occidente. El plan previsto era secuestras 10 grandes aviones y designar 10 objetivos, pero se redujo a los 4 conocidos. Si uno traza dos líneas verticales - como el número 11 - y las pone encima la “s” del mes de septiembre, consigue formar el símbolo que más define a la sociedad americana para los musulmanes y para el mundo. Y el ataque de Al Qaeda buscaba dejar claro que se trataba de un ataque a gran escala a todo el sistema social, político, económico y militar americano. Uno de los aviones impacto en el Pentágono (su omnipresente poder militar), otros dos aviones fueron lanzados contra el WTC en el corazón financiero económico de la isla de Manhattan (antiguo objetivo del grupo del Jeque), y el último cayó a tierra o fue derribado por la fuerza aérea cuando sus posibles objetivos eran la Casa Blanca (el poder ejecutivo) o el Capitolio de la nación (el poder legislativo) Se trataba de un plan meticulosamente elaborado, con suicidas que pertenecían a las clases acomodadas de Arabia Saudí, aliado de los Estados Unidos, y que por tanto era difícil que levantarán sospechas. Se dejaba claro que eran capaces de igualar la capacidad destructiva de un bombardeo montado por otra nación. Los Estados Unidos sólo habían sufrido un ataque similar en Pear Harbour, pero en esa ocasión fue contra una base militar - no se trataba de civiles trabajando - y la base se encontraba fuera del continente americano y muy lejos del corazón financiero-político de los Estados Unidos.

El Shock fue tan brutal que la sociedad pidió soluciones a los gobernantes, se aprobaron leyes que restringían la información confidencial y los derechos de los posibles terroristas. Y sobre todo, los estrategas del Pentágono, la CIA y el FBI rediseñaron la estrategia de los Estados Unidos en el mundo, orientándola a luchar contra toda clase de terrorismo sobre todo el islámico.

Osama ben Laden hizo de Al Qaeda con este atentado, un banderín de enganche en todo el mundo para seguir la yihad en todas las partes del mundo. Esta vez sería por medio del terrorismo a gran escala y no por batallones de guerrilleros aunque esto no se descarta en Irak ahora. Todos los grupos que habían permanecido “durmientes”, o necesitaban un núcleo al que unirse, vieron en Al Qaeda la esperanza de hacer la yihad hasta sus últimos extremos. Una manera de atacar a todos los impíos sin tener que referirse a un frente de guerra concreto, ya que se pasaba de una estrategia de frente de batalla a una estrategia de red terrorista, donde la lucha se realiza desde células y no tiene nada que ver con ir conquistando territorios o bastiones. Detrás de Al Qaeda existen una panoplia de organizaciones grupos o grupúsculos del mundo radical islámico, que en condiciones normales no sellarían una alianza, pero que al actuar como lo hace Al Qaeda tienen la suficiente autonomía para firmar los atentados con su nombre y seguir dentro de sus propósitos más individualizados.

Nos encontramos ante la entrada de la lógica terrorista que pueda tener ETA, las fenecidas Brigadas Rojas, o el IRA, en el movimiento islámico radical. Ya no hay una ciudad que tomar al asalto o conquistar frente al ejército del gobierno impío, se trata de golpear en los centros neurálgicos de esas ciudades, con la mayor fuerza posible, destruyendo y produciendo el mayor número de muertes inocentes posible, en atentados lo más espectaculares y aterradores posibles, todo ello para destruir la moral, la capacidad de oposición y poner al enemigo impío a la defensiva con sólo varias células actuando. Se trata de llegar a una situación, donde sea posible la rebelión de las masas islamistas en los países árabes, o a una situación de miedo en las sociedades occidentales que las obligue a llevar a cabo actos perseguidos por los terroristas, por ejemplo la liberación de un terrorista famoso, de un imán o jeque determinado, o la retirada de unas tropas que consideran molestas en un país determinado. Eso es parte de los objetivos del terrorismo global de Al Qaeda, que en estos momentos podemos decir que engloba a todos los terrorismos islamistas que hay y que habían dejado de operar.

Para todos ellos el enemigo es Estados Unidos y el Estado de Israel, siendo los siguientes odiados los aliados de ambos en el propio Oriente Medio (Arabia Saudí aliado de Estados Unidos) y englobando también a todos los países occidentales y estados impíos del planeta, que son casi todos en realidad. De hecho ahora casi todos los países árabes son considerados por Al Qaeda estados impíos habiendo recibido atentados en su suelo: Turquía, Marruecos, Egipto, Emiratos, etc.. Dentro de los Estados Arabes ha conseguido Al Qaeda una dinámica perversa, ya que la mayoría de sus habitantes sienten asco por los atentados que realiza Al Qaeda, pero no apoyan en absoluto la lucha que los Estados Unidos y muchos de sus gobiernos han emprendido aliándose con los americanos para acabar con esta organización y todo el mundo de células emparentadas que la rodean. Un ejemplo lo encontramos en Pakistán, donde parte de la población no comparte la muerte indiscriminada de inocentes, pero existe un extenso apoyo islamista por Osama ben Laden y su organización, lo cual les lleva a odiar al general Musarraf y su gobierno en las acciones que emprende contra la red Al Qaeda en suelo pakistaní, o el apoyo cuantioso que ofrece a los Estados Unidos en su lucha contra este terrorismo.

El 11 de septiembre se desencadenó en un momento crucial y escogido. La opinión pública árabe se encontraba traumatizada por las imágenes de la intifada lanzada en septiembre del 2000 en Palestina. Las imágenes de los niños cosidos a balazos por el ejército israelí, o los asesinatos preventivos llevados a cabo por sus servicios especiales, se ven gracias a la televisión vía satélite y global que ahora posee el mundo musulmán de manera instantánea. Ben Laden cita la lucha palestina y el bloqueo de Irak entre las agresiones al mundo árabe, y sabe que está causando dolor entre su comunidad, y su acto terrorista busca una cuartada en estos hechos, buscando al mismo tiempo la reunión en Al Qaeda de todos los opositores y combatientes a Occidente.

Osama ben Laden consiguió con un golpe tan espectacular una nueva estrategia; referida por Gilles Kepel en su prólogo del libro “la yihad” que tanto debe a mis primeras páginas. Debido a que la lucha de los yihadistas estaba decayendo en el mundo, y el islamismo había perdido varias guerras y batallas en Bosnia, Argelia o Egipto, se trataría de llevar a cabo una acción aterradora que además de provocar la oportuna conmoción, provoque una reacción de ataque contra las bases y sociedades de los autores, y luego aparezca la correspondiente solidaridad con los que sufran estos ataques. Es decir; cuando días antes del 11 de septiembre, ben Laden eliminó al Comandante Massoud señor del norte de Afganistán, ben Laden se estaba adelantando a lo que pudiera hacer el posible aliado de occidente cuando este viniera a castigar a Afganistán en busca de Al Qaeda. Elimina a Massoud porque sabía que era una pieza clave para llegar a él (porque esperaba la reacción que se produjo) y porque creaba descordinación entre la alianza del norte de Afganistán. La acción fue el 11S, la reacción fue el ataque a Afganistán y toma de Kabul por la ONU, y de los señores de la guerra en el norte, junto a Afganos del centro y sur del país. La reacción según la estrategia de ben Laden, habría acabado en esta guerra contra Afganistán, pero la administración Bush alargó la reacción hasta incluir la desaparición del régimen iraquí, reputado enemigo de Estados Unidos y sus aliados más cercanos. La tercera fase de solidaridad tras el oportuno llamamiento a la yihad para salvaguardar Afganistán, es la unión y creación de todas las células que ahora rodean el nombre Al Qaeda. Tal vez, o no lo sabemos, Osama ben Laden, para revitalizar la lucha del islamismo radical contra occidente y los gobiernos y poblaciones impías en los países árabes, buscase un levantamiento o revitalización de los movimientos islamistas de occidente, cosa más difícil de conseguir en el corto plazo.

Es muy posible que Osama ben Laden contase con un ataque de Estados Unidos y sus aliados, con fuerzas de tierra sobre Afganistán al estilo de la Unión Soviética, y por ello es muy posible también que su escondite haya sido preparado con la suficiente antelación para ocultarle a él y al misterioso Mulá Omar, o sea posible que éste haya muerto, ya que solamente la voz de ben Laden ha sido dada como auténtica en recientes comunicados a los medios de comunicación árabe. Es por ello que la hipótesis de que la guerra en Afganistán pueda vivir otras etapas más angustiosas, no está descartada, sería una reactivación a la manera de Irak, no una probable desestabilización del Pakistán vecino con el asesinato del general Musarraf, o el incremento de combatientes islamistas entre las dos fronteras en ayuda de los grupos que resisten de Al Qaeda o los talibánes.

Es ya una pista, que bajo las siglas de la organización de ben Laden se reúnan todos los grupos de ambos países que quieren continuar la lucha contra Estados Unidos y las fuerzas de la ONU desplazadas a Afganistán. Es muy probable que se estén dando los pasos para futuras ofensivas islamistas para recuperar Kabul de los impíos occidentales. Y tal vez coincida esta sospecha, con las propuestas sobre la mesa de operaciones de la OTAN para enviar más tropas a Afganistán, entre las que destaca el casi seguro envío de más tropas por parte del gobierno español, para contribuir a ayudar a la estabilización del país, y “ocupar” zonas fuera de la capital de Kabul. Si hasta ahora no se han ocupado esas zonas es porque existen claras sospechas de que la guerra de Afganistán no ha terminado, y que los talibánes y Al Qaeda lo esperan.

También es muy posible que los diferentes grupos que siguen combatiendo en las fronteras de Afganistán y Pakistán, tengan como misión seguir guardando los santuarios en esas regiones montañosas de Al Qaeda. Lo curioso es que las fuerzas de elite norteamericanas o paquistaníes no hayan “peinado” completamente esas zonas en busca de ben Laden, o tal vez sea imposible por la orografía, ya que los paquistaníes si se juegan su estabilidad y los continuos atentados contra el presidente del país prueban que no se trata de un mirar hacía otro lado de momento.

Lo que es muy probable que no contase para Osama ben Laden, es que el grueso de las tropas norteamericanas se situase en Irak y no en Afganistán donde hay muy pocas. El traslado del frente de batalla a Irak por la administración Bush, ha hecho que sea allí donde se estén dirimiendo combates directos entre las fuerzas encuadradas en Al Qaeda y los Estados Unidos de América. Y donde la resistencia árabe de corte más genuinamente nacionalista esta actuando contra las fuerzas americanas siguiendo las tácticas terroristas de la red de Al Qaeda. Consiguiendo ben Laden uno de sus propósitos, la unión táctica de actuación y de objetivos de todos los que se sienten enemigos de Occidente.

Pero lo que sí parece haber conseguido de sobra es una masiva llegada de nuevos voluntarios a sus filas, nuevos yihadistas que van a ir a luchar a montañas desconocidas de Afganistán contra las fuerzas de la ONU, sean cuales sean las nacionalidades de estas fuerzas, a engrosar sobre todo las redes de terrorismo creadas o que tienen el paraguas de Al Qaeda, pudiendo encontrarnos con células terroristas que tiene en un mismo grupo, egipcios, marroquíes, argelinos o saudís, consiguiendo de esta forma la virtual unión de la Umma en una yihad contra occidente en estos grupos de diversas nacionalidades árabes. Todos pasan a tener el mismo objetivo brutal y en ocasiones suicida: Golpear los centros neurálgicos de poder de los países árabes impíos y de occidente sin reparar en daños o medios destructivos.

Es por eso que es tan importante el debate de las armas de destrucción masiva. No porque estas estuvieran esperando a la Coalición de Estados Unidos en Irak, sino hasta que punto puede caer en manos de Al Qaeda y países amigos a ella. Lo que no podemos poner en duda alguna es que Al Qaeda sueña con poseerlas y que tiene recursos financieros grandes para lograrlo. Tampoco se pone en duda que Pakistán, Korea del Norte, o la Antigua Unión Soviética han desarrollado esas armas y puede existir personal y material fugado de sus sistemas dispuesto a ser ofrecido por dinero o alianzas oscuras para que Al Qaeda o alguien que desestabilice como ella tenga esas armas de destrucción masiva. Pongamos un ejemplo que sólo va a servirnos de hipótesis y que no es tan disparatada como parece:

La situación en Israel parece estar derivando hacía un punto muerto, donde ambos bandos no consiguen ganar la guerra que mantienen con el contrario. Los palestinos nacionalistas e islamistas consiguen amedrentar y dividir a los partidos políticos judíos, a favor de una mayor debilidad en el proceso de paz frente a ellos; Israel con sus atentados selectivos contra piezas clave de las organizaciones islamistas neutraliza las ventajas y avances de estos, y además les deja en un estado “descabezado” que les hace volver a empezar o replantearse la estrategia cada vez en menores tiempos, consiguiendo que no se sientan tan seguros de su posible victoria. Por el contrario el Estado de Israel, se está cansando de la larga lucha y cada vez emplea métodos más ilegales y denunciables por la comunidad internacional, que están colocándole en una situación de exterminador de niños, civiles, destructor de barrios pobres y limpieza étnica. Su proyecto de muro raya en la locura medieval al buscar una salida propia de los stalinistas o nazis cuando pusieron en marcha el Gueto de Varsovia.

Esta situación donde cada bando no puede conseguir una rendición del otro, podría tener una cambio más terrible. ¿Podría ser posible que una bomba atómica táctica hiciera explosión en Telaví, Haifa o una gran colonia judía? Es decir, ¿estaría interesada Al Qaeda en hacer llegar ese arma a un comando dispuesto a hacerla explotar, para que la situación en Palestina entrase en una nueva fase apocalíptica antes de ver una mínima posibilidad de arreglo con el estado hebreo? Y los actores de este drama podrían incluso no ser controlados por las propias organizaciones islámicas en la zona. ¿Qué haría el gobierno de Israel, si una mañana se encontrase con semejante ataque y 1.000.000 de muertos, sabiendo que dispone de uno de los arsenales nucleares más nutrido? ¿Qué ocurriría si lanzase un ataque nuclear de represaría sobre el mundo árabe? Sería probablemente, dentro del circuito antes dicho (provocación - represión - solidaridad con el reprimido), el que Al Qaeda quiere encontrar en su búsqueda de un Apocalipsis, que catalizase a todos los movimientos islamistas que se han quedado dormidos en la mayoría de los países musulmanes. El control de las armas de destrucción masiva es una prioridad del mundo, no una prioridad de los norteamericanos, ya que en manos de Al Qaeda, todos nos convertimos en objetivo potencial en su búsqueda de una completa confrontación, para conseguir la solidaridad de todo el mundo musulmán.

El ejemplo-hipótesis aquí expuesto con las armas nucleares de carácter táctico, no es descabellado si lo traducimos a armamento químico o bacteriológico: La poca información que se dispone sobre la preparación del atentado a los servicios secretos jordanos por parte de grupos vinculados a Al Qaeda, habla de un ataque químico mediante explosión que hubiera costado la vida a 20.000 personas en primera instancia a parte de volar la sede de los servicios secretos de Jordania. Lo poco que también se conoce sobre frustrados atentados químicos en Inglaterra y Japón, hablan también de la búsqueda por parte de Al Qaeda de armas de destrucción masiva, que impliquen un salto cualitativo y sobre todo cuantitativo en su logro de destrucción. Es por lo que decía que el debate del control y destrucción en su caso, de armas de destrucción masiva en manos de potencias poco democráticas cercanas a organizaciones radicales, no es un debate para enfrentarse a Estados Unidos sino un debate que hecho desde el punto de vista “pacifista ramplón” puede llevarnos a las tragedias más increíbles que el mundo haya vivido desde Dresde, Hirosima o Nagasaki, ya que la capacidad de destrucción está sobre nuestra mesa, y sólo hace falta para esas tragedias que caiga en las manos de organizaciones que deseen utilizarla.

Conectado a este problema, se encuentra la actual situación iraní. Esta nación esta en el filo de la navaja, ya que reiteradamente a desoído los llamamientos de la OIEA para inspeccionar su programa secreto nuclear, programa que al final ha tenido que reconocer completamente que lleva a cabo. Si Irán decide, como parece indicar el incidente último del apresamiento de 3 patrulleras británicas en aguas del Golfo Pérsico (días después de una derrota histórica en unas elecciones locales y europeas del partido laborista de Tony Blair) que sigue con su programa secreto nuclear para conseguir su primera bomba atómica, podemos estar ante un claro conflicto futuro en la misma zona que se ha calentado políticamente hasta el extremo. Parece claro que las petro monarquías no podrían dormir tranquilas si Irán poseyese es tipo de armamento, y Estados Unidos no podría permitir que una república islámica tuviera semejante arsenal de cara a poder conservar sus márgenes de seguridad en la zona y en los propios Estados Unidos. La iniciativa de la Unión Europea, liderada por Francia, Alemania e Inglaterra por evitar el desarrollo de estas armas en suelo iraní, parece haberse esfumado en papel mojado, como el que firmó Hitler en Munich. O estemos ante un gran órdago de Irán, que de momento desconocemos lo que al final pudiera perseguir. Más razonable e intranquilizador es pensar que Irán puede haberse decidido por retomar la iniciativa de liderar el mundo islámico en su enfrentamiento a Occidente.

Esto nos colocaría ante un nuevo abismo peor que el actual de Irak, ya que Irán por poderío y población no es un país fácil de ser tomado como Irak. Un bloqueo también llevaría a una situación de profunda crisis entre Occidente y los países musulmanes en todo el mundo. Y el que ahora las tropas norteamericanas estén junto a la frontera de Irán desde la de Irak, no tranquiliza en absoluto las posibles chispas que se enciendan. Sin entrar a la cuestión de por qué a Pakistán se le permitió tener la bomba atómica cuando colaboro con Occidente en al expulsión de los soviéticos de Afganistán, y a Irán se le niega desde el principio ese derecho por el propio Occidente, diré que existe otro problema añadido en este caso, y es el precedente del bombardeo por parte de Israel de la central nuclear en construcción de Irak en su momento. Nadie duda que si Irán consigue acercarse a la bomba atómica propia, el Mosal dará la voz de alarma y se encenderá la espoleta que puede desencadenar una confrontación generalizada en toda la zona, cuyas ondas expansivas serán atentados de múltiples organizaciones en Occidente, ya que Israel significa verdaderamente la yihad querida a gran escala y esperada por todas las capas de la población árabe. Nadie duda que la llamada de los islamistas contra “el diablo sionista” sería contestada por casi todos los integristas de las sociedades musulmanas ya muy cegados por lo que ocurre en Afganistán y en Irak.

Irán puede estar jugando una peligrosa baza por conseguir la primera bomba atómica árabe en el Golfo Pérsico que le daría una ventaja y protección considerable. Sabe que un ataque contra su país encendería las mechas de toda la insurgencia anti occidental árabe, sabe además que los únicos que se atreverían a pararle los pies serían Israel o Estados Unidos, odiados hasta el tuétano por los islamistas de todo el Islam y la población moderada árabe. Y por si fuera poco sabe, mirando el mapa que es el nexo de unión entre Afganistán e Irak, a los cuales puede desestabilizar hasta provocar largas y sangrientas guerras en los territorios controlados por la población chiíta, y elevándose a paladín de la lucha contra Estados Unidos. No son buenas las informaciones oficiales dadas por Irán, sobre la formación de una brigada de miles de suicidas para luchar contra el poder americano. Ni dejan ver claro futuro las afirmaciones de los inspectores sobre la clase de centrifugadoras de uranio conseguidas por Irán. Un conflicto a gran escala entre la potencia chiíta y las tropas occidentales en la zona podría desembocar en una guerra mundial árabe de proporciones desconocidas para todos los países de la zona, incluyendo Egipto, Siria, Pakistán, Afganistán, Líbano, Norte de África… Se trataría de un conflicto muy difícil de calibrar por la magnitud de sus consecuencias.

Por otro, ¿hasta qué punto sería fiable un Irán con un arsenal atómico cuando vemos semejante actitudes cuando no lo tiene? ¿Qué diríamos de nosotros mismos si dejamos que Irán consiga en esta situación la bomba atómica, y después supiéramos que ha vendido una a un grupo radical islámico? ¿O qué ha trasladado otra al Líbano como presión política? ¿O qué existe dentro del régimen fanáticos capaces de proporcionar partes de la misma a Al Qaeda u organizaciones cercanas deseosas de llevar a cabo la guerra santa contra Occidente? No es fácil ponerse de parte del movimiento iraní revolucionario con sus antecedentes, y no es popular ponerse del lado de Estados Unidos e Inglaterra por sus maneras de actuar, y en última instancia estar al lado de Israel en este problema. Pero si no se apoya al segundo bando puede despertarse en un mundo con tintes apocalípticos el día de mañana, porque de momento, es mi opinión, la proliferación de armas de destrucción masiva eleva las probabilidades de grandes atentados en el mundo, y una probable guerra nuclear que no llegaron a cometer los Estados Unidos y la ex URRS. Los programas confesados por Libia después de la vuelta a Occidente de Gadafi, indican que son muchos los que intentan obtener este tipo de armas. Por eso el problema nuclear iraní va dar muchas páginas y primeras planas de los periódicos, y probablemente, esto puede sonar a profecía y no lo es, muchos peligros veremos nacer en un conflicto que se acelere entre Occidente y los islamistas.

Queda claro volviendo al tema central del conflicto actual en Afganistán derivado de los atentados del 11-S que esta guerra de bajo desarrollo continuará muy posiblemente durante bastante tiempo, que las imágenes de niños afganos muertos y bodas reventadas por equívoco con metralla no son la mejor manera de calmar las cosas. Que la OTAN debe aumentar el número de tropas si quieren mantener lo conseguido, y entre esos posibles aumentos están las tropas españolas que pueden ser desplegadas, principalmente en áreas no controladas actualmente. Si la situación se deteriorase tendrían que plantearse si se mantienen bajo la bandera (ahora si) de la ONU, o vuelven a salir corriendo para que su débil gobierno no vea con horror una guerra de baja intensidad trasformada en conflicto generalizado, aunque ese conflicto como hemos visto viene dado por un régimen atroz que ayudó y protegió los terribles atentados del 11-S, (autores del 11-M podrían haber estado en Afganistán en algún momento antes de prepararlos), cuya erradicación fue completamente avalada por la ONU. No hay que olvidar diversas cuestiones en este punto, como por ejemplo que Afganistán y los soldados españoles allí se citen como motivos del 11-M por los comunicados y documentos conocidos de los autores. Que el presidente de Afganistán y sus ministros tengan que ser protegidos por las tropas de elite de los Estados Unidos, y la OTAN apenas controle Kabul en el país.

Sobre el 11-S se ha escrito mucho, y se sigue escribiendo e investigando, ahora se nos dice que la administración Bush tardó mucho en reaccionar al ataque y enterarse de lo que sucedía. Es algo que no tiene sentido, no creo que nadie ese día pudiera saber en la primera media hora del ataque hasta donde querían llegar sus autores, y como debíamos actuar contra aviones de pasajeros cargados de gente inocente, o que deben hacer los servicios de seguridad nacional contra un gran avión secuestrado utilizado como kamikaze. La sorpresa fue total, y si una base militar repleta de armamento antiaéreo como Pear Harbour no pudo contestar al ataque por sorpresa de la armada japonesa, tampoco el ejército de Estados Unidos estaba preparado para contestar a esta nueva manera de llevar a cabo la guerra entre los islamistas y Occidente.


LA GUERRA CONTRA SADAM HUSSEIN


Cuando el general norteamericano apodado el “Oso del desierto”(cuyo apellido traía de infarto a los presentadores de televisión de la época) comunicó por medio de su jefe, el teniente general Colin Powell, al presidente Bush padre que sus blindados se encontraban sobre la autopista que llevaba a Bagdad y que en 2 días podían llegar a la capital y hacer caer a Sadam Hussein y su régimen. Bush padre escuchó a sus consejeros, o se escuchó así mismo, y acepto la opinión de que si el poder de Sadam caía Irak se sumiría en el caos y se convertiría en un Afganistán, donde chiítas, Kurdos, sunitas e islamistas radicales se matasen sin piedad. Bush padre no deseaba meter a los marines en Irak por un largo periodo y prefirió imponer a Irak durísimas sanciones para controlarlo. Estas sanciones hay que decir que las mantuvo el presidente Bill Clintón de manera inalterada durante 8 años, y que durante este mismo presidente y no con Bush hijo, Al Qaeda creo su gran infraestructura en el mundo (también hay que recordar que Bill Clinton dijo que el hubiera votado por la invasión de Irak de haber sido senador) ¿Algo sabía de sus tiempos de presidente?) En el mandato de G.W.Bush la situación derivó a un aumento de los bombardeos selectivos sobre objetivos militares iraquíes. Las famosas inspecciones del arsenal iraquí, se realizaron y se suspendieron a lo largo de esos años de bloqueo, la ONU si emitió informes que declaraban a Irak como país que intentaba conseguir armas de destrucción masiva, y sobre todo que las había tenido en algún momento.

Sabemos hoy que Bush hijo preparó la invasión de Irak con antelación a la de Afganistán pero después del 11-S. Que mintió reiteradamente en la ONU y a otros gobiernos como el español sobre la existencia de las armas de destrucción masiva en Irak, que presentó pruebas falsas, fotografías trucadas y expertos que retorcieron los datos. Que Sadam muy probablemente se había desecho de las armas de destrucción masiva en la fecha de las últimas inspecciones, y que por tanto ya no existían, que intento llegar a un acuerdo último con los Estados Unidos para evitar su caída, y que Bush no dudo un solo momento en que tenía que llegar a Bagdad y provocar la caída de todo el régimen. Que no existían tampoco conexiones claras entre Al Qaeda e Irak, y que las que se inventaron con enormes organigramas en colores, se difundieron para engañar a estados como el español u opiniones como la inglesa (Aunque también ahora sabemos que Sadam y Osama ben Laden se pusieron en contacto para luchar contra la monarquía saudí. Y que Sadam no quiso asesinar a importantes personalidades de este país como le pedía Al Qaeda) Sadam Hussein nunca había mantenido buenas relaciones con los islamistas ni con Al Qaeda eso era algo que debía saberse claramente por los servicios de inteligencia. El antiguo carácter laico de Sadam le hacía enemigo casi de Al Qaeda o incluso de los islamistas en general.

Cuando uno constata la obsesión de Bush por la invasión y destronamiento de Sadam Hussein, ve en este hecho algo más que una jugada de vaquero que elimina al malo de la película, ya que se produce tras la primera fase de la guerra de Afganistán. Antes de exponerles lo que yo veo tras esta polémica e inexplicable decisión de atacar Irak por parte de Bush, hablaré de la decisión del presidente Aznar de apoyar a Bush en la invasión premeditada.

Aznar que hasta ese momento, no había cometido errores de bulto en sus años de presidencia, debía tener importantes razones para jugarse todo el prestigio político en el apoyo a los Estados Unidos. Todo radicaba en nuestros aliados con respecto a un posible problema en el Norte de África. Sabemos que Francia históricamente y actualmente nunca ha apoyado a España en su política con Marruecos, el Sahara o Argelia, más bien cuando ha podido la ha obstaculizado porque piensa que es un terreno propio y España una aficionada que debería plegarse a sus postulados. Alemania, igual que Centroeuropa siempre han visto muy de lejos los problemas en el Mediterráneo y tampoco han apoyado nunca a España en su camino de estabilización o de conflictos en la zona del estrecho. En cambio Estados Unidos, aliado con el régimen de Rabat desde hace mucho tiempo si podía tener sentido como nexo de unión y equilibrio entre España y Marruecos, además de ser una garantía importante para salvaguardar frente al integrismo radical la defensa de la unidad de España con respecto a las Canarias, Ceuta, Melilla y Andalucía. El problema que se constato con el intento de toma por Marruecos del Islote de Perejil, fue determinante para enmarcar el problema del estrecho. Marruecos llevó a cabo un tanteo de la situación militar en la zona tomando una posición insignificante en extensión pero probando la determinación de España para defender partes más importantes de su nación, además y esto no fue suficientemente reseñado, Marruecos estaba probando las posibles alianzas de España en el exterior para el día que pudiera ser algo más importante lo ocupado. Y en ese momento constató que nuestro principal aliado (a años luz de Francia o Alemania) eran los Estados Unidos, que no podían permitir que dos aliados suyos se enfrentasen.

Al apoyar la invasión de Irak, Aznar estaba dando algo a los Estados Unidos que no podían darle otros estados más grandes que España y con mayor potencial, estaba poniéndose por delante de Francia o Alemania a la hora de recibir posteriores apoyos en crisis que tuviera España en el estrecho. También hay que reseñar que un satélite espía de Estados Unidos fue puesto sobre el sur de Francia con un cometido no declarado pero reconocido extraoficialmente en los medios: la vigilancia de las comunicaciones y enlaces de los terroristas de ETA en Francia, la prevención de atentados y el apoyo a la destrucción de la banda terrorista por parte de la policía española en colaboración con la francesa. Ese satélite fue retirado sin muchas explicaciones, cuando el Psoe retiró a nuestros soldados de Irak, ya que según dijeron se necesitaba en otros lugares más. Un tercer elemento beneficioso de esta alianza con Estados Unidos la encontró Aznar a la hora de negociar en Europa mejoras o ventajas para España, el ser amigo del país americano nos daba un apoyo que hacía que los europeos tuvieran que ceder mayor porción de terreno que el que hubieran previsto con una España sola o con los apoyos de siempre. Esto no quita para que su enfrentamiento con Alemania y Francia se convirtiera en algo exagerado en determinados aspectos, o que la crisis de Irak no pudiera haber tenido una mejor gestión que la que tuvo entre los países europeos, ya que se puede discrepar pero no llegar a insultarse.

Aznar vemos que buscó el apoyo de los Estados Unidos para acabar con ETA, y para proteger a España de su flanco en el estrecho de Gibraltar. Con relación a esta protección respecto a Marruecos, España podía mantener la autonomía en la cuestión del Sahara, Marruecos que pretende la anexión del mismo desde el principio y que no acepta ni un referéndum entre los habitantes reales del Sahara, ni tampoco quiere que exista una coalición de países que defienda los derechos del pueblo saharahui, veía en esta coalición de España con Marruecos algo que no le permitía conseguir la anexión pura y dura del Sahara. El islote del Perejil formaba parte de este problema también, ya que coincidió en el tiempo con prórrogas en el proceso de negociación en la ONU. Para nosotros es vital por diversas razones mantener la postura moral que mantenemos - no sé si ahora sigue manteniéndose esta postura por el gobierno socialista - en el conflicto del Sahara.

El Sahara es la actual frontera en el expansionismo marroquí, y está frente a las islas Canarias y sus aguas territoriales dependiendo como se interpreten se mezclan también con las de estas islas. Existe alguna certidumbre de que en esas aguas puede haber petróleo suficiente para extraerlo comercialmente. El problema para España con el Sahara anexionado a Marruecos, es que las Canarias pueden convertirse por ese lado en un conflicto importante de aguas, pateras, inmigración y reivindicación de Marruecos, nadie olvida la foto de Zapatero ante un mapa de Marruecos que las incluía como propias. Pero además esa frontera que es el Sahara es muy importante, porque la reivindicación de las ciudades españolas de Ceuta y Melilla así como los islotes anejos, sería probablemente lo siguiente a considerar como frontera en el expansionismo marroquí. Aznar pretendía en alianza con los Estados Unidos tener un apoyo en el proceso del Sahara que estaba dirigido en ese momento por un norteamericano, que al final ha tenido que tirar la toalla debido a que las partes no pueden lograr ni un acuerdo de mínimos.

Aznar no explicó nada de esto, sólo habló de que nos habíamos aliado con Estados Unidos, porque a parte de ser ya aliados nos interesaba debido a la lucha total que Estados Unidos había emprendido contra el terrorismo, y que hacía base de su estrategia en el futuro. Si España tenía un problema importante de terrorismo se debía aliar con aquel que lo iba a combatir por todos los medios, para conseguir sinergias y ventajas, y recíprocamente debíamos apoyar a los Estados Unidos en sus empresas. Pero Aznar no debió pensar que estaba firmando un cheque en blanco a Washington, no debió hacer ostentación de lo conseguido poniendo los pies sobre la mesa con Bush, o hablar en mejicano para deleite de los hispanos, no entraba nada de eso en lo que nos hacía bien. Tampoco debió sentirse llamado a protagonizar la foto de las Azores; pudo tener muchos más registros para apoyar a su aliado como por ejemplo hizo Dinamarca o Polonia, cuya presencia no estaba en esa foto, incluso Portugal jugó de manera más calculada en esa declaración atlántica (el presidente de Portugal fue premiado con la presidencia de la Unión Europea incluso tras las Azores porque no salió en la foto) El envío de tropas a Irak, también pudo tener otros matices y aspectos que no tuvo en cuenta en su momento Aznar. Podía participarse en la coalición mucho después, o esperar a una resolución de consenso con Europa, o esperar a la resolución que más tarde se produjo en la ONU. Tenía más opciones antes de partir de subirse a un barco cuyo paso iba a ser muy largo por el puerto, sobre todo intuyendo las dificultades que tendría después Bush con la opinión pública internacional, y donde ir dando un apoyo diario sin el envío desde el principio de tropas, serviría para mantenernos como aliados privilegiados de todas formas.

Aznar decidió dar un paso decisivo sin consultar a su propio partido, ni escuchar algunas voces que le pidieron más comedimiento en un asunto tan trascendente, pesó igual que González en otros tiempos que había llegado el momento de entrar en la historia antes de retirarse. No quiso explicar nada, ni siquiera, el ministerio de Defensa explicó de una manera pormenorizada el cometido de nuestras tropas en Irak. No habíamos participado en la invasión en ningún momento de ella, ni siquiera dimos o se nos pidió apoyo logístico durante la misma, era claro que nuestras tropas iban a ayudar en el posterior proceso de paz. No llevamos artillería, ni carros de combate ni material pesado de apoyo alguno, lo que da una imagen a las claras de que nuestros cometidos se alejaban del carácter militar que se acusaba desde la izquierda. Entre nuestros cometidos estaba el apoyar a la policía que nacía para proteger a sus ciudadanos y no para vigilarlos y reprimirlos. Reconstruir escuelas, hospitales, ayuntamientos, y fomentar la participación ciudadana eran otros de los cometidos “miserables” que debíamos abandonar inmediatamente según los críticos de tener tropas allí desplegadas. Que sepamos no entramos en combate de motu propio ni maltratamos a ningún iraquí prisionero o civil armado, tan sólo nos defendimos en alguna emboscada y participamos en misiones de búsqueda de terroristas. Cómo nuestros agentes de inteligencia fueron masacrados en Irak, no ha sido aún dilucidado completamente.

Gran parte de la imagen del ejército de ocupación que tenía Estados Unidos, la trasladamos al nuestro, con críticas saduceas, sabíamos que era mentira pero hay políticos que piensan que vale todo por lograr una ventaja sobre sus oponentes, sobre todo entre los partidos de izquierda cuando pueden sacar a la calle su odio hacía Estados Unidos. El desprestigio provocado hacía nuestras fuerzas armadas tendrá un reflejo fatal en otras misiones y nuestra sociedad. Y la huida presurosa de Irak no parece estar siendo recompensada por Francia y Alemania, que se han vuelto a cercar con gusto y necesidad a los Estados Unidos aprobando una resolución en la ONU que en su punto 15 insta al envío “de fuerzas militares” a Irak.
Digamos que la vuelta de las tropas está concluida, que las principales fuerzas políticas de nuestro país pueden llegar a la conclusión de que un partido quería estar junto a los Estados Unidos para lo bueno y lo malo, y otro no quería que nuestros soldados fuesen a Irak, y por tanto al conseguir el poder les trajo de vuelta, un hecho del que tampoco puede vivir eternamente. Esa fue nuestra historia, ahora volvamos a las probables hipótesis por las que Bush decidió entrar en aquel avispero.

Antes de que se desarrollara la Guerra en Afganistán, Bush y sus consejeros miraban el Golfo Pérsico como uno de sus objetivos, el régimen iraquí debía ser eliminado en la estrategia del Pentágono. Pero mientras se atacó al régimen talibán pareció olvidarse por un tiempo este objetivo, es después cuando se reactiva todo el proceso de invasión de Irak con el tema de las armas de destrucción masiva como excusa. ¿Por qué Estados Unidos en contra de importantes aliados y sin contar con muchas pruebas y apoyos decidió el derribo del régimen de Sadam? Hay dos teorías que responden a esta pregunta: La primera, muy poco ortodoxa pero que la opinión pública es la que prefiere, Bush atacó Irak porque tenía una obsesión por Sadam desde que su padre liberó Kuwait del régimen iraquí. Esta hipótesis dice que Bush y sólo Bush decidió hacer la guerra a Irak, basándose en mentiras y elucubraciones propias, no se basaba en ningún principio estratégico conocido o defendido. La segunda hipótesis se apoya un poco en la primera, pero es la que más popular se hizo entro los políticos radicales de la izquierda europea, Estados Unidos atacaba Irak porque quería controlar un país rico en petróleo y conseguir este a precio barato. Esta hipótesis de explicación, tiene una apoyatura algo más cierta en todo lo que está pasando en Oriente Medio. Arabia Saudí, el más importante aliado de Estados Unidos en la zona, se encuentra desde hace mucho viviendo una situación de tensión entre sus sectores islamistas opuestos a la monarquía y los sectores que la apoyan, la extensión de Al Qaeda en el país y los propios llamamientos del rey Saudí a al amnistía de los que se entreguen, hablan a las claras de lo extendido del movimiento de oposición islamista. Es muy probable que los asesores presidenciales vean peligro en la estabilidad de Arabia Saudí, el mayor exportador de petróleo de la zona, y vieran con miedo el que este país cayera en manos de un gobierno islamista radical. El preciado combustible para nuestras economías podía ser cortado a la manera que lo fue en 1975, consiguiendo los islamistas una baza demasiado importante como para no pensar una respuesta de gran calibre. Tal vez la respuesta pensada fue la eliminación del régimen iraquí y la creación de un estado democrático árabe tan importante como Irak, con una moderna industria petrolífera amiga de los Estados Unidos y deudora de su libertad. Eso, más la posible instalación de bases americanas en Irak para garantizar una ventaja que sólo les puede dar su flota y las bases americanas en Arabia Saudí, pudieron ser las ventajas de una decisión tan discutida y arriesgada.

La tercera hipótesis que es propia (aunque la situación de Arabia Saudí hace que la segunda no la descarte y la vea muy posible junto que esta tercera) se basa en lo ocurrido en Afganistán con los yihadistas y en lo que se ha convertido Al Qaeda desde el 11S. Era claro que tras el ataque al régimen talibán, Al Qaeda y las organizaciones afines a la misma, estaban ya en la tercera fase descrita (ataque - represión del ataque - Solidaridad con los reprimidos que son los terroristas, por aquellos que odian Occidente), es decir, estaban recibiendo ayuda y cuantiosos refuerzos de todas las organizaciones más radicales islamistas del mundo y voluntarios deseosos de inmolarse en nombre del Islam. Se estaba convirtiendo en una gigantesca organización terrorista capaz de llevar campañas masivas y continuadas de atentados en todo el mundo, de hecho lo ha demostrado sobradamente (Bali, Estambul, Arabia Saudí...) lo que estaba claro era que Al Qaeda estaba formando millares de terroristas dispuestos a matar estadounidenses o cualesquiera otros aliados de la potencia americana. Habían nacido de nuevo los “yihadistas” pero esta vez lo hacían de manera espontánea, en gran número y con un claro propósito fanático de convertirse en terroristas en nombre del Islam. Ante este aluvión de futuros ben Laden, Estados Unidos sabía que tenía que buscarles un campo de batalla al que acudieran para que su poder destructivo no se dirigiera contra los intereses americanos y occidentales desperdigados por el mundo, no podía permitir que estas legiones de nuevos “yihadistas” intentasen entrar en Estados Unidos o atacasen a sus aliados en la zona (Arabia Saudí, Egipto, Jordania...) hasta desestabilizarles y que todo el puzle se viniese abajo con Israel y el petróleo de fondo. El cebo y lugar de batalla al que atraer a estas huestes de terroristas podría estar siendo Irak.

De hecho hay muchas pruebas que así lo indican. Los propios iraquíes en muchos de sus comunicados dicen que están siendo masacrados por milicianos “extranjeros”, la nueva policía iraquí que sufre atentados semanales en todas las ciudades sabe que son comandos venidos de fuera, la resistencia pro Sadam prácticamente a desaparecido o se centra en emboscadas contra los soldados americanos, el jefe de Al Qaeda en Irak es un jordano, y los propios servicios de inteligencia hablan de cientos de terroristas llegados de todas las partes del Islam. Podría confirmarse así, que la invasión de Irak decretada por Bush buscaba con el posterior periodo de ocupación, el que Al Qaeda fijará en ese país su fuerza más importante, muy lejos de N.York o de las sedes de sus empresas, o de los gobiernos amigos en la zona. Se trataría de atraer y destruir al mayor número de islamistas radicales que en otros lugares más sensibles provocarían mayor daño. Este es un plan excesivamente maquiavélico lo reconozco, pero no más que el plan ideado en esa misma zona llamado Irán-Contra, donde se pretendía vender armas y recambios al régimen enemigo de Irán, para salvar rehenes americanos y con el dinero obtenido alimentar y armar a la contra al sur y norte de Nicaragua sin pedir dinero al congreso americano. Ambos planes son posibles en la CIA, o los consejeros presidenciales de Bush, está claro que no por el tipo de creatividad que exige, aunque se debe ser al menos valiente en arriesgar el cargo para aprobar planes semejantes. Si al final Irak se convierte en una lucha mortal entre miembros de Al Qaeda y las fuerzas de Estados Unidos, como de hecho se está convirtiendo cada día que pasa, sería la confirmación a esta tercera hipótesis.

Hay un elemento tercer elemento no buscado añadido a este proceso, y es como Al Qaeda ha decidido presionar a los gobiernos que han decidido apoyar a los Estados Unidos en su lucha. El secuestro y posterior decapitación de los secuestrados (tras la oportuna petición imposible) sería una manera de los terroristas de llevar el terror a cada una de las poblaciones implicadas, para extender su poder basado en el miedo, y al mismo tiempo al mostrar estas imágenes, los servicios de propaganda y guerra psicológica del Pentágono estarían consiguiendo la generación de odio suficiente contra los radicales islámicos como para conseguir futuras colaboraciones sin escrúpulos. El ámbito de la guerra psicológica es un ámbito complejo y difícil de limitar, los terroristas lo utilizan en sus acciones, y Al Qaeda parece la maestra en estos momentos en su utilización a gran escala, lo que sí se sabe es que tiene unas repercusiones a veces muy diferentes a las pretendidas y que las contra medidas a veces son peores o más eficaces. Los bombardeos americanos de las poblaciones civiles de Alemania durante la Segunda Guerra Mundial, además de pretender el mayor horror conocido en víctimas y tormentas de fuego por las bombas incendiarias, buscaban quebrar la moral del pueblo alemán, la respuesta fue que esa moral se hizo más firme en su resistencia y cerró filas entorno a la propaganda del régimen nazi.

Sea como fuere, lo que está ocurriendo en Irak está alimentando el odio entre los bandos enfrentados hasta proporciones no vistas hasta la fecha, los islamistas radicales y fundamentalistas han formado un bando enemigo de los Estados Unidos sin ninguna piedad, y éstos y sus aliados han formado el otro bando y van a seguir la lucha hasta el final, tanto si Bush pierde o gana las elecciones, la política norteamericana internacional de los Estados Unidos tendrá un claro enemigo, este lo corrobora el partido demócrata y los propios norteamericanos, caído el bloque comunista ha nacido otro bloque de terror al que Estados Unidos va a supeditar todas sus futuras y presentes alianzas, su política intervencionista y sus ayudas económicas, ha nacido con carta de naturaleza “el enemigo” de occidente encarnado en el islamismo fundamentalista, y a su vez este enemigo corresponde con sus acciones a este nombramiento por parte de las organizaciones militares occidentales, como la OTAN. Añado que este enemigo ya lo era hace mucho como queda demostrado con el devenir histórico de los primeros capítulos de este libro, pero desde la guerra de Irak ha crecido y se ha hecho más fuerte y con mayores razones para su odio.

Porque existe otro aspecto terrible en esta Guerra de Irak que se desarrolla en estos momentos de la actualidad, son las famosas fotos y videos de la ignominia, donde prisioneros iraquíes son torturados por soldados americanos. Es una tortura física y psicológica detestable a simple vista, y hay que recordar que todo prisionero tiene derecho a los 21 puntos de la convención de Ginebra sobre prisioneros militares, y que saltarse uno de estos puntos ya es delito y como delito debe ser juzgado en el acto. Lo que se ha visto en esas fotos y videos, es mucho más que reírse del convenio, es pura maldad hacía los seres humanos encerrados en una cárcel, algo que debería repugnar a todas las personas de bien y provocar la búsqueda inmediata de los culpables. El presidente Bush parece haberse dado cuenta de las aterradoras consecuencias en el mundo árabe de esas imágenes, porque inmediatamente concedió entrevistas a las televisiones árabes para reprobar semejantes actos y decir el asco que le producían esa prácticas, de las que dice no estar informado en ningún momento. Se trata de verdaderas bombas para sembrar el odio durante años cada una de esas fotografías que circulan por Internet y se han publicado, un cheque en blanco para que Al Qaeda consiga voluntarios a cientos y se inmolen felices matando occidentales, una coartada para los radicales para extender su poder político entre las sociedades árabes diciendo: “veis como son, veis sus valores democráticos donde quedan, veis que nosotros los islamistas teníamos razón en atacar a los que sois sus aliados”, este escándalo es la mayor derrota provocada así mismo por el poder norteamericano y sus consecuencias tan funestas que los propios expertos parecen haberse asustado de lo que puede venir en el futuro, porque el discurso radical de los terroristas puede ser ahora: ¿Si a unos pobres prisioneros, les hacen esto en la cárcel los americanos, que tenemos nosotros que hacer con ellos y sus aliados por haber invadido la sagrada tierra del Islam, sabiendo ahora de qué clase están hechos estos infieles? ¿Qué horrores seremos capaces de inventar para vengarnos o para demostrarles nuestra ira? Las decapitaciones públicas pueden ser un escalón premeditado en esta escalada de odio.

Queda claro que Bush llevó a cabo una estrategia que agitó el avispero islamista, más allá de lo que tal vez esperaba ben Laden que lo harían los norteamericanos. Es posible que contasen con una guerra en Afganistán larga y de baja intensidad donde nuevos yihadistas se apuntasen a las filas de Al Qaeda, pero Irak que no estaba en los planes de esta organización, puede estar removiendo todas las fuerzas brutas del islamismo radicalizado a favor de una yihad extendida a todo el mundo sin excepción. Bush habría puesto en marcha en su probable torpeza a unos enemigos que pueden extender el terror a todo el mundo árabe primero y luego a todo el mundo occidental, donde esta incluida España. Y lo que ocurra en esta lucha no queda aún claro pero lo que se sufrirá en ella si que está clarísimo.

Este hecho referido de las fotografías hubiera sido suficiente para que España hubiera pedido explicación a su aliado, y en el caso de haber sido explicaciones como las oídas, haber abandonado Irak escalonadamente, porque se trata de un hecho que afecta a la misma manera de ver el mundo y de distinguir entre la integridad y la fuerza moral por un lado y la barbarie y el terror por otro. El propio partido popular si hubiera ganado las elecciones de marzo debería haber dicho que un gobierno suyo con tropas en Irak, habría tomado la decisión de irse de ese país ante el horror y tortura que muestran esas fotografías contra iraquíes. Sean o no culpables los que las sufren, es motivo suficiente para cortar nuestra colaboración militar en Irak, porque afecta a como deben ser las cosas entre dos aliados y no se basaría dicha decisión en una presión por parte del terrorismo a un gobierno democrático. El que se sepa muy bien que entre ben Laden y Bush hay un abismo, y que el segundo es un osado gobernante pero democráticamente elegido en un país de libertades, que puede ser depuesto o prorrogado sólo por 4 años más por su pueblo, y el primero es un terrorista inteligente que no reparará en inventar terror y horror para conseguir sus fines de hegemonía a la manera que Hitler perseguía sus fines también hegemónicos, no debe en ningún caso permitir que no nos opongamos a lo que son evidentes torturas. Churchill y los americanos eran los buenos de la Segunda Guerra Mundial, pero eso no quita para que el bombardeo de Dresde fuese uno de los mayores crímenes contra la población civil cometidos bajo mando de americanos y británicos, las fuerzas que bombardearon esa ciudad también lo hicieron siguiendo órdenes de militares dirigidos por políticos democráticamente elegidos. No vale todo, entre otras razones porque una estrategia donde todo vale no lleva a ningún lugar controlado, más bien lleva al peor de los escenarios donde una de las partes puede volverse loca y buscar la total destrucción del propio sistema en el que vive o defiende, como de hecho fue la decisión de Alemania cuando decidió inmolarse entera en el Búnker de Hitler hasta la última casa y el último reducto de Berlín.

La guerra en Irak parece estar en una fase de tres y cinco atentados de media en diversas partes del país, si están formándose más docenas de yihadistas en su interior o si estos están muriendo sin reposición de nuevos terroristas no se sabe con precisión. Aunque los informes de los servicios secretos que se filtran a la prensa hablan de una Al Qaeda que ha crecido rápidamente en los últimos años en todo el mundo. Y un gran problema se abre del mismo tipo que se abrió cuando la expulsión de los soviéticos se llevó a cabo en Afganistán. ¿Qué ocurrirá si se consigue la paz en Irak y muchos de los “Árabes extranjeros” llegados para luchar contra los norteamericanos, vuelven a sus países de origen después de haberse entrenado y formado en el terrorismo más peligroso? ¿Volverá a producirse otra oleada de islamismo desatado en los países de la zona? La experiencia más cercana nos dice que serán así como se desarrollen las cosas.

El presidente Bush no es precisamente un hombre dechado de virtudes diplomáticas, ni tiene una nota alta como amante de la paz a corto plazo. Pero en los tiempos que corren, los del nacimiento de Al Qaeda como gran ejército terrorista a partir del 11-S, no son presidentes débiles lo que se necesita para proteger las vidas de los pueblos. No tienen mucho sentido en esta guerra ya declarada con el ataque a los Estados Unidos el 11 de septiembre perpetrado por Al Qaeda, mandatarios que vivan haciendo cesiones y retirándose allí donde lo sugieran los terroristas en la política de “a ver si se olvidan de mí y son otros los que son atacados”. Nos guste o no, Churchill por seguir con el ejemplo, era un pájaro de mal agüero; en la oposición decía lo que no se quería oír, a las claras dijo que habría conflicto, que había que rearmar el país, y que se intuía un largo camino de sufrimiento en el horizonte, pero que esto debía ser así para conquistar la libertad frente a una organización tan fanática como el partido nazi. Bush, a pesar de sus deficiencias es el presidente que se atrevió a hacer frente al ataque del 11-S, probablemente hizo lo único que podía hacer la potencia mundial humillada, pero su resolución convenció a todos los que dudaban entre Al Qaeda (y una alianza encubierta contra los Estados Unidos) y comenzar una política de erradicación de las bases de esta organización (Turquía, Pakistán, Marruecos...) dentro de un camino para ser más libres, el único nos guste o no, y pasa por luchar, ya que el islamismo fundamentalista o radical no piensa regalar la paz por nuestras buenas palabras.

La decisión del presidente Zapatero de retirarse de Irak es completamente legítima, y no invalida todas las estrategias que el ejecutivo decida forjar en el futuro con Estados Unidos frente al terrorismo, ya que este país se dará cuenta que cuantos más aliados tenga será mucho mejor que crearse enemigos, además nuestra diplomacia sabe trabajar en contextos desfavorables y supongo que los platos rotos con la administración Bush se intentarán arreglar sobre todo si sale ganadora de sus elecciones presidenciales, y si es Kerry el nuevo presidente se intentará hacer un gesto más generoso para conseguir el acercamiento con en el nuevo inquilino de la Casa Blanca, que es un reconocido pragmático.

El problema para Zapatero es que empieza a parecerse mucho a Gerhard Schroeder, el cual ganó contra todo pronóstico unas elecciones por un hecho fortuito, durante la campaña electoral se produjeron las peores inundaciones que se recordaban en Centroeuropa, el político alemán se puso unas botas de agua y se metió en el barro a estrechar manos y dar ánimos con las cámaras de televisión detrás. El otro candidato conservador se lamentó de las inundaciones pero no hizo gestos populistas a la galería perdiendo sus puntos de ventaja de manera meteórica y ganando el actual canciller las elecciones. Desde entonces, Gerhard Schroeder ha hundido Alemania en el desastre económico, se ha abrazado a la izquierda radical y al discurso anti americano, y ha perdido todas y cada una de las elecciones producidas desde entonces, hablándose en la actualidad de una ventaja de los populares alemanes de entre 10%-15% frente al SPD. Su política de alejamiento de los Estados Unidos ha tenido unos efectos secundarios muy malos para la sociedad alemana, y ha dejado en la imagen del pueblo alemán la percepción de que el día que votaron por Gerhard Schroeder lo hicieron guiados en exceso por los sentimientos contradictorios y no por la idea de un buen gobierno que ahora echan de menos. En estos momentos es un cadáver político frente a sus adversarios y dentro del SPD, ni siquiera la oposición puede tragar todos los votos que va dejando por el camino desde su centro e izquierda. Si Zapatero recorre ese camino, el PP puede recibir si sabe hacerlo (Rajoy - Gallardón) el mejor de los regalos para ampliar definitivamente su base de votantes desde el centro político.

La decisión de retirarse de Irak también ha traído algunos efectos añadidos no calculados en un principio (o calculados pero no hasta sus últimas consecuencias) como por ejemplo, el hecho de que la intervención en Afganistán de la ONU y la OTAN siga abierta y España tras su espantada necesite dar un ejemplo sobre los demás. Nos coloca en un escenario que de momento no nos parece arriesgado pero que lo será muy probablemente si como se intuye fuera de Kabul existe una resistencia importante por parte de los grupos ligados directamente a Al Qaeda. El ministro Bono tiene razón al decir que debemos involucrarnos en lo que sucede en Afganistán y no permanecer con la cabeza escondida, pero va a necesitar toda la ayuda posible y consenso con el partido popular para los dos grandes problemas que aparecerán posiblemente. Antes, ha hecho todo lo contrario dinamitando las buenas relaciones con el PP sin saber que prepara su futura tumba política. El ministro lleva haciendo viajes con las pobre víctimas del YAK - 42 acompañado de una nube de periodistas que no dejan de producir vergüenza en muchas personas que ya en su día lo sentimos cuando el anterior ministro no decidió irse de su cargo y encontrar hasta el último de los responsables, es miseria añadida a la anterior miseria del anterior ministro que no trato con dignidad a los familiares (si hubiera admitido la culpa desde el principio, no hubiera sido después tan difícil para los familiares, ni se hubiera hecho probablemente los reconocimientos con la prisa que se hicieron) Después Bono, lleva en varios telediarios este asunto a primera página, porque sabe que fue algo muy mal gestionado por el anterior gobierno y por tanto provoca un daño a la imagen del partido de este, ya se encarga el secretario de organización de hacerle el coro sobre este asunto, aunque es evidente que la partitura la han escrito ambos, y en ella las víctimas poco importan, más bien bastantes personas empiezan a ver obsceno el gusto del ministro de defensa por pasear cadáveres que en su día no desearon más que dar lo mejor de sí mimos por su uniforme y por su nación.

No sabemos hasta donde quiere llegar con este regodeo en la tragedia de unas personas a las que se deben facilitar todas las ayudas respetando todo lo posible su imagen e intimidad, tal vez reciba entonces una medalla que se le resiste, más brillante que la anterior y con una banda más ancha, aunque es posible que cuando llegue a casa algún familiar suyo, con mayor juicio que él indudablemente - los hijos saben bajar a los padres de sus nubes a veces de manera muy saludable - le salve de aceptarla diciéndole el correspondiente comentario crítico. Lo que es seguro es que la mayoría del gobierno volverá a votar por dársela para hundirle un poco en su popularidad (que nadie duda que tiene el bueno de Bono) Lo que el ministro debe saber, mientras sea ministro, cuando apruebe el envío de más fuerzas a Afganistán, es que en el país pueden ocurrir muchas cosas, incluso que se derriben aviones por parte de los terroristas si tienen oportunidad de hacerlo y van llenos de soldados españoles o de la OTAN. Tiene que darse cuenta que si se regodea en exceso en una herida, se puede abrasar vivo si tenemos la maldita mala suerte de que nos capturen una patrulla o secuestren rehenes españoles los comandos de Al Qaeda en Afganistán. Ya sabemos lo que hacen en el 90% de los casos con los rehenes estos sujetos. Las montañas de ese país son un bastión desde hace siglos, tanto que hasta ahora los Estados Unidos no han empleado fuerzas de tierra en inspeccionarlas a conciencia, y el ejército paquistaní lo hace obligado en su frontera en contadas ocasiones. Bono debe decir en la cuestión del YAK - 42, que se hizo mal, y los demás reconocer que se hizo mal, y lo que pueda repararse repararlo sin darse publicidad ni poniéndose medallas (en sentido figurado) No se puede reprender a los militares cargándose la cúpula militar, cuando cumplían órdenes, y meterse en Afganistán esperando después la necesaria colaboración que va a necesitar el ministro de parte de los militares.

La entrega del poder - sobre todo civil- realizada al gobierno interino de Irak, puede marcar una esperanza para la burguesía piadosa, las clases medias y los iraquíes cansados de tantas guerras, ya que este gobierno puede empezar el camino para conseguir una nación próspera y en paz en Oriente Medio, eso sería el mejor legado después de la dictadura de Sadam tras una guerra tan impopular.






















11 de marzo del 2004


La mañana de 11 de marzo cuando salía a trabajar, radio nacional cortaba el boletín habitual de noticias para anunciar una información poco clara, y que aproximadamente reproduzco aquí: “ nos dicen informaciones del Samur, que se han producido explosiones en un tren de cercanías, cerca de un túnel, hay por lo menos 4 muertos confirmados, pero se ven muchos cuerpos tumbados en el suelo y heridos”, cuando llegué al trabajo aquella mañana seguí las noticias en la Cadena Ser, el goteo de víctimas aumentaba por docenas entre el espanto de todo el mundo. Antes de que nadie dijera nada todo el mundo habló de ETA, un amigo y yo comentamos por teléfono ese mismo día que a pesar de que las fechas y los planes coincidían con maneras de operar de ETA, era muy probable que semejante atrocidad perteneciera a una escala superior de horror en el ámbito terrorista. Se trataba de una acción con una espectacularidad propia del sello Al Qaeda, pero es cierto que existían muchas dudas, las principales el hecho de que una célula terrorista hubiera conseguido tal cantidad de explosivos dentro de España sin contar con la infraestructura de ETA (algo que por otra parte sigue dando vueltas hoy en día) A lo largo del día nos sumergimos en el horror, y comenzó poco a poco pero constantemente a transformarse el peor atentado de nuestra historia en la eterna lucha de las dos Españas, que no dudo la que se veía en desventaja en olvidar el dolor para recortar la ventaja de la otra. Aquello ya fue un gran debate en los medios más afines al Psoe, por afirmar la autoría del terrorismo islámico y ver con ello una unión entre la implicación de Aznar en el envío de tropas a Irak y el ataque de los islamistas a Madrid. Y por otro lado el gobierno se enrocó al principio en una sola hipótesis con Eta como autora. Hay que decir que al anochecer de ese mismo día, Acebes salió del enroque y habló de la famosa cinta con versos del Corán (imagino que la ideología religiosa de la grabación será wahabita - salafista) y de la camioneta. Con esto se entendía que el terrorismo islámico había hecho aparición en España de una manera brutal, sólo le falto (aunque nos había dado la información más importante) pedir perdón por haberse cegado por la primera hipótesis, como muchos, pero estaba claro que como el Psoe estaba lanzando a sus huestes mediáticas en busca de culpables (cuando los culpables sólo fueron los autores) que no se iba a atrever a darles un poco la razón, no fuera que le dijeran después que el fue quien produjo el desastre que se produjo en su partido el día de las elecciones. Pero lo que sí queda claro es que ese día yo, y muchos, nos acostamos sabiendo por boca del gobierno que el terrorismo islámico había empezado actuar de manera brutal en España.
Antes de analizar las posteriores implicaciones en toda nuestra futura política de gobierno, hay cabos sueltos principales que no cuadran a simple vista en lo que ocurrió ese día. Antes diré que circulan dos informaciones que me ponen la carne de gallina sobre lo que son capaces de hacer los gobernantes de nuestro país por conseguir la Moncloa: la primera información dice que los servicios antiterroristas del Estado, esperaban dar para el día de reflexión un golpe brutal a Eta, eliminando de un plumazo los más importantes de sus comandos, incluyendo toda la infraestructura para construir los componentes electrónicos de las bombas. La eficacia demostrada por el PP en su lucha contra Eta se había reconocido por toda la sociedad española, y el Psoe también era consciente de ello, pero se buscaba un regalo de despedida para Aznar en el momento más necesario para lograr la mayoría absoluta de su sucesor. Algo horrible ya que la lucha contra el terrorismo debe estar fuera de cualquier lucha política interna de las democracias, no sé si lo sabía Aznar, pero debía darse cuenta que semejante maquiavelismo sólo conduce a malos futuros. La otra información es todavía peor, y habla de que en determinado restaurante o lugar (los periódicos no citan donde) importantes y conocidos dirigentes del Psoe brindaron con champán cuando se fue confirmando la autoría islámica. Esto simplemente no tiene nombre, mejor dicho, lo tiene y es que deberíamos saber los nombres de los que encontraron alegría sobre 193 cadáveres para decirles que se retiren de la política y no vuelvan a mentirnos nunca más. Me temo por ellos que alguna vez lo sabremos, porque existe otra información que dice que el señor Zapatero realizó más de diez llamadas desde su móvil personal a diversos medios y personas influyentes diciendo que había varios kamikazes en los trenes. Bochornoso y que deja a la altura del betún a nuestro actual presidente, que tendrá suerte si una comisión de investigación en el congreso no le saca los colores por este hecho y otros hechos posibles aún peores, aunque por estas informaciones como por otras peores que desconocemos o se filtran en Internet, ninguno de los dos partidos tiene claro hasta donde podrían llenar de mierda al otro sin desacreditarse ambos.

Hay dos cuestiones (hay muchas, las suficientes para hacer toda una colección de libros pero las más claras para mí éstas) que si parecen oscuras en lo que ocurrió el 11 de marzo. Una es el tipo de explosivo; en un principio se dijo que era Titadine, después supieron que era Goma 2 Eco, fabricada en España y guardada en una mina Asturiana. Este hecho es trascendental e increíble, muchos guardias civiles por ejemplo saben que no se necesita nada más que oler el lugar de los hechos para distinguir el Titadine o la Goma 2, es algo como saber si huele a Azufre o a Amoniaco, no deja lugar a dudas, por eso no entienden que pudiera alguien confundirse de manera tan “flagrante” al comunicar de viva voz y no por escrito el tipo de explosivo utilizado. Mucho más sospecho cuando se supo que no se dejo a los servicios de la Guardia Civil acceder a la investigación de los explosivos desde un principio ante la posible falta de medios. Sólo cuando se encuentra la famosa mochila intacta y un valiente (que no ha recibido medalla alguna) decide desactivarla bajo su riesgo, se confirma el tipo de explosivo y comienza a caer toda la célula terrorista islamista radicada en Madrid y alrededores. Es algo que da tantas cosas que pensar, que la más ligera sospecha de que miembros del ministerio del interior quisiesen favorecer a la oposición socialista creando la confusión desde el principio en el ministro del interior y el gobierno en funciones, nos debe hacer pensar que ocurrirá cuando las cosas de verdad se nos compliquen en el futuro como es posible. Y también da que pensar toda la miseria que se oculta en el actual partido en el poder que no dudo en utilizar lo peor de lo peor para sus fines, en manos de quién hemos puesto el poder sería lo que ahora puede pensar mucha gente.

La otra cuestión que me llama la atención en lo relacionado con el atentado del 11 -M, es como es posible que medios como EL País, la Cadena Ser, Canal+ y otros propiedad del señor Polanco cercano al Psoe tuvieran una información tan fidedigna de lo que ocurría en el interior de una investigación que se supone secreta. No dudo de la profesionalidad de casi todos los periodistas de estos medios, el periódico aludido me parece uno de los de mayor calidad en sus investigaciones sobre muchos temas, y bastantes reportajes en esos medios son de extraordinaria calidad, pero su deriva socialista es tan clara, conocida y practicada que a nadie engañan cuando emiten opiniones con juicios absolutamente parciales. ¿Quiénes informaban a esos medios y por tanto al Psoe? ¿Los mismos que confundían al gobierno? ¿Existían espías más interesados en dar un vuelco el día de las elecciones más que en coger a los terroristas? ¿Rubalcaba jugó en todo momento con ventaja, porque diseñó una estrategia junto con sus medios afines e informadores para quitarle toda la ventaja al partido popular tras 8 años de buen gobierno? ¿Es que la corrupción empezó de nuevo incluso antes de que el Psoe volviese a tomar el poder en la Moncloa, porque ya había favores que pagar llegados al poder, debido a lo que se hizo aquellos días en medios de comunicación partidistas y elementos afines en la seguridad del estado? ¿Cuándo se privatice televisión española sabremos una parte de los pagos? ¿O habrá que seguir la pista a los fondos reservados de nuevo? Son tantas preguntas las que se ocultan tras esos hechos tan oscuros que esto sólo ha empezado, es como si el 11 de marzo una gran partida de ajedrez se hubiera puesto en marcha y sólo estuviéramos en el primer movimiento del peón. Y los dos grandes partidos se hubieran impuesto a toda costa acabar la partida en tablas para no hacerse excesivo daño, ya que si uno de ellos persiguiera ganar al otro definitivamente, no tendrían muy claro quien gana a quien como de hecho tiene la sensación el Psoe después de las elecciones europeas (25 escaños del Psoe frente a 24 escaños del PP) Pero esa sensación va a secar muchas más gargantas conforme pasen los meses y las investigaciones oficiales o extraoficiales se produzcan en el tiempo. Las víctimas del 11-M que en un primer momento, y en su comprensible rabia, algunas echaron la culpa a Aznar por lo que ocurrió, pueden volverse hacía el actual gobierno buscando mucho más que explicaciones, pensando que en esos días había alguna mano negra que se alegró de lo que paso para beneficiarse de un posterior resultado, algo aterrador desde cualquier punto de vista, y sobre todo una pesadilla en el actual gobierno que puede ver como se le revuelve este hecho como si se tratase de una gran guadaña en busca de sus cabezas. No estamos hablando de los culpables que se immolaron o están en la cárcel, o en Italia preso, o muy lejos después de dar las órdenes, estamos hablando de beneficiarios que utilizaron este hecho para sacar ventajas electorales, muy peligroso que algún día las víctimas se levantasen para acusar.

En este sentido, es muy sintomático que el cerebro del atentado (confesado por él en conversaciones telefónicas con otros activistas) el llamado “egipcio”, haya dicho que preparó este atentado 2 años y medio antes de llevarlo a cabo, nada tenía que ver con Irak y su guerra y que al mismo tiempo preparaba atentados espectaculares en Bruselas y el metro de París. ¿Qué tenía que ver entonces Aznar, nuestra política en Irak, los que votaron guiados por consignas contra el PP, el resultado de las elecciones, con lo que creían que pasó el 11M? ¿Qué tenía que ver el 11M con el 14M? El gobierno tiene que darse cuenta que los cientos de miles de personas que salieron a votar (y no pensaban hacerlo) contra el gobierno de Aznar motivados por los acontecimientos, si se repiten los hechos pueden volver a salir a votar otra vez, contra el gobierno.

En cambio si existe una conexión más clara y cada vez más angustiosa entre los atentados de Casablanca en Marruecos y el 11M en España. Los integristas islámicos que prepararon los dos atentados a parte de ser casi todos marroquíes ponían el dedo acusador en ambos casos sobre la misma cuestión: occidentalización de los gobiernos atacados y aliados de los Estados Unidos. Marruecos con algunas de sus reformas más importantes en marcha y estrechando cada vez más su alianza con Estados Unidos está a punto de entrar en la lista de estados impíos de Al Qaeda. Esto provocará la activación de más células terroristas en Marruecos y al mismo tiempo, la llegada o activación en España de nuevas células terroristas (siendo muy posible que ya existan) dispuestas a golpear Marruecos, o hacerlo en España si apoyamos las reformas “occidentales y laicas” de nuestro vecino.

El 11M nos ha dado este terrible legado para el futuro: si apoyamos la democratización y las reformas emprendidas por Mohamed VI, es muy posible que los islamistas de Marruecos nos vean como impulsores de un estado occidentalizado o no islamista en un país del Islam. El paso no realizado es declarar a la monarquía de Rabat traidora al Islam como se hizo con la monarquía saudí, y cuando esto ocurra es muy posible que los planes para producir más horror comiencen a ir deprisa, en Marruecos y en España.

Otro legado del 11M es que la gran cantidad de musulmanes que viven en España ya no podrán ser vistos como una masa de inmigrantes normales. Al igual que ocurre en Francia, los musulmanes venidos a España se han convertido en una matriz, donde puede esconderse el islamismo, las células de Al Qaeda o los futuros integrantes de movimientos armados integristas. Los partidos políticos españoles deben darse cuenta, igual pasó en Francia en 1995, que los islamistas que conviven con musulmanes honrados en España, pueden a parte de intentar desestabilizar sus países de origen porque les consideran impíos, atentar contra el país que les acoge como de hecho ya hicieron en España sin ningún escrúpulo. Tienen que darse cuenta los políticos que sólo los servicios de inteligencia, la vigilancia, las posibles expulsiones masivas o particulares de sospechosos y el fin de cualquier política de papeles para todos, puede darnos tranquilidad y evitarnos otro 11M.

El hecho de que el 11M se utilizase para dar un vuelco político y ahora se utilice para arrojarse toneladas de miseria encima del contrario, hacen muy difícil encontrar la concordia y el acuerdo sobre estos aspectos. El actual gobierno ganó las elecciones, y cuales fueron las causas para ganarlas no tienen que poner en duda legitimidad alguna, es como si todos decidimos votar echando una moneda al aire minutos antes de acercarnos a las urnas y saliese un partido ganador basado en la suerte. Sería legítimo porque el voto que el ciudadano decide otorgar a un partido, vale lo mismo que cualquier otro, tanto si ha sido muy reflexionado o fruto de una decisión visceral del corazón. Lo que sí debe pensar la sociedad española con calma y sin insultarse uno y otro lado es: ¿ Por qué preguntó uno de los terroristas del 11M quién había ganado las elecciones, y por qué le importaba tanto? Debe reflexionar sobre cuanta manipulación pudo existir para coincidir y no discernir en lo que buscaba la red terrorista Al Qaeda como resultado electoral, si podemos asumir esa coincidencia hecho el análisis, si no había otra salida que asumir la coincidencia o tenemos que preocuparnos mucho por nuestro futuro al coincidir con semejantes objetivos perversos. No se está culpando ahora a ningún partido por hacer el trabajo del terror (Zapatero es nuestro presidente y el Psoe el partido que ganó las elecciones) se está diciendo únicamente que reflexionar sobre votar con rabia y visceralidad puede provocar monstruos no apetecidos en el futuro a parte de ver más contentos a unos con el resultado, y a quien hace más débil, conforme se desarrollen otros acontecimientos en un mundo cada vez más global.

PROFECIAS (CONCLUSIONES)

Estados Unidos ha invitado formalmente a Marruecos para ser incluido en la OTAN, España parece que puede apoyar esa incorporación de Marruecos y convertirnos así en aliados de facto, y valedores de su política de occidentalizarse rápidamente. Como lo son Turquía y Grecia por citar un ejemplo no exacto. Esta medida denota que Estados Unidos y Marruecos están dispuestos a ir muy lejos en su alianza militar y exterior. También abre para España una serie de peligros que pueden hacernos revivir los dramáticos momentos del 11M.

Marruecos con este movimiento estaría iniciando de verdad sus reformas políticas más arriesgadas para occidentalizar el país, esto enseguida será percibido por los islamistas - los cuales siguen creciendo en Marruecos - que pueden optar por una política de total enfrentamiento directo contra un estado al que considerarían impío. Y cualquier país que los apoye, como sería el caso de España, sería percibido como un apoyo a ese futuro estado menos islámico, lo cual sería castigado por medio de grandes atentados. Si España apoya (y debe apoyarlo sin lugar a dudas) las futuras reformas más profundas para democratizar y modernizar Marruecos se pondrá en el objetivo de futuras células islamistas-salafistas con sede en Marruecos o venidas a España, y otros 11M podrían empezar a ser preparados.

Tenemos que recordar en este sentido el atentado en Marrakesh del 24 de agosto de 1994, donde varios turistas españoles murieron. Los asesinos eran hijos de inmigrantes argelinos y marroquíes residentes en Francia. Por primera vez se ponía luz a una red transnacional islamista que entrenaba jóvenes de los extrarradio en Europa para castigar a los europeos. En esta ocasión se decidió matar españoles, pero después se desató la campaña de atentados del islamismo radical argelino en París. Lo importante es entender que los objetivos ahora variarán en función de a quien se le acuse de apoyar a un estado impío por los islamistas llegado el momento. Si Marruecos se postula como futuro integrante de la OTAN y amigo de los Estados Unidos puede revivirse el proceso de ese atentado si se nos ve, como uno de los apoyos de Marruecos en Occidente. En aquel año de 1994 fue el Movimiento de la Juventud Islámica de Marruecos (MJIM) el que ejecutó a nuestros compatriotas, en el futuro serán organizaciones cercanas a Al Qaeda, y el motivo que desencadenase otro hecho terrible sería por ejemplo: El envío masivo de tropas marroquíes a Irak para sellar la alianza entre Rabat y Washington en el ámbito mundial.

Actualmente Marruecos no podría pasar el examen de los derechos humanos en sus cárceles y comisarias. Tampoco queda clara la limpieza en muchos de sus procesos de gobierno. Pero lo que también debe preocuparnos es que el gobierno de Marruecos puede buscar una salida exterior a la presión que pueda ejercer el aumento considerable del islamismo en sus capas sociales. Podría buscar una solución rápida y de orgullo nacional en la situación actual del Sahara, poniendo a España ante la disyuntiva de apoyar a Marruecos y traicionar a Argelia y a los campos de refugiados de Tinduf. También en esa salida exterior, Marruecos podría buscar torcernos el brazo en el tema del Sahara, con otro ataque a nuestro territorio de mayor proporción que el efectuado en Perejil, con los problemas ahora añadidos como que Rabat tiene un claro aliado en Estados Unidos, ya que Zapatero nos ha alejado del aliado americano de una manera chapucera en sus formas, y el problema de tener un gobierno sin clara mayoría y sobre todo sin clara idea de lo que es la unidad de España, y si todos los partidos que apoyan al Psoe le apoyarían en una crisis de este calibre con nuestro atrevido vecino. Estas circunstancias serían letales para el caso de que Marruecos decidiese elevar el órdago hasta la confrontación militar medida, sobre todo si ya poseyese armamento sofisticado facilitado por Estados Unidos.

Otro amplio frente que se nos abre de problemas con el islamismo es nuestra más que posible intervención en Afganistán (la cual debe seguir en apoyo del pueblo afgano, porque un país como España no puede arrastrarse por el miedo a tener ataques de terrorismos chantajistas) pueden darse en este caso hasta tres núcleos de problemas a sufrir: El primero de nuestros problemas puede ser el secuestro de un militar o civil allí destacado, exigiéndonos a continuación nuestra retirada del país, o la liberación de algún preso terrorista que tengamos o hagamos. Ni que decir tiene como acaban estos miserables secuestros en manos de estos grupos radicales y la tragedia que provocan en el país que los sufre. El segundo problema puede ser que tengamos que buscar y destruir células de Al Qaeda una vez nos encontremos en el país árabe desplegados y se constate que falta mucho para que esté pacificado. En estos combates, probablemente a realizar en las montañas no se puede saber cuantas bajas podemos tener entre nuestras filas, pero que entrar en combate será una escalada más hacía ponernos en el posterior disparadero terrorista de Al Qaeda queda claro para muchos tras leer este libro. La tercera fuente de problemas importantes en Afganistán, serán las posible muertes de nuestros compatriotas en operaciones hostiles o de terrorismo que lleven a cabo las células de Al Qaeda o grupos talibánes resistentes aliados a esta organización. Se tratará de golpes por sorpresa muy difíciles de prever y que posiblemente no tengan nada que ver con operaciones de limpieza que lleve a cabo la OTAN, serán atentados indiscriminados contra las bases de los soldados occidentales para conseguir que se vayan del país, sin entrar a ver si son médicos o soldados de elite.

Afganistán y Marruecos exigen entonces una clara política de acercamiento y mejora de las relaciones en materia exterior de los dos grandes partidos nacionales sobre todo. Por que pueden aparecer todos estos problemas y porque no habrá una victoria sobre el terrorismo de Al Qaeda en España, si no existe una política clara y amplía en España de consenso sobre los problemas de estos dos países y los futuros problemas derivados de ellos. Además nos exige otras políticas relacionadas con el mundo árabe como son estas dos principales:

La política de inmigración y seguridad interior de la Unión Europea debe así mismo volverse menos permisiva en los movimientos migratorios de determinados colectivos. Y los países miembros tendrán que hacer un claro esfuerzo por controlar sus flujos migratorios y el asentamiento de los mismos en cada país receptor. Al mismo tiempo en España debe conseguirse el consenso de una política de seguridad de las poblaciones inmigrantes del Magred, y la manera de controlarlas sin herir sus sentimientos religiosos.

También la política exterior europea debe pedir a Israel y los islamistas palestinos un proyecto de paz creíble sobre la mesa. Partiendo de tres puntos principales: eliminación del muro de la vergüenza, devolución de los territorios ocupados y fin del expansionismo mediante colonias de Israel. También el fin de los atentados terroristas contra Israel por parte de Palestina debe ser algo prioritario y llevado a la práctica de manera eficaz. Esto no terminará con ben Laden, pero eliminará un foco de tensión que puede estallar con terribles consecuencias en el futuro, si se une a la posibilidad de un terrorismo islamista sin límites como el de Al Qaeda

La tercera cuestión relacionada con España y el islamismo es la más antigua y para los seguidores radicales islamistas y de Al Qaeda la más querida tal vez. La pretensión de recuperar Al-Andalus figura en los escritos combativos más antiguos de la yihad, esto no se dice nunca por rellenar espacio en esos documentos, sino que es una aspiración seria por parte de los radicales. España tiene que tener muy en cuenta que si no tiene alianzas fuertes en el mundo, capaces de hacerla ver donde pueden prepararse atentados para conseguir este objetivo, puede sentirlo mucho en el futuro. El aislamiento que provoca enfrentarse a los Estados Unidos de manera solitaria puede llevarnos a apartarnos de los cuantiosos medios de información e inteligencia que posee este país.

Andalucía, región amada por todos, tiene un puesto intranquilizador en los documentos principales de los yihadistas salafistas. No puede pensarse que esta región se le protege sólo con la diplomacia, estará más protegida (a parte de la diplomacia) por medios más activos de defensa frente a posibles revindicaciones (control de fronteras más estricto, servicios de espionaje en el exterior, estudio experto de las revindicaciones y planes islamistas dentro y fuera de las fronteras, mejores recursos e incentivación para unidades como los Geos que ya han dado una vida valiente en esta lucha) No podemos pensar que no ocurre nada, porque es demasiado extravagante que puedan pedir una cosa como Al-Andalus, después de lo que ocurrió el 11S y el 11M, nada desde entonces puede sorprender y ser demasiado horrible.

Todos estos elementos intranquilizadores como vemos, siguen colocando a España en la línea del posible fuego islamista en Europa. Con esta posibilidad no vale solo combatir el terrorismo escondiendo la cabeza y esperando a que Bush pierda las elecciones. La política exterior española se mueve en demasía en clave nacional, tanto que si el eje París-Berlín se resiente por la desaparición de Gerhard Schroeder y Estados Unidos sufre un ataque terrorista, volviendo las represarías sea quien sea esta vez el presidente de la Casa Blanca, nos podemos encontrar en la peor de nuestras encrucijadas, completamente solos. No podemos desangrarnos en uno de estos riesgos: Marruecos, el Sahara, Afganistán o Al Qaeda porque hayamos tomado el camino de insultar al “yanqui” para lograr votos. Podemos pagar muy cara una política ciega antiamericana; ya estamos pagando un alto precio porque Estados Unidos haya decidido unirse aún más con Marruecos con el doble peligro que eso tiene para España, y la posibilidad de sufrir ataques islamistas o del expansionismo nacionalista marroquí.

Y si bien es cierto que Europa sigue una política dialogante y más pacífica con el mundo árabe que los Estados Unidos. Siendo imputable a la actual administración Bush un buen puñado de errores garrafales por los que debería pedir perdón o mejor rectificar sobre la marcha para no empeorar aun más el ambiente. No es menos cierto que los Estados Unidos han dado muestras sobradas en el pasado de ser una nación generosa en la búsqueda de la libertad de las naciones, y comparten con nosotros muchos más valores que Europa con el Islam por ejemplo. Siendo este año el aniversario del desembarco de Normandía, no esta demás recordar que Estados Unidos salvó a Francia de la bota del Kaiser en la Primera Guerra Mundial, en contra de su opinión pública que no deseaba meterse en las guerras de los europeos. Pero volvió a salvar a Francia y toda Europa esta vez de la bota de Hitler muriendo - por decir un hecho de miles - sólo en las primeras horas del desembarco de Normandía, 10 veces más soldados americanos que en toda la guerra de Irak hasta la fecha. Por si fuera poco, después corrió con gran parte del esfuerzo de la posguerra para salvar a Europa de la ruina e impedir con sus soldados que nos pisara la bota, esta vez de la dictadura comunista. No esta demás recordar la historia para ver que Estados Unidos aunque orgulloso es un país generoso, y ha mantenido la libertad de muchos de los países en los que ha intervenido con el precio propio de su sangre. Algo así como si España sufriese una invasión y miles de soldados franceses, movidos por el sacrificio de conservar nuestra libertad, vinieran a España a rechazar esa invasión dando su vida y luego se nos olvidara al poco tiempo el tremendo sacrificio recibido.

En estas conclusiones se ve claramente que el peligro a sufrir nuevos 11M en España y en Europa aumentan poco a poco debido a las situaciones estudiadas. Es nuestra situación en el mundo geográfica y nuestra historia la que empuja a ese peligro, pero también, y es lícito decirlo, la situación de desgobierno en nuestra actual política exterior, sin planes claros que llevar a la OTAN o la ONU sobre la lucha contra el terrorismo islámico, y aislados frente al poder que representan las alianzas de Estados Unidos para luchar contra el terrorismo. España ha quedado fuera de varios pactos internacionales contra el terrorismo una vez cambio el gobierno, y ha perdido fuerza moral y medios. Esto nos hace más débiles, lo cual es extremadamente peligroso cuando he argumentado que el islamismo tiene un alto porcentaje de volver a golpearnos en el futuro. Es casi seguro que golpeará en París, Londres o Bruselas (por las células desactivadas) para demostrar su estructura que es capaz de una respuesta de terror global, pero otras pueden estarse activando en España.

Un informe bastante aproximado a la realidad de Al Qaeda habla de que estaba compuesta a principios del 2004 por 18.000 terroristas repartidos por el mundo. La situación de atentados constantes en Irak, las fotografías de la vergüenza sobre torturas de iraquíes aparecidas (dentro de la mala política exterior norteamericana de ese país, que ha dejado de tener un horizonte posible en los últimos años, sin saberse muy bien cuales son sus objetivos) y el aumento en política del islamismo en ciertos países árabes, entre los que está incluido Marruecos, nos habla muy posiblemente de un aumento muy superior de esos 18.000 terroristas. Si esto se confirma, es casi seguro que vivamos nuevas oleadas de atentados en todo occidente y sus países aliados, una vez la infraestructura exista. El islamismo nos atacó en Madrid, y lo hizo porque tenía adeptos y consiguió infraestructura suficiente para llevarlo a cabo (Goma 2 y móviles alterados) Y cuando vuelvan a darse estos dos elementos las posibilidades de nuevos macroatentados aumentarán hasta convertirse, trágicamente, en certeza. Los adeptos al terrorismo están creciendo a buen ritmo posiblemente, así que debemos estar aún más en alerta de que consigan esa sencilla infraestructura de nuevo. España está incluida en Occidente enemigo del islamismo más radical, tampoco hay que buscarse excusas, hemos visto que son capaces de crear muchas y vaRiyadas para justificar una masacre. Sólo debemos guiarnos por los hechos, y estos nos dicen que Al Qaeda se está convirtiendo en una organización gigantesca, y cuyas ramificaciones también crecieron y lo pueden volver a hacer a ambas orillas del estrecho de Gibraltar.

Me gustaría poder decir que nunca más ocurrirá, pero sólo ha caído una célula, quedan cientos de fanáticos esperando. En Junio, todo estaba preparado por el cerebro del 11M, el egipcio, habría sido la fecha para un gran atentado en el metro de París. Habrá muchos más planes que no sabemos, ya que el funcionamiento de una red como Al Qaeda se realiza en células independientes, cuyo problema son los componentes de destrucción, ya que voluntarios en estos momentos parecen tener muchos. Por ello debemos convencernos que será una lucha larga, similar a la de Eta, con la misma psicología a la hora de asesinar y preparar planes. Es el cambio estratégico más importante que se ha dado en el movimiento radical islamista. Se ha convertido con Al Qaeda en un gran grupo terrorista, que va a entrar en las dinámicas de presión, chantaje y búsqueda de puntos débiles, al estilo de las bandas terroristas. Siendo muy diferente su manera de pensar a cualquier partido político. Mas bien será algo difícil de entender y prever. Cuando se nos vuelva a señalar como objetivo por el islamismo, por los múltiples factores que se han expuesto en este libro, lo seremos junto con Francia, Inglaterra, Italia, Bruselas o Estados Unidos, porque todos esos países somos el Occidente libre, imperfecto, pero libre en sus aspiraciones, y por ello no estaremos solos, algo muy importante cuando no queda otro remedio que defenderse.

Pero la esperanza es vida, y si he escrito este libro para que lo lean todas aquellas personas interesadas en entender a donde vamos, lo he hecho porque pienso que puede ayudar a evitar otras tragedias, y si eso es imposible o pretencioso dada la deriva que se está produciendo entre Occidente y los movimientos radicales islámicos, por lo menos que sirva para que estemos avisados y podamos mitigar lo más posible ese horror, o disolver su daño con entereza y decisión entre todos los ciudadanos, construyendo para el futuro un camino con una paz verdadera entre hombres libres.























LAS MENTIRAS DE LOS NACIONALISTAS


Este capítulo dedicado al nacionalismo, trata del segundo gran problema que debe afrontar España, y otros países de Europa (el voto constante de ultraderecha en el viejo continente también tiene un fuerte componente nacionalista) Tiene líneas de unión y fractura con el anterior problema e ideología, y lo abordo desde una perspectiva de: qué es el pensamiento nacionalista y cuales son las implicaciones en nuestro país, y como está relacionado con el otro gran problema del islamismo. Cuando me refiero a nacionalistas en nuestro país, hablo de partidos como el PNV, Esquerra Republicana o el BNG, y excluyo a partidos como CiU a la que considero un partido coalición de centro, que representa a la inteligente burguesía catalana. De hecho el pueblo catalán ha demostrado siempre principios cívicos y de educación política, por no hablar de su cosmopolitismo cultural de altura. Desde otros lugares de España nos sentimos contentos de haber tenido la suerte de tener esa ventana a Europa. Son los políticos nacionalistas los que con sus proyectos mesiánicos han destrozado mucha armonía y creado malentendidos. El pueblo sencillo de Cataluña no se levanta por las mañanas pensando en sus diferencias con otros pueblos, se levantan pensando en trabajar y conseguir que sus familias obtengan los mejores dones de la vida, igual que todo pueblo: salud, educación, cultura, trabajo, sustento decente…Lo mismo le pasa al pueblo vasco, un pueblo honesto, digno de sí mismo y lleno de gentes llanas y sinceras que han cargado con la ignominia de los proyectos manchados de sangre de algunos de sus políticos nacionalistas (muchos votantes del PNV son también personas que no hacen de su existencia una lucha por la diferencia, sino que buscarán el ser personas afables como lo son muchos vascos) y una banda asesina. Sin contar que el 50% de su población nunca ha votado otra cosa que no sea partidos no nacionalistas. Tal vez para algunos se desnude sin miramientos aquí, lo que se oculta tras el nacionalismo, pero si es duro, será para poder ser todas personas más libres de elegir y cultivar nuestras potencialidades.

Para empezar voy a hablarles de lo que es el nacionalismo, cuestión que no suele abordarse cuando se habla de él, y que es fundamentalmente su pensamiento para entender porque le criticamos algunos, recordando desde el principio que el nacionalismo español existe, existió en el pasado con mayor fuerza y que fue tan pernicioso como cualquier otro nacionalismo de hoy en día. Por qué no lo es hoy, o lo es en menor medida, también lo explico resumidamente a continuación: Mientras explico que es el nacionalismo y su pensamiento hablaré intercalando ejemplos de los nacionalismos periféricos que padecemos, de sus defectos y perversidades. Al final de esta parte pondré un ejemplo de cómo el nacionalismo pervierte los conceptos de la democracia moderna nacida de la revolución francesa como: solidaridad, fraternidad, igualdad y libertad, este ejemplo está referido al reparto del agua.

Sabernos pertenecientes a una unión superior a la formada por nuestra familia o barrio, es una aspiración sentida por todo ser humano. El primer problema se plantea en este inicio, porque la comunidad que nos contiene si tiene un sentido exagerado de misión como nación, utilizará todo tipo de propaganda (religiosa, política, victimismo…) para que, siguiendo esta aspiración, te decantes por un proyecto comunitario que tenga que ver con glorificar a una patria por unos dirigentes. El segundo problema es que para que el proyecto sea sólido se buscará lo antagónico, “a los otros”, un reverso de lo negativo que se nos ha inculcado en esa propaganda, y que reafirmará el proyecto de seres elegidos para alguna causa.


Está admitido por todos que construir fronteras, sentirse superior o completamente diferente de tus vecinos es pernicioso y casi diabólico para la convivencia. Porque defender esto crea barreras, fomenta el egoísmo social, hace ciudadanos de segunda y de primera, altera los principios de la democracia (igualdad, libertad, fraternidad, ¿recuerdan?) desprecia a los vecinos, pone la base para limitar los derechos humanos de aquellos que los nacionalistas dicen tan diferentes a su raza, región, pueblo o etnia. Inventan una historia de victimismo para que los demás vean lo diferente que en la realidad no son. Cuando las verdaderas víctimas que apenas son escuchadas, son justamente las que el nacionalismo trata como diferentes a sus creencias irracionales.

¿Todo lo dicho es pernicioso?, Es lo que hace el nacionalismo actualmente en nuestro país sin ningún arrobo, y consigue “engañar” a sus bases de incautos en primer lugar, que no esperan ya soluciones a los problemas que les deberían preocupar a los ciudadanos (paro, sanidad, tercera edad…) y prefieren al menos abrazarse a una causa sentimental de defensa del territorio y la etnia, que les reporte algún tipo de orgullo de sangre al menos. Lo que los dirigentes crean de manera artificial tiene reflejo en los canales de comunicación afines al nacionalismo, consiguiendo primero vivir plácidamente en la mentira, ya que su clientela crea un círculo vicioso de dar la razón a los que inventan las supuestas necesidades, y tienen deseosos vasallos de ver reflejados sus papeles de víctimas.

Según la cita de Arnold S. Toynbee: “El espíritu de la nacionalidad es la agria fermentación del vino de la Democracia en los viejos odres del tribalismo”, nada objetaríamos al nacionalismo si pretendiera crear una sociedad donde exista un mayor grado de libertad que el precedente. Un lugar donde a nadie se le persiga por no querer ser monolítico, o discrepar con la idea que pretende darse en las campas a los militantes. Donde un grupo político no nacionalista pudiera llegar a conseguir una mayoría y decidir integrarse en una unidad mayor, criticando los mini estados de los políticos nacionalistas, cediendo con ello autonomía por ejemplo a la idea de Europa, porque pensase que no sirve de nada tenerse por siempre una entidad única y autónoma, porque puede haber un proyecto positivo que vivir fuera de unas fronteras.

Lo que los nacionalistas hacen es pervertir dos conceptos cercanos pero radicalmente diferentes. Isaiah Berlin distinguía entre identidad nacional y el nacionalismo. Lo primero, son aquellos rasgos culturales y étnicos que comparte un grupo social, y que de forma natural sus ciudadanos tienen por simpatía entre sí. El nacionalismo en cambio es la exageración de la conciencia de esa identidad nacional, buscando las diferencias y las hostilidades con los otros colectivos diferentes, y procurando en todo mantener viva memoria de las agresiones sufridas por la identidad nacional, exagerando dichas agresiones convenientemente, reescribiendo la historia a gusto del político nacionalista desde los oportunos departamentos subvencionados. El nacionalismo siente por sus valores, leyes o maneras de pensar un aprecio total porque considera “suya” esa manera de vivir. Cuando habla de necesidades nacionales, siempre lo hace para llevar a cabo proyectos que las satisfagan por encima de cualquier consideración a la que tildará de enemiga de su pueblo si es distinta. Y si sus objetivos son opuestos con los de las otras naciones o territorios, intentará doblegar a estas naciones incluyendo la fuerza entre sus métodos.

Los partidos nacionalistas vascos han hecho de esta estrategia su sello original, esgrimiendo en todo momento una historia de persecución e insulto ( que nadie por otra parte pone en duda cuando hablamos del franquismo) pero que esconde en el subsuelo como si no hubiera existido, toda la larga historia de integración por ejemplo en la corona de Castilla, fructífera unión durante siglos para el comercio, la construcción naval, o la intelectualidad de las ciudades vascas, colaboración anterior con los romanos, o espléndido devenir de importantes hombres vascos en la historia de España, que nada les hacía perder del amor a su tierra y de pertenecer a un proyecto común. De todo esto nadie quiere hablar en los círculos nacionalistas vascos, como si nunca hubiese existido ese pasado de armonía, y prefieren inventarse igual que inventan mártires, filósofos y escritores vascos, una historia acorde con la idea de nación que los dirigentes nacionalistas tienen en su cabeza. Esquilmando y apartando a todos aquellos que no comparten esta visión, y llamando enemigos a los que no tragan con esa manera de ver la historia y su torticera utilización. Siendo uno de los ejemplos más lunáticos actuales, la idea paranoica del gobierno vasco nacionalista integrar a Navarra en su territorio cuando repetidamente el 90% de los navarros han votado a partidos que no desean ni de lejos esta unión. Pero como hemos dicho, para los nacionalistas esto no es ningún obstáculo porque únicamente hay que doblar por cualquier otro medio, la voluntad de esa mayoría que ellos piensan se ha descarriado de la visión mística de una gran patria vasca. Ya sea haciendo oídos sordos de esas consultas o callando cuando se producen atentados en Navarra dirigidos contra las personas e instituciones que no quieren esa integración por imperativo.

Lo que los dirigentes nacionalistas son incapaces de darse cuenta - o se dan cuenta y lo alimentan - es la cantidad de rechazo que sus ideas despiertan en la mayoría que piensa que se debe ir hacía un mundo más integrador y no hacía los reinos feudales como ellos proponen. Lo que los nacionalistas regionales nunca han entendido, es el nacionalismo español, muy dormido hasta ahora, pero que existe y tiene malos despertares, que forma parte de los mismos biorritmos sentimentales que los nacionalismos más pequeños, pero con distingos fundamentales que lo hace completamente diferente:

El nacionalista/ciudadano español no piensa en separarse de nadie, al contrario de las otras fuerzas más miopes, está dispuesto a dar poder e ir vaciándose de importantes funciones a favor de sus autonomías, Europa y organismos internacionales. No tiene ningún empacho en crear una nueva moneda, ceder sus directrices económicas y banco Central, política de defensa, comercio, normas judiciales a esa idea de Europa como gran estado europeo que convierta a España en una especie de autonomía dentro del mismo (la difícil y tirante negociación del núcleo de la futura constitución europea, demuestra las cesiones importantes de nuestro poder que están sobre la mesa. Al final siempre habrá cesión de poderes por parte del estado nacional) No tiene ningún vértigo el nacionalismo español en aumentar la cesión de su poder por una idea más grande que la propia España, porque un nacionalismo que busca integrarse en proyectos más grandes cediendo poder de gobierno propio, anula todos los efectos perversos del nacionalismo y aumenta en cambio las cotas de los ideales democráticos. Da, porque a cambio cree en un proyecto más grande y solidario. Los nacionalistas catalanes y vascos en cambio, egoístas de su búnker cultural, mezquinos en cuanto a las metas que les importan, reclaman día si día no, más poder para repartir a sus clientelas, mayores cotas de poder en sus pequeños territorios sin ver lo que está ocurriendo en el mundo.

Los nacionalsocialistas de nuestros días, del País Vasco y Cataluña, insultan diciendo que son maltratados o que les arrebatamos parte de su riqueza cuando nada es cierto. Culpan al resto del estado donde han encontrado prosperidad y cariño para crecer, de impedirles ser una gran nación, como Hitler culpaba a los judíos y la república de Weimar de torpedear su sueño de una gran Alemania. Pero sin saberlo como el austríaco, o sabiéndolo que vuelve a ser peor, despiertan la defensa de valores como la unidad nacional, la constitución pactada por todos, o la solidaridad que por fin hemos conseguido entre todas las regiones. Y este despertar puede incluso ser muy brusco, tanto, y esto la historia tiene muchos ejemplos, que un partido que no sepa leerlo a tiempo - llámese en este caso socialista -, puede ver de repente como el esqueleto de la mayoría de los españoles está compuesto por una idea difusa o clara de nación (¿Por qué en 1939 los republicanos pusieron tanto empeño en todos sus comunicados en llamar “españoles” a sus tropas, y hablaban de España sin ningún problema, sino era para que Franco dejase de encontrar acólitos de buena fe, por culpa de las disputas separatistas catalanas y los terneros del iluminado Sabino Arana?)

Una nación que ha dado las mayores cuotas de autogobierno que existen en Europa a sus regiones (la frase atribuida al Sinn Fein de que se conformaría con la mitad de autonomía que tiene el País Vasco) pero con una gran mayoría de sus componentes reaccionando cuando desde los nacionalismos han insultado primero y puesto en cuestión después la esencia de la convivencia, puede provocar si es necesario, que muchos votantes a la izquierda del PP hagan aquello que saben que les están empujando a hacer los nacionalistas con sus faltas de tacto; y es olvidarse por esta vez de que son votantes de un partido que tiene muy poco de socialista, español, y obrero, y votar en el futuro (disipada la idea de victoria) a uno que tiene al menos claro en estos momentos lo que siempre ha sido esto que llamamos España. Comportándose como pueblo soberano que decide cortar una situación consentida, y provocando lo que la historia nos ha enseñado otras veces (¿Por qué los afrancesados e inteligentes ilustrados, no entendieron la fuerza con la que el pueblo salió a la calle en defensa de la integridad del país? Después las dos Españas se unieron primero para lograr la unidad, firmar una constitución después en Cádiz y como otras veces, con Fernando VII como instigador volver a enfrentarse una vez recompuesto el estado) Nadie está diciendo que el PP sea la panacea de la política o no se equivoque nunca en este tema y otros muchos, pero le ha tocado representar el sentido común en estos años en este aspecto.

Si un patriota para mí es una mujer o hombre que ayuda a su pueblo en un momento de peligro, salvando o ayudando a la comunidad donde vive, o lucha por conseguir mayores cotas de libertades para cualquier otra comunidad en otros lugares distintos, en nombre de su pueblo, el nacionalismo acaba con esta definición apropiándose de los patriotas para utilizarlos como fuerza de choque de sus filas. De tal manera que hablar de patriotismo se convierte en algo tergiversado; ya que son patriotas para los nacionalistas aquellos que comulgan primeramente con el ideario político, y no podemos utilizar apenas esa palabra sin que sonrían los que valientemente se enfrentaron a un peligro y sólo pretendían cumplir con su deber ciudadano. Llegando a eliminar del vocabulario normal esta palabra que durante la revolución francesa de la razón, representaba a una persona dispuesta a proteger las libertades del pueblo y conseguir la fraternidad entre las naciones eliminando los poderes emanados de la herencia o la sangre.

El nacionalismo no se para a conocer la nación que pretende potenciar, sino que la pretende crear dentro de su ideología. La autodeterminación política que tanto le preocupa, la convierte en su discurso en la fundación efectiva de un estado independiente, cuando en realidad dentro de una nación pueden existir - si se ha potenciado la libertad - comunidades autónomas con un nivel de autodeterminación generoso y hermanado con las demás comunidades. Este discurso de la autodeterminación impuesta desde la cúpula política de los partidos nacionalistas - porque son los líderes políticos los que crean las revindicaciones gracias a su verborrea y medios de comunicación afines o subvencionados - consigue que no se hable de los verdaderos problemas sociales que de verdad pueden importar a la sociedad, como el paro o la salud, ya que estos problemas quedan enterrados o unidos en el gran proyecto de creación de esa majestuosa nación que pregonan en los mítines, y que conseguirá arreglar todo posible problema social - sin recordar que muchos años llevan en el gobierno, y podían haber ya arreglado esos mismos problemas con una mejor gestión - una vez se consiga la independencia, la cual (no sabemos como) traerá el maná de los bienes al pueblo por arte de gracia. Lo terrible de este discurso es que después no se arregla nada, y que cuando logra llegarse a ese estado deseado por los políticos, y los problemas no se arreglan, se decide cambiar el objetivo, hablando de anexionarse otros territorios, o de la riqueza que “los otros” no les dejan poseer o se busca una salida hacía delante entrando en el continuo enfrentamiento entre distintos estados, comunidades o grupos que los nacionalistas piensan que están resistiendo a la fuerza del estado recién creado.

Un ejemplo muy claro de esto es como Hitler una vez conseguido el poder, y proclamado legalmente canciller de Alemania en enero de 1933, no consideró que todo se hubiera arreglado o conseguido. En marzo de ese mismo año consigue el 43,9% de los votos junto con el 8% de sus socios de coalición, varios partidos también nacionalistas, más pequeños; toma el poder en los Länder que no estaban bajo poder nazi, obtiene para su gobierno plenos poderes legislativos. En mayo disuelve forzosamente los sindicatos, quema en las universidades los libros de autores “no alemanes” y en otros idiomas (búsqueda del otro. Y también una medida similar a la de los integristas como vimos) En junio prohibe el SPD (partido socialista) y en las semanas siguientes se disuelven el resto de los partidos incluidos sus aliados a los que ya no necesita. En julio promulga una ley que impide formar partidos distintos al “nacional”socialista. En marzo de 1935 se incorpora el Sarre a Alemania, tras un plebiscito con un 90,8% a favor de la incorporación. El 16 de ese mes se vuelve al servicio militar obligatorio. En marzo de 1936 Alemania ocupa Renania. El 5 de noviembre, encuentro en Hossbach donde Hitler plantea el problema del “espacio vital” y su solución mediante la fuerza. En marzo de 1938 las tropas alemanas marchan sobre Austria después de un ultimátum y la dimisión forzosa de su canciller. Entre el 29-30 de septiembre en la conferencia de Munich los gobiernos pacifistas europeos creen apaciguar a los nazis determinando la pertenencia a Alemania de los Sudetes checoslovacos -eran los tiempos en que Chamberlain dice que Hitler es un hombre simpático al que hay que escuchar -el 21 de octubre, los nazis preparan instrucciones secretas para destruir lo que queda del estado checoslovaco. En marzo de 1939 las tropas alemanas entran en Praga quedándose los nacionalsocialistas con Bohemia y Moravia y apoyando a los nacionalistas de Eslovaquia en su “autodeterminación”, bajo un tratado de amistad con Alemania. Ese mismo mes Hitler se anexiona Memel en Lituania, y comienza a exigir a Polonia la devolución de Danzing y el corredor polaco. El resto más o menos ya no es más conocido. ¿Se conformaron los nacionalistas alemanes con todo lo que se les fue dando bajo amenaza? No. Una vez que el pueblo alemán se había reunido entorno a los territorios de la gran Germanía, aparecían otros problemas, otras ofensas, otros enemigos a los que culpar de los problemas que Hitler y su partido fabricaban para ese pueblo. No importaban los logros sociales, económicos y de seguridad, lo importante era conseguir los objetivos nacionalistas sin importar las posibles consecuencias. Y fueron muchas y amargas, pero daba igual, el nacionalismo una vez entra a luchar, ya no tiene que inventarse ofensas ya que estas las produce la propia lucha, se encuentra en terreno donde se siente bien.

De hecho muchas cosas que se utilizaron por la propaganda totalitaria de los años 30, están volviendo a verse en estos últimos años cuando se busca una ruptura con la democracia por el nacionalismo. Una similitud con los nazis, es como ellos aprendieron rápidamente en sus primeras campañas políticas, que era vital contar con focos de atención cercanos a la burguesía y clase media, y sobre esta base hacer la pirueta de unirse a las clases más obreras y sociales, robando electores al partido socialista y comunista. Por ello se llaman nacionalsocialistas, nacionalistas alemanes buscadores de pesebres, sumados a los socialistas reivindicativos, la peor de las combinaciones, ya que no tiene el contrapeso de una fuerza política de centro o liberal que les haga ver la locura de declarar a un trozo de mapa, único entre los únicos.

Hace menos años, Milosevic, -socialista reconvertido a nacionalista -, en medio de la guerra de Yugoslavia, clamaba venganza a los servios por las muertes perpetradas por los otros nacionalismos contra ellos los serbios. Y primero se habló de autonomía para unos, luego de autodeterminación para todos, después fue la independencia a cualquier precio y más tarde la guerra abierta, los crímenes más terribles y la ocupación de la zona por la OTAN. Y ahora los nacionalistas servios, también los croatas, vuelven a tener apoyo en las urnas apoyándose en las humillaciones que les han provocado otras nacionalidades, silenciando o tergiversando las que ellos han provocado.

¿Qué nos dice esta sucesión de hechos en el ejemplo del partido nacionalsocialista o de los partidos nacionalistas servios? Nos dicen que los nacionalistas sienten una fijación por el poder de las armas, por la formación de inmensos ejércitos del pueblo, por los desfiles y la llamada a las armas para atravesar las fronteras en busca de “los otros”. Consiguen una afirmación nacional desde los dirigentes políticos no desde la gente corriente, luego es un despliegue de uniformados (policía propia, ejército, milicias…) al servicio del estado que ha conseguido la autonomía o autodeterminación, a los que después comienzan a manipular y acaban enviando a cumplir designios necesarios para la nación recién creada y que incluyen invasiones varias.

¿Por qué sino les gusta tanto a los partidos nacionalistas nuestros, tener cuanto antes una policía propia? Antes incluso que administrar áreas tan importantes como la sanidad, justicia o industria del territorio. Quieren cuanto antes poder diseñar los uniformes de su propia policía, educarla en sus academias, elegir a sus miembros entre los más cercanos al partido nacionalista (como se confiesa casi sin tapujos) que les va a dirigir. Sienten verdadero gozo de poder ver sus propias huestes armadas sin pararse a pensar que ya existía policía y que tenía los mismos deberes - se supone - que la recién creada. ¿Por qué les gusta tanto las patrullas, los escuadrones, los servicios de información paralelos a los gobiernos nacionalistas? ¿Para qué tanto exceso de vigilancia? Muchas veces me ha causado perplejidad esa desmedida pasión por crear policías autónomas de los que tienen una autonomía con problemas más graves.

La ilustración parecía habernos vacunado de los derechos de superioridad de los linajes dinásticos o de la sangre procedente de la nobleza, pero el nacionalismo habla de nuevo de RH+ y etnias. Cosas que en el siglo XXI uno creería desterradas de nuestras sociedades modernas por ser casi tribales, pero que se mantienen agazapadas y con gran peligro para la convivencia entre los pueblos por mucha importancia que algunos quieran quitarlas.

Hay una curiosidad reseñable en esto de los líderes nacionalistas, casi todos los importantes no eran de la nación a la que deseaban glorificar e imponer sobre las demás. Napoleón era corso, Gambetta era del sur, Stalin georgiano completo, Hitler todo el mundo sabe que es austríaco, De Valera irlandés a medias, Kipling estaba en la India y no en la Inglaterra a la que llegó para glorificar, Mussolini un joven comunista del norte al principio, De Gaulle era de Lorena. Hugh Trevor- Roper defiende que son los lugares donde se mezclaron o se mezclan las culturas donde se han forjado los más furibundos nacionalismos: La ciudad de Viena en los años 30, crisol de todo el imperio austrohungaro, Dantzing… en nuestro tiempo las multiculturales ciudades de la ex yugoslavia, o de la misma y eterna Jerusalén, partida en grietas por el odio al otro. ¿Y en España cuando llegan los castellanos al País Vasco masivamente a trabajar en su importante industria? ¿O cuando a Cataluña emigra gran número de otras partes de España? Es curiosa la coincidencia de la aparición del nacionalismo burgués en ambas zonas con la llegada y mezcla con grupos de otras partes de España.

Más que apoyar la tesis de Trevor - Roper sobre que el nacionalismo surge en ciudades donde las culturas distintas se mezclan, yo diría que surge cuando una burguesía acomodada satisfecha de sus arboles genealógicos y rentas, que tiene el poder asegurado gracias a su número, ve llegar a un grupo importante de otros ciudadanos que pueden, según ellos, hacer peligrar el equilibrio del poder en sus manos durante generaciones y eliminar la pureza de los suyos hasta ese momento intacta.

Es por este argumento y otras pruebas históricas por lo que pienso que el nacionalismo es antidemocrático. Aunque busca una apoyo popular mediante un voto masivo en las urnas, la clase dirigente nacionalista se comporta dentro de los cánones democráticos hasta que encuentra un techo social, es entonces cuando apoyándose en los votos ya conseguidos (no importan si no son mayoría o lo es de manera muy estrecha) cuando comienzan a hacer afirmaciones del estilo, “el pueblo reclama”, “este resultado demuestra que somos una nación”, y toda su posterior estrategia estará dirigida a acallar a la oposición si no comparte sus tesis, atraerla con las más oscuras promesas o simplemente ridiculizarla o eliminarla sino piensa como ellos creen que debe pensarse en su imagen de nación. No es que ya crean que una vez puede ganar un partido y luego puede ganar otro que no comparta sus tesis nacionalistas, que es algo lógico, sino que piensan y actúan como si su verdad fuera la única posible ahora y en el futuro, y no permiten que se piense que puede haber otra mayoría diferente a la que ellos pueden detentar, de hecho esta idea de llevar a cabo solo el plan que ellos defienden lo practican incluso estando en minoría, mediante amenazas y desestabilizando de la sociedad.

El ejemplo incipiente lo tenemos en el País Vasco donde un plan que fractura las leyes compartidas por la comunidad, como es la constitución, se quiere llevar a cabo mediante la coartada de que se tiene mayoría en la asamblea de la comunidad (cuando esa mayoría puede ser distinta dentro de unos años) cuando se sabe que el 50% al menos no lo apoya y reiteradamente a votado a partidos no nacionalistas, cuando una parte de los votantes del PNV ha manifestado que no quiere separarse más aún de España y por lo tanto sería falso lo de la mayoría, y cuando - y es lo peor -se pretende debatir y votar bajo la amenaza de una banda de mafiosos y terroristas, que empujan y llevan a cabo planes para apoyar a los partidos nacionalistas, ya que tienen Firmado un pacto claro y firme en Estella, entre ellos, los asesinos y los partidos nacionalistas del País Vasco.


Es casi seguro que en Cataluña y el País Vasco los votantes moderados y los dos partidos nacionales, si se les enfrenta a la fragmentación de su España que tanto les ha influido, con la idea de países regidos por gobernantes egoístas dispuestos a fundar su cortijo particular, tiendan a reunirse de manera natural en el partido que les preserve de semejante error (en la Guerra Civil, PNV y catalanistas intentaron atraerse después a un Franco vencedor, pensando que estaban tratando con la parte dialogante de España, demostrando el retorcido dictador que ambos utilizaban los mismos medios nacionalsocialistas. ¿Por qué sino el PNV y la antigua HB estaban llamados a entenderse? ¿Empleaban el mismo lenguaje de fuerza?) Es por ello que al final no asistamos a un choque de trenes real entre nacionalistas que tienen mayorías claras en sus autonomías en el futuro, contra un nacionalismo español insultado que decida dar una mayoría aplastante a un partido con sentido del estado. Sin saberlo - o sabiéndolo - Carod Rovira, Arzalluz, Madrazo, Maragall, Saura o Ibarreche pueden encontrarse por culpa de gritar consignas trasnochadas en sus patios traseros, con un pueblo afrentado que decide por mayoría soberana, empezar a poner coto a lo mucho que de antidemocrático se esconde en la propia forma de los nacionalismos. Los cuales cuando llegan a este punto, pasan por encima de constituciones, el derecho, el criterio razonable, la solidaridad y acaban cuestionando las bondades de la democracia añorando otras formas más raciales de gobierno.

Lo antidemocrático del nacionalismo se ve en que cuando consiguen el poder de los medios de comunicación públicos o los tienen afines, se sienten con argumentos para intentar educar a la audiencia explicándola que ha llegado por fin la hora de enseñarles la verdad sobre una historia que había permanecido oscura por culpa de “los otros”, y que en realidad lo que debe votarse siempre son las tesis que están acordes con la imagen de nación que ellos tienen. De ahí los últimos rumores de una lista negra de periodistas en Cataluña que no son proclives al tripartito, y que Esquerra debe pensar, que hacen daño al proyecto de su nación libre y soberana. Al final, no creen en la democracia, porque si les votan a ellos es maravillosa, pero si no les da la mayoría suficiente para hacer lo que pretenden es que existen medios y grupos que les cuestionan y no les dejan lograr los votos que ellos creen deben tener, y por tanto es una democracia que deben perfeccionar ellos. Eso sin entrar en los múltiples ejemplos históricos donde los nacionalismos siempre acaban eliminando la democracia para poder llevar más rápidamente su proyecto de nación.

Para no alargar más este capítulo que cada mes nos duele más a muchos, que debe mucho a nuestra historia moderna y filósofos lúcidos como Fernando Savater, dejaré para otra ocasión mi opinión de los actuales nacionalismos hispánicos, incluido el español - que también tuvo en su momento una funesta historia como no podía ser de otra manera - y la mejor manera razonable y dialogada en que podríamos entendernos dentro de España y Europa, basándonos en las reglas que deben definir toda relación: libertad, igualdad, respeto, fraternidad, conocimiento y solidaridad.

Si que quiero poner un ejemplo de cómo estos conceptos de solidaridad, igualdad y fraternidad por ejemplo se han ido diluyendo, y al final desoyendo por la impregnación de ideas nacionalistas más egoístas en la sociedad y en los partidos de izquierdas, y este ejemplo que expongo es el tan traído problema del agua en nuestro país.

La alternancia en el poder es algo casi necesario al espíritu de la democracia, y produce buenas rentas al bienestar de los pueblos la mayoría de las veces. La vuelta del Psoe al poder puede representar una oportunidad de mejorar el bienestar de otra manera, haciendo que nuevos puntos de vista y nuevos enfoques a distintos problemas puedan ser abordados. Pero en temas fundamentales para la convivencia y el desarrollo de España, parece haberse nublado el sentido común de los dirigentes socialistas, aliándose de nuevo con la sinrazón ególatra de los nacionalismos (propia de su corpus ideológico) destruyendo el camino avanzado y acercándonos a un callejón sin salida a temas como este.

El agua potable es un bien muy escaso en la totalidad de nuestro planeta azul. Se calcula - las cifras varían según que organización no gubernamental las publique - que cerca de 4000 millones de personas no tienen acceso al agua potable en sus casas para beber o limpiarse. En el norte del planeta los grifos en alguno de nuestros aseos, baños, cocinas o mangueras del jardín sueltan esa agua tan preciado en el sur. Pero ahora este bien ha entrado en nuestro país en un debate de la mano de los nacionalistas.

Si alguien defiende que el río que pasa por su provincia, casa o comarca es suyo y el agua que hay en él lo va a cobrar si él quiere, está diciendo muchas tonterías y al mismo tiempo demuestra a las claras que es un ser intolerante y egoísta. Es como si en Soria quisieran cobrar a cada avión que pasa por su espacio aéreo, un canon debido a que existe la posibilidad de caerse y hacer un destrozo, y además dijera que son aviones llenos de turistas que se quedan en otras provincias; o como si yo pidiera dinero a la entrada de mi calle por respirar un aire muy puro que viene del jardín salvaje que tiene al lado, y me sentase fatal que otros “extranjeros” de otra calle vinieran a respirarlo. Lo que se necesita para vivir dentro de una comunidad no tiene precio, ni contraprestación automática entre los que han tenido la suerte de tenerlo en abundancia y los que han tenido la mala suerte de nacer alejados de ese don de la naturaleza, únicamente están obligados todos a cuidarlo y protegerlo.

El agua no es creada por ningún pueblo, tal vez los ángeles sean capaces de hacerlo y en el paraíso exista abundancia de todo, pero aquí en la tierra, uno tiene la suerte de nacer, irse a vivir, o encontrarse cerca de un río, o la mala suerte de vivir en un lugar donde no hay agua. Pero nadie la posee porque nadie la inventó, la creo o la produjo a titulo particular, no es lo mismo ser propietario de un pinar y cuidar con tus ahorros de que ese pinar crezca y de mucha madera, que vivir en una zona del norte donde llueve mucho y donde nadie ha inventado aún la máquina de hacer agua (se imaginan lo que diríamos si la gente del sur consiguiera mediante la ciencia-ficción, trasladar las nubes a su tierra y provocar falta de lluvia en el norte) ¿Cobrarían ustedes a un anciano por atreverse a respirar el aire puro si fuese escaso en el lugar donde vive?

Los líderes de Esquerra, la Chunta aragonesa y el Psoe de Aragón y Cataluña (no pregunten al Psoe de Valencia o Murcia porque no opina) se han subido al carro de apropiarse de este preciado bien -, ya comenté que el nacionalismo acaba defendiendo postulados egoístas y de superioridad frente a los demás sin enrojecer por ello -, diciendo que el Ebro no tiene que dar agua al sur. Y se intenta defender semejante apropiación de la naturaleza diciendo que el Levante, Murcia y partes de Andalucía, crecen demasiado. Venden muchas urbanizaciones a los jubilados extranjeros y apartamentos a la España del interior, y que el agua que se necesita es cada vez más para ciudades y pueblos que para la agricultura que también sigue creciendo mucho. Cierto, es una de las partes de España que más está creciendo y donde mucha gente quiere retirarse a vivir (seguro que todos conocemos a alguien que se ha ido a vivir a Benidor o la costa mediterránea) ¿Qué ocurre entonces? ¿Es la clásica envidia nacionalista por la riqueza de los “otros”? ¿Miseria humana porque no se producen proyectos atractivos en la imaginación de estos amantes de los ríos caudalosos en sólo sus territorios, y ven como emigran sus propios conciudadanos a mejores lugares para trabajar? Es todo esto y algo peor: la vileza del nacionalismo, una vez que es escuchada su idea de poner un precio a vivir en un lugar al que tienen envidia encareciendo lo que se necesita para subsistir. ¿Por qué el estado nacionalista de Israel controla desde 1967 el agua del Jordán y los principales acuíferos? Porque así tiene la mejor baza de negociación escondida - agua y desierto - y puede mantener llegado el caso en la miseria a Palestina. ¿Por qué los nacionalistas y el Psoe quieren controlar su agua? Ya lo he contestado al hablar de Israel, para que otros no sean más prósperos que ellos. O peor, consiguen recortar proyectos urbanísticos que provocarán paro, eliminan familias que no pueden realizar su futuro con recursos suficientes, cortan las alas al pleno empleo y a vivir más prósperamente, diciendo que no hay más agua, o crean mega proyectos para cobrar el agua más cara en una regiones que en otras.

Vamos a confiar en que se consiga el gran milagro de convertir grandes cantidades de agua salada en agua potable; Rivalizando con Moisés en el dominio de los mares. Una única desaladora ocupa 20.000 metros cuadrados y emite tanto CO2 a la atmósfera, como cantidad de salmuera (agua con exceso de sal. Envenenada a fin de cuentas) Algunas organizaciones ecologistas con vergüenza de su sometimiento a la izquierda, ya han dicho la locura que esto representa. Lo peor es que se necesitan docenas de ellas ocupando playas y destruyendo litoral que es el oro del turismo, para conseguir el agua necesaria para el levante. Los agricultores valencianos llevan invertidos 500 millones de euros de sus bolsillos y en subvenciones para ahorrar agua en el regadío. Y si aún así son gente emprendedora capaz de poner mayor número de hectáreas y negocios en marcha con mayores necesidades acuíferas, aplausos de todos, porque España necesita más emprendedores y puestos de trabajo.

Nadie está diciendo que deba ser un trasvase siempre abierto, sin control ni expertos de las cuencas hidrográficas que lo controlen, nadie ha dicho que la cuenca que da no vaya a tener un límite, y que tocado este límite se corte el flujo por los expertos para mantener intacto el ecosistema. Y nadie parece caer realmente en la cuenta que el trasvase se ha trasladado a la desembocadura del Ebro, allí donde el agua se pierde porque sale al mar, para que los aragoneses se den cuenta de que están siendo utilizados y ningún litro de agua que pasa frente a sus casas se pierde, sino que va ha aprovecharse antes de desembocar al Mediterráneo (se imaginan que España montase una crisis porque Portugal quisiera llevar agua de Oporto al Algarbe más seco, cuando esa agua se acaba perdiendo en el Atlántico) esto evidentemente ha encarecido el coste del agua ya que es un trayecto más largo hasta Almería y Murcia con canales pegados a la costa, pero se consigue que para la buena gente aragonesa deje de tener sentido protestar, ya que “su agua” pasa a ser “agua catalana” en un punto del río, igual que el aire de los Alpes es suizo e italiano según sople. ¿No es una inmensa tontería sólo de los políticos entonces, protestar por un bien que el mar acaba tragándoselo al final de su trayecto? Pues para el nacionalismo acostumbrado a causas como la limpieza de sangre, los colores de las banderas, y la defensa del territorio de la tribu, evidentemente ésta es una más de sus defensas irracionales y brutales del derecho de propiedad basado en el egoísmo de que esto es mío y me importa un pimiento la sociedad en la que vivo, si con ello sigo pareciendo el jefe de la manada de lobos que se queda con algo que todos necesitan.

Tampoco se debe cerrar la puerta a crear fondos pagados de aquellos lugares de ocio cuya materia prima sea el agua (parques acuáticos, campos de golf, acuarios, y otros negocios) y que dicho dinero conseguido cuando uno paga su cuota del club de golf o la entrada al parque acuático, se utilice en mejorar riegos o para la cuenca que está dando el agua. Sabiendo que un campo de Golf produce también puestos de trabajo directos e indirectos en abundancia. Pero a nadie se le puede multiplicar el cobro de dicho bien por irse a vivir de Ciudad Real a Alicante, ya que agua necesita, y les daré una razón más en defensa de esto último que acabo de decir.

Se supone que la región rica y populosa que necesita agua, ya tiene la suerte de ser más rica y encima le regalamos el agua, pero el postulado es mentira. Porque una región rica en nuestra constitución solidaria - de momento- que conseguimos entre todos los partidos forjar, los que más tienen más aportan al fondo común. Y Valencia, Alicante, o Murcia por ejemplo que necesitan agua son provincias que dan dinero para que otras provincias prosperen igual que lo hace Madrid o Cataluña. Castilla y León, Castilla -La Mancha, o “Aragón” por ejemplo, no podrían mantener su nivel de vida actual en todo su territorio con sólo los impuestos de sus poblaciones, Castilla y León para seguir con el ejemplo la región más extensa de Europa no llega a la mitad de Madrid capital en población. ¿Quién está pagando a quién si nos pusiéramos a contar en plan miserable el dinero, al estilo de los nacionalistas cuando nos quieren incordiar?

Podríamos hablar de los gobiernos nacionalistas turcos que en algún momento pensaron en cerrar las presas con el agua que baja a Irak por el Tigris y Eufrates, al nacionalista egipcio Nasser que construyó la presa de Assuán para controlar el agua del Nilo sin pararse a pensar en lo bueno o lo malo, o en la profusión por construir presas de todos los dictadores nacionalistas (Franco, Mussolini, Hitler, Stalín…) pero no serían pruebas contundentes de que el nacionalismo siente fijación egoísta y de apropiación por la fuerza del agua. Digamos que a los nacionalistas les estimula pensar que el agua de la tierra que creen suya - como lo es un cortijo para un cacique -, es suya y sólo suya.

Por eso habrá guerras en Palestina mientras los tributarios del Jordán los decidan los israelitas por decreto. Y en otros muchos lugares ocurrirá lo mismo, porque un líder radical nacionalista decida cerrar el grifo del agua a su vecino un mal día. Por ello el agua debe ser regulado por quien lo ve nacer, pasar, recibe y da, todos al mismo tiempo. Y la decisión de cerrar un grifo debe ser tomada cuando peligre la extinción del propio bien y por todos juntos para no cometer tropelías. Controlado por todos en un mismo plano y sin ser propiedad de nadie se consigue lo más razonable. Puede resumirse al final que es justo que no tenga precio el agua entre autonomías, ya que es necesario para todos los que lo ven y es el oro de nuestro tiempo al mismo tiempo.

Se podrían poner más ejemplos de cómo los principios de solidaridad, igualdad y fraternidad principalmente son destruidos hoy en día por el auge de los movimientos nacionalistas. El nacionalismo no sólo está conectado con el problema del auge del islamismo en el sentido que en las sociedades árabes, ambas ideologías se han enfrentado a muerte e intentado quedarse con el mismo espacio político, el ejemplo más claro lo tenemos en Palestina, con la lucha por conseguir la supremacía entre la OLP y el movimiento Hamas. Lo cual ha provocado en muchos casos el radicalismo de las tendencias islamistas, como fue el caso del FIS en Argelia cuando los militares nacionalistas les cerraron el paso sin tener en cuenta el alcance del movimiento entre el pueblo, o las reiteradas represiones que el régimen de Sadam Hussein llevó a cabo entre las organizaciones religiosas sobre todo chiítas. El nacionalismo árabe ha creado los peores monstruos en el movimiento islamista, por culpa de su intransigencia y proyectos mesiánicos a cualquier precio propio de los movimientos nacionalistas.

A parte de esta conexión directa de enfrentamiento y envenenamiento entre nacionalismo árabe e islamismo, en el caso de España se refuerza con el problema que tenemos estratégico de nuestra posición con Marruecos y esa reclamación directa de Al Qaida de Al-Andalus como tierra a conseguir para dar el Islam. Para poder enfrentarse a ambos problemas con probabilidades de éxito, España tiene que dar garantías de unidad, y no de que una parte de la población en determinadas regiones no esta dispuesta a defender Andalucía o los intereses nacionales en el Sahara por ejemplo. Es ir hacía el suicidio de nuestros valores más queridos si por ejemplo ante la anexión que pretende del Sahara Marruecos, una parte de las autonomías no desea tan siquiera poner en tela de juicio junto con el gobierno español semejante anexión. Tenemos que darnos cuenta que son pasos que van llevando hacía siguientes objetivos. ¿En qué medida un nacionalismo fuerte en ciertas regiones de España, no está dando alas para que algún día Marruecos reclame las Canarias? ¿No sería acaso la palpable demostración en esa autonomía, de que sus propios partidos autóctonos se podrían quedar solos por apoyar una España más disgregada? El principio de solidaridad en partidos nacionalistas radicales (no es el caso de Coalición Canaria tampoco, ya que es un partido con cierto sentido común y sabe de su cercanía a Marruecos) salta por cuando se olvidan de la Unidad.

Mas claro parece el problema de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde un auge del nacionalismo en ciertas autonomías de peso en España, puede dejar indefensas estas ciudades frente a un Marruecos hipotético dispuesto a romper la baraja e ir a la guerra contra un gobierno al que percibe como débil, y miedoso de cualquier guerra por impopular. Ambas ciudades podrían caminar por el filo de una navaja si el aumento de los nacionalistas en Cataluña o Galicia (en el País Vasco estamos ante un proyecto de disgregación de España directamente) debilitase una política nacional de firmeza frente a cualquier provocación. El presidente Zapatero, a pesar de su bondadosa estampa, debe darse cuenta que Marruecos puede lanzarse sobre esas ciudades conseguido el Sahara, ya que debe marcarse nuevos objetivos conseguido el del Sahara. De hecho esta región funciona como un colchón de momento, ya que mientras no sea territorio marroquí, parece que otros proyectos imperiales pueden esperar. Pero también darse cuenta que si aún así, el reino de Marruecos decide tantear la toma de territorios españoles, una España con un discurso claro sobre lo que hacer llegado el caso, tiene muchas más garantías de éxito que una España dividida y manejada por nacionalismos periféricos, y eso el servicio secreto marroquí lo sabe de sobra.

Los nacionalismos españoles están conectados con el problema del nacionalismo árabe y el tema del islamismo, en el sentido que es un síntoma para ellos de debilidad para poder atacarnos más fácilmente. Si los islamistas, desean la recuperación de Andalucía por su parte, podrían encontrarse las mismas excusas entre los nacionalismos del norte para defender la preciosa región del sur de España que cuando hablan de la unidad de la nación. Los Andaluces tienen que darse cuenta que son un objetivo claro en los comunicados de las organizaciones vinculadas a Al Qaeda y que posibles revindicaciones en el futuro pueden llevar el dolor. Si no existe llegado el momento un partido que defienda la unidad y la igualdad en todo el territorio de España, puede ocurrir que los andaluces vean en el futuro como una locura haber votado mayoritariamente a un partido, que nos es capaz de defenderlos con la misma solidaridad en todas las regiones de España. ¿Están dispuestos los socialistas de Maragall a defender Andalucía en un conflicto con los islamistas donde probablemente habría que tomar medidas para destruir a los terroristas? ¿Podría ocurrir que fuera el partido de centro derecha, el que tuviera claro el discurso de que todas las partes del Estado son parte de la integridad del mismo, mientras que la coalición socialista y nacionalista pusiera en duda una defensa total de una parte de España como Al-Andalus? ¿Sería entonces más igualitario, fraternal y solidario el centro derecha que la izquierda de siempre?

El nacionalismo de las regiones periféricas es un problema incluso dentro de una respuesta unitaria de los dos grandes partidos nacionales a un problema de reclamación territorial del islamismo, debido a que uno de ellos sufre desde Cataluña la tentación de la fragmentación. Una solución de primera instancia pero demasiado visceral, sería el resurgir del nacionalismo español para defender la integridad de la nación y conservar los valores y bienestar que poseemos con respecto al mundo islámico. Y no es buena solución porque esto ya vimos a lo que conducía en otras etapas de la historia de España, como fue la llegada al poder del general Primo de Rivera por el problema de los nacionalismos y del problema marroquí. En aquel momento el pueblo le pidió al general que arreglara las cosas, pero las consecuencias futuras tal vez no se midieron con frialdad por las masas que en principio apoyaron la dictadura suave del general. España misma debe darse cuenta sin llegar a situaciones de emergencia, que problemas como el reparto del agua o la creación de selecciones oficiales de deporte por ciertas autonomías, son un desgaste que le puede llevar a mayores abismos en el futuro. Que todo lo que disgrega trae malas consecuencias, y que la unión con comunidades superiores en cambio trae beneficios.

En ese sentido la Constitución Europea es una oportunidad para reforzar nuestra defensa ante las posibles amenazas naturales que tiene España. Entre sus principales artículos se encuentra el que deniega todo derecho a que se desgajen nuevos estados de un estado ya miembro. Sobre este punto se ha hecho poco hincapié por parte de los partidos de los políticos, aunque hay que decir que en su conjunto toda la constitución es una gran desconocida para el público o incluso los políticos. Es también fundamental el capítulo que trata de la nueva política de defensa común entre los miembros de la Unión, con una cláusula automática de defensa común entre sus miembros; ¿significa que nuestros problemas en el Norte de África estarían cubiertos por esta cláusula de defensa? Si uno de los estados miembros es atacado deben acudir en su defensa los demás estados de manera automática, parece claro que si la constitución se ratifica y explica por todos, tendremos muchos aliados. ¿Pero ha quedado convenientemente claro de la manera que se ha elaborado la constitución y negociado después entre los estados? ¿No hubiera sido mejor que España hubiera tenido un peso mayor en las decisiones de cara a conseguir después una solidaridad más fuerte en otras materias más sensibles? ¿No se ayuda antes a un país que tiene poder en sí mismo que a un país con un poder pequeño?

Sobre los peligros y desvalorizaciones de convivencia que provoca el nacionalismo no quiero extenderme más, porque se situarían en otros muchos contextos que tienen que ver menos con el problema islamista y de la estrategia con el mundo árabe y sus probables implicaciones. Hablar de que autonomías contribuyen más al fondo común de otras, y no entrar a valorar el desarrollo general de todas, no es momento aquí, responder a preguntas como: ¿contribuye como dicen los nacionalistas Cataluña al desarrollo de otras autonomías, o también estas contribuyen a su vez haciendo que las empresas catalanas crezcan sobre manera gracias al conjunto de los mercados? Sería hablar que todo forma parte de un desarrollo global y no de un reparto de propinas egoísta estrecho.

Lo importante de este problema que debemos poner en relación con el problema islamista, es que nos hace enormemente débiles con relación a posibles crisis. Todo lo contrario a la posición por ejemplo de Francia en el mundo árabe, y Marruecos y el Sahara en particular, que nos ha hecho perder terreno en ciertos momentos históricos en el Norte de África, aunque hay que repetir que para los movimientos islámicos Francia también es un objetivo a batir, como demuestran las muchas células terroristas desmanteladas con planes de atentado este mismo año 2004, también existe cierto peso en sus relaciones de su pasado colonial. Lo interesante y lo eficaz, sería que España con una sola voz, pudiera conseguir un acuerdo en Europa sobre el Sahara, convenciendo a Francia de que eso es bueno para ambos países y todo el sur de Europa.















EPILOGO

Dentro de la esperanza queda un estudio y comparación de los dos modelos humanos frente a frente en este libro. El hombre Productor Consumidor de Occidente, basa su esencia en un núcleo duro de valores económico - biosíquicos, es decir valores que tienen que ver con la producción de riqueza, renta, bienestar económico, dinero y bienes con valor, junto a valores que nos hablan de la salud, culto al cuerpo, la estética del deporte y la competición, el placer y el ocio como medios de evasión, todo lo que tiene que ver con lugares de relax e industrias dedicadas a conseguir placer y entretenimiento. Este núcleo duro conforma el resto de los grupos de valores que existen en un modelo humano: los valores éticos, religiosos, políticos…haciendo que tengan menos importancia o sean menos citados y tenidos en cuenta por el HPC, cuando deberían estar al mismo nivel y en su misma medida representados, ya que todos son iguales en importancia y dan la medida de un hombre completo. Pero en el HPC el núcleo duro de los valores económicos - biosíquicos forma un poder oscuro que atenaza al resto de los valores, y nos muestra el poder del reverso en el dinero y lo dionisiaco, cegando el resto de valores la mayoría de las veces.

Por el contrario en el Modelo de Hombre Musulmán, el núcleo duro lo forman los valores religiosos, los cuales, igual que nuestro núcleo duro, conforma el resto de grupos de valores (económicos, éticos, biosíquicos, políticos…) y los convierten en algo secundario respecto a ese núcleo duro. De tal manera que los valores religiosos en la evolución al Hombre Islamista dentro de este modelo, acaban tragándose todo el resto de valores del espectro, ya que son los textos sagrados los que rigen toda la vida social, política, familiar… del hombre musulmán en ese estado islámico perfecto, según este modelo poco estudiado.

Habría que hacer un largo estudio por medio de la comparación de los modelos humanos para saber si ambos modelos se están enfrentando, se enfrentarán o será sólo una hipótesis, o la diferencia de modelos ya implica un enfrentamiento cuando contactan en sus zonas geográficas.

Siendo este estudio el que nos daría las claves de cómo y por qué, Occidente y el islamismo musulmán han reavivado los conflictos que en una principio prendieron hace siglos entre ellos. ¿Qué está en juego realmente en este conflicto cada vez más global? ¿Qué modelo de hombre prevalecerá en caso de lucha abierta? ¿Debe prevalecer alguno de los modelos de hombre? ¿Por qué no pueden convivir cada uno en su espacio geográfico respetando la esencia y vida de cada uno?

Son preguntas a responder en otros libros, explicando antes, para que así pueda entenderse profundamente, que es la teoría de los modelos humanos y como es el nuestro. Intentando con ello buscar regiones de entendimiento con otros posibles modelos, y anticipando posibles fracturas en el futuro, para que tengamos siempre la esperanza de que volverá a salir el sol otra vez mañana para todos nosotros.























Breve bibliografía de Gilles Kepel, para entender y estimular la razón, acerca del Islamismo.

Gilles Kepel,
La revancha de Dios: Cristianos, judíos y musulmanes a la reconquista del mundo, Madrid Anaya & Mario Muchnik, 1991, 313p.
Faraón y profeta, Barcelona, Nuchnik, 1988, 300p
Al oeste de Alá: la penetración del Islam en Occidente, Barcelona, Paidós, 1995, 350p
La yihad: expansión y declive del islamismo, Barcelona, Península, 2001, 605p
(Dir): Las políticas de Dios, Madrid, Anaya & Mario Munichnik, 1995, 363p (actas)























Nota: En estos momentos ha salido un libro fundamental de Gilles Kepel, para entender todo lo que está pasando y que haría cambiar o modificar algún párrafo de los que comentan nuestro terrible atentado del 11 de marzo:

FITNA Guerra en el corazón del Islam, Editorial Paídos 2004
Lo recomiendo encarecidamente, si se quiere saber las dos estrategias que están siguiendo las dos partes enfrentadas.



























INDICE


Prólogo 1
Los tres autores fundamentales del islamismo 6
Arabía Saudí, la ideología wahabita 24
(Islamismo en los demás países árabes)

Egipto y Argelia, su guerra contra el islamismo 57
Europa objetivo islamista primordial 68

La Primera Guerra del Golfo Pérsico y el régimen talibán 74
Osama ben Laden y al Qa’ida 84

11-S y la guerra de Afganistán 88

La guerra contra Sadam Hussein 100
(La Segunda Guerra del Golfo Pérsico)

11 de marzo del 2004 118

Profecías (Conclusiones) 125

Las Mentiras de los nacionalistas 132

Epílogo 157

Bibliografía breve 159